A Rainy Night ☔ l JaeYong NCT

Chapter 12

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- ¿De dónde vienes? 

- Cero preguntas Ten, ahora lo que menos quiero es dar explicaciones - caminé hacia las escaleras para subir a mi habitación

- Pues tendrás que darlas sino mi madre te colgará, ya sabes como se pone de histérica - bufó

- Yo.. mmh, ven aquí, quiero que me ayudes a salir de esta ¿okay?

- ¿Me debes una? - sonrió malicioso

- Eishh, lo que quieras

Asustado era poco, mi corazón se había desbocado cuando escuchó esas dulces palabras provenientes de Jaehyun. Había dado un vuelco total, él ya era un adulto y yo era un simple crío a su lado ¿qué podría ofrecerle? A mi parecer habían muchos chicos y chicas contemporáneos a él, de una belleza envidiable, constaban de madurez y podían entregar mucho más de lo que yo estaba dispuesto. ¿Por qué yo? ¿Qué tenía que los demás no? Simplemente no lo entendía, lo dicho solo había conseguido asustarme. Me abrumaba, tenía tan solo 19 años, edad en la que toda relación es efímera y no me veía envuelto en una situación seria.

Hice señas para que Ten me siguiera, subí las escaleras y entré sigilosamente al dormitorio. Todo estaba en orden, hace mucho que no había estado allí, se sentía frío, vacío.

- Entonces, empieza contándome todo - dijo tras mio cerrando la puerta

- No es cosa de niños, Ten

- Entonces que te escuche nuestra madre - tomó la perilla de la puerta y la abrió - suerte

Lo sujeté del brazo impidiendo algún movimiento en contra, lo halé e introduje nuevamente al dormitorio.

- No te atrevas - sentencié

- No estoy con juegos Taeyong, habla de una vez - se cruzó de brazos y se arrimó a la puerta cerrada

Si de edades hablabamos, yo era otro niñato y al pensarlo bien, quizá él tenía más experiencia que yo en el tema

- ¿Alguna vez te han dicho que te quieren? - pregunté

- Si, muchos, tú, Seulgi me lo dice todo el tiempo, mi madre tamb-

- ¡No! No ese tipo de.. ¿amor?

- Al grano Tae

- Me refiero... ¿Alguien ha declarado su amor por ti abiertamente? No amor filial, sino, de pareja.

Me miró inquirioso, una sonrisa asomó en sus labios y se aproximó paso a paso lentamente hacia mi, levantando las cejas de forma pícara.

- Teayonggie~ ¿Quién es el susodicho? ¿Eh?

- N-nadie - desvié la mirada

- Las cosas como son, fuerte y claras - me hizó cosquillas en el abdomen provocándome una carcajada

- N-no s-sueltame - reí fuerte

- No hasta que me lo digas, con detalle y todo - continuó, hasta que no pude más

- B-basta, n-no - lo empujé pero fue en bano - e-est-ta b-bien y-ya

Me sobé el sitio dónde hizo cosquillas, dolía un poco. Lo invité a sentarse a mi lado y dejé ir un profundo suspiro.

- A pesar de que tienes tan solo 17 años, siempre he pensado que sabes más que yo en cuestiones amorosas, espero lo entiendas.

- Bueno... eso es un tema aparte - se sonrojó

- ¿Acaso me perdí de algo? - abrí los ojos de par en par, no todos los días veía esas expresiones en Ten, era algo nuevo.

- De eso hablamos después, dime ¿qué sucedió?

- Sabrás que no he estado en casa siquiera unos 3 días

- ¿¡Tres!? ¿Has perdido la noción del tiempo? No has venido ya una semana y créeme, mamá ha estado fuera de sí y peor cuando hace un par de días llegaste y te desvaneciste en la puerta de casa. Nuestro padre no sabía que hacer al respecto cuando escuchó los gritos de mamá y Seulgi desde el segundo piso, te prometo que si no hubiese llegado unos minutos después, no sé qué habría pasado

- Lo siento, yo solo.. no me sentía bien, y es que él hace de mi un desastre

- ¿Él? - inclinó su cabeza en forma de confusión

- Dijiste que habías conocido a alguien interesante, ¿lo recuerdas?

- ¡Oh! Espera, más bien dicho, me encontré con Jaehyun - dijo sonriente

- Si, lo se, la noche que salí de casa llovía inscesablemente y yo estaba todo empapado. Sin él, no sé que hubiese sido de mi, me habría hechado a perder, su calor me acogió y me dejé llevar, bueno, mejor dicho, mi omega lo hizo.

- ¿Tu omega? - me miró seriamente

- S-si - mis ojos se cristalizaron

- No digas que es lo que creo que es - su rostro se palideció

- Y-yo.. - mi voz se quebró - no se cómo pasó, solo, él llegó de la nada y ahora resulta que es mi mate y mi lobo me exige que lo acepte.

- No puede ser

De la nada ladeó mi chamarra, dejando al descubierto mi cuello y hombro. Se relajó al confirmar que su inquietud no era acertada.

- No lo hice, tranquilo - respiró lijero

- ¿Sabes lo que diría mi madre de esto? ¡Es ineceptable, sus creencias son muy rígidas, y el hecho de que estés con un alfa y no una hembra como ella desea la volverá loca!

- Lo se - sollocé - no se que hacer, esto es más serio de lo que creí

Ten me abrazó, tan fuerte que parecía abrazarse a sí mismo, estaba temblando

- ¿Qué sucede, Ten?

- No es nada - se apartó y me regaló una hermosa sonrisa - te apoyo, si llegase a pasar algo, recuerda que estoy de tu lado

- ¿Sabes cuánto te quiero, pequeño?

- Me lo has dicho muchas veces - me palmeó la espalda - ¡Vamos! No llores, hay que buscar una buena escusa para mamá, aunque creo que Seulgi está de nuestro lado en este asunto

- ¿Por qué lo dices?

- Porque cuando te fuiste con tu Alfa en el hospital, le dijo a mamá que tenías que reposar un par de días más. Desde ese día se supone que ella ha estado a cargo de ti y tu estadía allí. Mamá no sabe de esto

- ¿Por qué lo hizo?

- No tengo la más remota idea - dijo sin darle imporancia

Entonces... su quietud en el hospital fue extraña y su silencio aún más

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Hola amores

Siento mucho la tardanza

Muchísimas gracias por leer

Si quieren algo especial no duden en pedírmelo

L@s amo

Bye ☂