Capítulo 32

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Narra María.

-Anna, ¿quién es?- pregunto pasando hacia la entrada. Justo cuando grito para mirar hacia la puerta de entrada del apartamento, veo a la madre de Diego, esta mujer ha sido como una madre para mí, me dejo dormir en su casa me dió de comer, y yo le he fallado, su hijo ha muerto por mi culpa, si no fuera por mí, en vez de tener el rostro demacrado, una ojeras enormes, y las arrugas en la frente más marcadas, si no fuera por mí, ella seguiría siendo esa mujer maravillosa que  me quiso como a una hija y que yo, aunque realmente no lo haya hecho yo, le he arrebatado a su hijo, está muerto y no va a poder verlo nunca más. Si dejo de lado mis sentimientos, ignorando todo el amor que sentía por ese hombre increíble, solo he hecho daño a su familia, que me aceptó con los brazos abiertos.

Corro hacia ella porque, aunque me sienta culpable, sigo queriendo a su hijo y a ella, le debo mucho y no sé cómo se lo devolveré. Le abrazo como no he abrazado a nadie desde que Diego recibió el disparo que cambió su vida y la de todos sus familiares.

-Perdóname.- digo en un susurro.- Te prometo que si hubiese sido más rápida yo me habría puesto delante de la pistola, tu hijo es un héroe, y no deberían habértelo arrebatado y menos de esa manera tan cruel e inhumana, por favor perdóname.- le digo sin parar de llorar y abrazándola cada vez más fuerte.

-Cielo, no es tu culpa, venga desahógate, te conozco y sé que te lo has guardado para ti suéltalo todo.- la abrazo con más fuerza y lloro en su hombro recordando todos los momentos que pasé con Diego.- Diego hubiese querido que le recordaras pero que no afecte a tu vida, entiendo que estés triste yo lo estoy, pero no podemos quedarnos en el pasado estancados o no seguiremos adelante nunca. Aún es muy pronto y esto no va a ser fácil, pero juntas  lo conseguiremos, por él.- me alejo para quitarme las lágrimas y ella me sonríe, yo en respuesta le sonrío pero con la diferencia de que yo tengo la cara con signos claros de haber llorado, pero tengo que controlarme y dejar de llorar.

Narra Anna

- Venga, pase, le invitamos a cenar.- dice Anna dirigiendo la vista al salón.

-Anna, no me trates de usted que no soy tan mayor, llámame Andrea, ya te lo he dicho y gracias por la cena, la verdad es que no lo he pensado mucho, ha sido un viaje exprés.- dice para calmar el ambiente tenso que hay por la pérdida de Diego.

- Andrea- dice María para llamar la atención de esta.- Anna tiene novio.- cambia de tema para que no sigan pensando en Diego.

-¿De verdad?- pregunta incrédula.-¿Dónde está ese muchacho? Quiero verlo.- ordena.

-En el salón.- digo para que por fin pasen al salón.- Es el que está sentado al lado de Robin.- señalo para que Andrea sepa quién es.- Se llama Nick.- él me mira y sonríe.

Me acerco, él se levanta y da dos pasos para besarme, un casto beso. Sin soltar mi mano nos acerco al lado de Andrea y dice:

-Hola, soy Nick, el novio de Anna ¿Con quién tengo el placer de hablar?- pregunta cortes Nick. Yo le abrazo por la cintura y el pasa uno de sus brazos por mis hombros.

-Soy la madre de Diego, llámame Andrea. Anna, has elegido muy bien, educado y guapo.- me guiña el ojo y se va a sentar al lado de María, quien a ocupado el sitio en el que estaba Nick al lado de Robin.

Así pasamos los siguientes días, donde trajeron el cuerpo sin vida de nuestro amigo desde América, tuvimos que declarar y contar lo que pasó, dando nombres, fechas y lugares de nacimiento en nuestras descripciones.

También mis padres han estado con nosotros y han conocido un poco más a Nick, cada vez lo quieren más pero como no hacerlo, si es un amor.

Después de tres días de lloros a cualquier hora del día y abrazos entre todos, llegó el momento de hacer la maleta para irme a Italia, a la boda del primo de Nick.

-¿Tienes todo en la maleta?-me pregunta Nick por quinta vez en media hora.

-Si, María y Lucía me han ayudado, ya te lo he dicho.- digo a Nick.- La verdad es que estoy nerviosa. ¿Y si no caigo bien a tu familia?¿Y si ellos no me caen bien a mí?¿Y si...- unos labios suaves con un sabor conocido me callan, el beso es suave pero poco a poco va subiendo de tono hasta tal punto que acabamos él acorralándome contra la pared y mirándonos a los ojos mientras calmamos nuestras respiraciones.

-Les vas a caer bien, tranquila.- me vuelve a dar un casto beso en los labios y se separa con una sonrisa en la cara.- Ven, cerramos la maleta y nos vamos ya al aeropuerto.- Asiento y me acerco para cerrar la maleta, el coge la suya y vamos al salón para despedirnos de nuestros amigos.

-Nos vemos la semana que viene, no hagáis cosa de mayores.- dice María mirándome a mí. Yo frunzo mi ceño y ella se ríe.- Es broma, haced lo que queráis pero con protección.- me pongo roja y me acerco a Lucía para abrazarla.

-No destruyais mi casa.- le pido cuando la tengo cerca.- Y dadle recuerdos a Andrea, sé que no ha podido estar.

-Lo intentaremos.- se ríe por lo de destruir la casa, y cuando ya nos hemos despedido de todos salimos hacia el aeropuerto.

-Entonces,- empiezo a decir cuando estamos en el coche de camino al aeropuerto.- solo en tu casa sois cinco hermanos.-digo recordando lo que me dijo de su familia.

-Exacto.- dice Nick.

-Tienes una hermana dos años mayor que tú, se llama Victoria; dos gemelos, David y Marco, que son un año mayores que tú y una hermana pequeña de ocho años, Rebecca.

-Muy bien.- me felicita.- ¿Qué más me puedes decir?- me pregunta.

-Tus padres se llaman Jason e Isabella.- añado.

-No está nada mal.- dice sin apartar la vista de la carretera.

-Mucho es, sois un montón. Pero puedo añadir algo más. Vamos a la boda de Alexander y Laura, y él es tu primo.- el aprieta la mandíbula y luego respira hondo y gira la cabeza para mirarme. Sus hombros se relajan y su respiración que era rápida se ralentiza.- ¿Qué te pasa?- le pregunto.

-Nada...- dice volviendo a mirar hacia la carretera.

-Vamos, dímelo.- Insisto para que me lo diga.

-Alexander es mi primo.- hace una pausa para tragar y poder libererse del nudo que tiene en la garganta.- y Laura, es mi exnovia.-añade tenso.

La Chica Del TrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora