Quería regresar y hablar con Sakura de una maldita vez, me dolía tener que ignorarla, no quería hacerlo, no me gusta nada tener que aparentar que ya no me importaba.
Debí hacerle caso, Naruto tenía razón con lo que me dijo la noche anterior.
—¿Los viste? —preguntó molesto mientras caminaba alrededor de Naruto—. Ese estúpido se está aprovechando de la situación.
—Tranquilo, Sasuke, Sakura ahora mismo cree firmemente que está enamorada de Sasori y que se equivocó contigo, y debo decir que tú contribuiste a que ella se hiciera esa idea.
—¿De qué hablas?—paró de caminar y lo encaró, no sabía a que se refería con eso.
—Hablo de que la dejaste ir, idiota, si hubieras aprendido de tus errores, Sakura estaría contigo y no con él.
—Lo intenté, pero ella se veía tan cansada de mí, no quise forzarla a más, creí que era lo mejor.
—Tú así lo has querido, amigo, no te quejes.
Naruto no podía entenderlo, yo quiero a Sakura, de verdad, pero la ha pasado tan mal, que hasta yo sé que estamos mejor separados, aunque nos duela. El verla con Sasori realmente me desgastaba, sentí hervir mi sangre cuando ella le besó la mejilla sin que él se lo pidiera, y como podía hacerlo, si apenas notó mi presencia se congeló, quizá no esperaba verme ahí, o quizá pensaba que iba a golpearlo, pero no lo hice, no quería que Sakura me odiara aún más.
Luego de dos días mi cabeza seguía dándole vueltas a lo mismo, no sabía que hacer, la culpa y el dolor me estaban consumiendo poco a poco, ignorar lo que sentía ya no era tan fácil. Iba en mi camioneta camino a casa, acababa de salir de trabajar, iba manejando con tranquilidad cuando miré a Sakura caminar por la calle, bajé la velocidad para ir a la par de ella y bajé la ventanilla.
—¡Sakura! —giró su cabeza y me miró con sorpresa, supongo que le parecía raro que la llamara después de ignorarla, vaya que me sentía culpable.
—Hola —me sonrió, a pesar de ser un imbécil, ella me sonreía aún.
—¿Quieres que te lleve a casa?
—Ah, de acuerdo —me sorprendió un poco que aceptara, pero me alegraba. Se montó en el auto y arranqué.
—¿Vienes de trabajar?—preguntó Sakura para que no se hiciera un silencio incómodo.
—Sí, ¿y tú?
—Fui a comprar algunas cosas.
Me mostró sus compras, había artículos de higiene y un pequeño maletero, me parecía extraño que comprara eso, es decir, ¿para qué quería un maletero? Estacioné el auto frente a su casa y después bajamos, íbamos caminando a la entrada de la casa, no quería ser entrometido, pero mi curiosidad por las cosas que había comprado seguía.
—¿Y para qué son tus compras, Sakura?
—Saldré de la ciudad por una semana—le contestó sin mirarlo.
—¿Sola?
—Con Sasori —Sasuke palideció con su respuesta, su expresión de serenidad había cambiado totalmente, ahora la veía con frustración, no lo entendía muy bien. Sasuke paró de caminar, haciendo que ella hiciera lo mismo.
—No te vayas, Sakura, no con él.
—Vamos, Sasuke, realmente deseo hacerlo —le sonrió apenas, quería parecer segura delante de él—, quiero estar con Sasori, yo...
—¿Lo amas? —preguntó desesperado.
Sakura lo miró, puso una de sus manos sobre la mejilla de él, acariciándola un momento, hasta que Sasuke colocó su mano sobre ésta.
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Volviendo a ti |SasuSaku [#1]
Fiksi PenggemarUchiha Sasuke es un hombre realmente apuesto, de carácter frío y arrogante. Exitoso en cualquier ámbito de su vida, además de ser el mejor amigo de Uzumaki Naruto. Gracias al destino, él se reencuentra con su amor del pasado: Sakura. Estaba decidid...