ABI
__¡Abi! Vamos que tenemos clases.
Hubiese jurado que la voz provenía de Ashley que me regañaba por quedarme dormida para ir al instituto. Apenas mi conciencia entró en contacto con la realidad, asumí que se trataba de un sueño, porque yo ya no iba al instituto y ya no vivía con Ashley. Sin embargo, alguien sí me estaba intentando despertar con exactamente las mismas palabras.
A medida que mis ojos intentaban abrirse, la clase de anestesia, en la que estaba sumida al dormir, fue desapareciendo para dejar entrar el dolor de cabeza al que estaría condenada el resto del día.Estaba en un dormitorio del campus, eso sí pude reconocer. Al igual que el rostro de Lea asomándose por la puerta.
Me incorporé lentamente y contemplé al chico que se encontraba profundamente dormido a mi lado. Estaba sin camiseta y dormía boca abajo. Los rizos dorados le cubrían parte del rostro, el cual no recordaba con precisión. ¿Lucas? No... ¿Zac? ¡Agh! Imposible saberlo.Inconscientemente miré a mi alrededor en busca de mis prendas, pero luego me di cuenta que seguía vestida. ¿Me vestí de vuelta o eso significaba que no había sucedido nada?
Bueno, supongo que durante el día comenzaría a recordar algunas cosas.__Tenemos que pasar por casa y en quince comienza la clase __volvió a recordarme y salió hacia el pasillo.
Esta vez me puse de pie con mi mayor esfuerzo y me calcé las zapatillas. Qué suerte que no había elegido los zapatos, ya que probablemente, si así hubiese sido, ahora tendría un esguince o fractura. Alcohol y zapatos altos no eran una buena combinación.
Tomé mi teléfono que estaba sobre la mesa de luz y salí de aquella pequeña habitación compartida. La verdad es que ni me fijé si había alguien en la otra cama junto a la otra pared. Lo que hace preguntarme: ¿Cómo sabía Lea que estaba en esa habitación? Quizás se quedó con el compañero de ricitos o sólo durmió ahi.
La claridad que predominaba en el pasillo me pegó de lleno en los ojos.__Joder __protesté y fruncí todas las facciones de mi rostro como respuesta.
Lea y yo comenzamos a andar por los pasillos en busca de una puerta de salida, a la vez que nos cruzábamos a montones de estudiantes. Algunos dirigiéndose a la clase con la mochila al hombro, otros saliendo de las duchas con solo una toalla cubriéndoles el cuerpo y algunos con el mismo nivel de resaca que nosotras. Me pregunto como podían soportar bañarse en duchas compartidas y pasearse por los pasillos casi desnudos.
Agradezco a la vida y a mis padres por haber sugerido la idea de que me alojara en una hermandad. Y la verdad es que tuve suerte en ser aceptada.__¿Donde está Vicky? __pregunté una vez que nos encontrábamos en la calle de residencia de la mayoría de las hermandades y fraternidades.
__No lo sé __se encogió de hombros y ambas nos echamos a reír.
Por una fracción de segundo, me quedé observando la hermosa sonrisa de Lea. La verdad es que la envidiaba un poco. Me gustaba su piel morena que, a diferencia de la mía, era capaz de esconder cualquier imperfección. Y también admiraba su cabello oscuro con algún que otro mechón rosado.
Apenas llegamos a nuestra residencia, nos echamos a correr escaleras arriba y a tomar nuestras cosas lo más rápido posible. Entré a mi habitación y busqué el cuaderno que necesitaba para la asignatura que me tocaba hoy: derecho. Lo metí dentro de la mochila y luego me apresuré hacia el baño, que compartía con Lea. Abrí la puerta al mismo tiempo que ella y nos encontramos las miradas.
Sin importarnos, nos comenzamos a lavar los dientes y lavarnos la cara.
Una vez que estuvimos listas, salimos de nuestras respectivas habitaciones. Pasé por la puerta de Victoria y decidí chequear si se encontraba allí.
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Bajo El Mismo Apellido ©
Novela Juvenil⚠️ATENCION⚠️ •Esta es la segunda parte de "Bajo el mismo techo"• Mientras que Aiden se ausentó todo el verano al irse de viaje con sus amigos, Abi pasó el tiempo intentando olvidarlo. Sin embargo, el verano ha terminado y es momento de mudarse al ca...