Capítulo 15

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Narra Shawn

Cuando llegamos a mí casa busqué a mis padres lo más rápido que pude.

— MAMÁ, PAPÁ — grité.

— Shawn, ¿Qué pasa, cielo? — la dulce voz de mí mamá inundó el lugar y me hizo sentirme un poco más calmado.

— Mamá, Valentina...— las lágrimas se apoderaron de mí. Puedo parecer fuerte pero no lo soy.

—¿Valentina qué?, cielo — mí mamá me miró y luego miró a Rocío que se encontraba a mí lado cabizbaja — Ven siéntate un poco — dijo llevándome al sillón — ahora sí, ¿Que pasó? — ya estaba odiando recordarlo.

— Ella y Florencia, están en coma, mamá — dije antes de ponerme a llorar en su hombro.

— Ay, Dios mío — dijo y me abrazó — como puede ser — dijo llevándose las manos a la cabeza — ya está Shawn, mí amor no llores, sabes que ella y Florencia van a estar bien, tú tranquilo — me volvió a abrazar.

— Eso espero ma, eso espero. Ma, ¿Te puedo preguntar algo? — preguntó con lágrimas en los ojos.

— Quieres ir a verlas, ¿Verdad? — dijo mirándome

— Si mamá, por favor te lo suplico, ella y Florencia me necesitan, yo la necesito dije ya alterado.

— Shawn, cariño, tu sabes que tus estudios se ponen en juego, y que no va a ser tan fácil conseguir un pasaje, tu sabes que ahora no estamos muy bien económicamente para conseguir un vuelo, un hotel donde te quedes, y todo eso.

En eso interrumpe Rocío.

— Señora Mendes, yo ya tengo todo bajo control — dijo regalándole una "sonrisa" un poco fingida (ya que es difícil sonreír tan fácil después de lo que pasó)

— oh, cariño — mí madre le decía a todos "cariño" — no tenías que preocuparte, nosotros con Manuel íbamos a hacer todo lo posible para que Shawn fuera a ver a las chicas — dijo acariciando el hombro de Rocío.

— Señora... —mí madre la interrumpió.

— Karen — dijo sonriendo.

Rocío río sin ganas —KAREN, es lo menos que puedo hacer por su hijo — dijo tomando la mano de mí madre.

— gracias, gracias por ser tan generosa — respondió mí mamá.

Le pedí a mí madre que hablara con papá y Aaliyah sobre esto que estaba pasando ya que ellos ahora estaban en Vancouver porque se habían ido a la casa de mí avó.

Preparé mis cosas a la velocidad de la luz y salimos junto a mí madre a él aeropuerto.

— bueno Shawn, cuídate mucho, te amamos — fue lo último que escuché decir a mí mamá antes de que con Rocío entraríamos al avión.

Cuándo llegamos a NY nos estaban esperando la madre de Valentina y Nash

Subimos al auto y la mamá de Valentina habló.

— Shawn, muchas gracias por venir — agradeció.

— Es lo menos que puedo hacer, señora.

—¿Por qué me sigues diciendo así? Ya te dije que me dijeras María o Mari.

—perdón "Mari"— dije haciendo énfasis en la palabra "Mari"

— Shawn te vas a quedar en nuestra casa —dijo Nash

— me parece bien — no podía decir que no — tampoco tengo otro lugar para ir — dije bromeando. Todos reímos

Antes de entrar tenía miedo de ver el estado en el que estaba Valentina, tenía miedo de que verla herida. Tenía miedo de que esa fuera la última vez que la iba a ver.

Nos quedamos en la sala de espera como por unas 3 horas. Después una enfermera nos dejó pasar y ahí fue cuando pensé que mi vida se iba a derrumbar.

Ella estaba recostada en una camilla, con todo cables a su alrededor, sus hermosos ojos estaban cerrados, su respiración era lenta, tan lenta que se podía dudar si estaba respirando o no. Su cara estaba cubierta por unas vendas, pero igual dejaban al descubierto sus ojos, su nariz y su hermosa boca. Se le podían notar los moretones en la cara, sus labios los cuales siempre estaban mojados y rosados, ahora estaban secos y blancos.
Tenía uno de sus brazos enyesado al igual su pierna izquierda. Era todo tan horrible, nunca pensé tener que verla así.

Me acerqué a ella y con cuidado tomé una de sus manos, estaba fría, puede ver que sus uñas, las cuales siempre estaban bien arregladas, ahora estaban descuidadas y muy lastimadas, al igual que sus manos.
Una lágrima salió de uno de mis ojos, y la limpié rápidamente, no quería que ella me escuchara llorar. Sé que me escucha y que me siente, porque está en coma, pero no muerta. Gracias a Dios.

— Shawn — giré mí cabeza ante el llamdo

— ¿si? — respondí

— ya terminó la hora de visita — dijo Nash desde la puerta.

— ah, si. Ya voy—:dije sin ganas.

Besé la cabeza de Valentina, como suelo hacer, y le susurré un "te amo, nos vemos mañana". La amo demasiado, eso no va a cambiar jamás.


Espero que les guste.
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Gracias por leer🔥

Only Friends? °S.M° [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora