Es el segundo día en Asterwoods High y las miradas por parte de todos no disminuyen, mis hermanos y yo somos una novedad para la escuela y se nota que aquí las personas se impresionan con cualquier cosa.
Antes de la clase de educación física cuando me estaba cambiando en los vestidores, conocí a la chica que solía ser la mejor amiga de Isabella, una chica arrogante y prepotente, su nombre es Veronica y es un mal intento de Regina George, además cree que por ser la hija del director todos en la escuela deberían besarle los pies. Fue muy enfática que debería alejarme de Isabella y yo fui muy enfática en que no tengo porque hacerle caso.
La clase de deportes se divide en las chicas que son animadoras y las chicas que debemos quedarnos con un entrenador de 60 años gordo.
– ¿Las chicas solo pueden ser animadoras? – le pregunto a Isabella y ella asiente, es ridículo que las mujeres solo tengamos dos alternativas mientras que los chicos pueden elegir entre fútbol, baloncesto, voleibol y natación.
– La demanda de deportes por parte de las chicas era muy baja así que quitaron la opción. – me cuenta y es un poco decepcionante, aunque para ser sincera si hubiera otros deportes para chicas yo seguiría eligiendo estar con el entrenador gordo, dijo que trotaríamos cinco minutos y que luego jugaríamos quemados, no soy atlética y prefiero mil veces jugar quemados que estar entrenando y muriendo del agotamiento físico. – Yo solía ser animadora. – dice con nostalgia mirando a las animadoras siendo entrenadas cerca del equipo de fútbol.
– ¿Y qué sucedió?
– Todas apoyaron a Veronica y acabaron por sacarme del equipo. – que ridículo, completamente ridículo.
– ¿El entrenador lo permitió?
– Ellos manejan la escuela. – dice refiriéndose al grupo de Veronica y Aiden. – Nadie es capaz de enfrentarlos. – veo a Veronica acercándose a un chico que tiene en la camiseta el número "27". – Ese es Derek Rogers, el novio de Veronica y el chico que acabo con nuestra amistad. – es un chico de cabello castaño oscuro y tu tez es tan pálida como la de Edward Cullen. – Está en último año y contrario a lo que cualquier pensaría es rival de Aiden, sus egos chocan en la cancha y la mayor parte del tiempo no se soportan.
***
Estoy en mi casillero después de la clase de inglés avanzado, la profesora nos dijo cuál sería el libro con el que iniciaríamos el plan lector, para mi suerte en esa clase estoy con Kyle, de hecho, es la única clase que compartimos.
– Hola Addison. – dice una chica bajita y delgada, tiene el pelo enredado y la ropa desarreglada. – Soy Rachel. – su nombre me suena, pero no sé de dónde. – Has dado mucho de qué hablar y solo es el segundo día del año, te sacaron de clase con Aiden Campbell. Te juntas con Isabella West, la chica más rechazada de toda la escuela, eres vecina de Andrew Holt, tienes un hermano mellizo y un hermano mayor y tuviste un pequeño enfrentamiento con Veronica White. – esto es aterrador, pero me hace dar cuenta de donde me suena su nombre, fue ayer, Aiden y Barbara la mencionaron, ella fue la que hizo el post sobre nosotros en la aplicación de la escuela.
– ¿Necesitas algo? – pregunto un poco irritada, ya sé que está chica es una chismosa por naturaleza y lo último que necesito es darle más material para que siga publicando sobre mí.
– Eres un blanco perfecto para rumores, algunos dicen que Isabella te paga para que seas su amiga, otros están apostando sobre cuanto tardaras en estar en la cama de Aiden. Bienvenida a la secundaria Asterwoods. – dice con una sonrisa forzada y se da la media vuelta para irse.
Esa chica definitivamente está loca.
Sacó algo de comer y me voy a sentar a uno de los jardines de la escuela, encuentro un árbol donde hay un poco de sombra y me siento. Estoy comiendo una manzana verde y una barra de cereal, muchas veces estar solo puede ser realmente pacifico. Siento como alguien se sienta junto a mí, volteo como reflejo y me encuentro con los bonitos y profundos ojos azules de Andrew.
ESTÁS LEYENDO
Eres Todo Lo Que Quiero (BK 1)
Teen Fiction[TERMINADA] Cuando una decisión cambia todo lo que conoces, adaptarse no es fácil. Pero a veces debes detenerte y pensar que esa decisión fue lo mejor que te pudo haber pasado. Eso fue lo qué le pasó a Addison Smith, cuando su madre decidió mudarse...