CAPÍTULO 12

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CAPÍTULO 12

EDWARD

Durante el trayecto en auto hacía la casa de Tanya, no pude evitar pensar en Bella... ¡Joder! Estaba bastante cachondo... Solo el recuerdo de verla salir del baño al natural... ¡Mierda! Lo recordaba y...miré mi miembro que empezaba a despertar...¡Estaba preparado y con unas ganas enormes de follarme a Bella! Suspiré derrotado, teníamos que ir donde esa mujer...Aunque ganas de pararme a un lado de la carretera y follarla no me faltaban...¡Tranquilo Edward! ¡Luego recuperaría el tiempo perdido!

Durante el camino solo hablamos de cosas sin importancia, pude darme cuenta que conectábamos bastante, a pesar de todo... nos llevábamos bien... nunca antes me había pasado con ninguna de mis amantes... Siempre fue follar y listo... con Bella era otra cosa... Me pregunto porqué... tal vez... negué, no podía ser posible que me hubiera... ¡Ni siquiera podía decir la palabra sin que me diera repelús!... Tal vez lo que tengo es solo un encaprichamiento...

¡Si eso es! Edward solo estás encaprichado con ella porque es perfecta... además de ser como tu...también tiene a otros y... Entonces hubo un silencio raro que me puso los nervios de punta, miré a todos y me llamó la atención que Bella estuviera tan concentrada... ¿Qué estaría haciendo? Cuando iba a preguntarle vi como Yuki cogió su arma y disparó hacía ella rozando su cabeza...¿Pero que coño? Pegué un frenazo tan fuerte a un lado de la carretera, que se dio un golpe con el salpicadero ¡Mierda! En ese momento abrió los ojos, salió de tu aturdimiento y me miró muy enfadada ¿En serio? ¿A mi? La miré de forma incrédula ¿Porque no le decía nada a Yuki?

-¿Qué demonios?- se tocó el lugar del golpe y me entrecerró los ojos, se veía demasiado enfadada.

-Edward....¿Porqué coño frenas así?- la miré como si estuviera loca, Yuki me observaba igual que ella...¿Y el loco era yo? Ellas si que lo estaban... como cabras y me iban a poner a mi igual...

-¿Yo?- las señalé a ambas con el dedo- fue ella la que te disparó a la cabeza sin venir a cuento- le entrecerré los ojos a Yuki- así sin más... de repente – la señalé con el dedo de forma acusatoria- y tú no le dices nada...- rodé los ojos- me echas la bronca a mi...- me interrumpió.

-Ella solo me salvó- se agarró el cuello, entonces me fijé que tenía marcas de manos ¿Pero cómo? Y lo más inquietante ¿Quién? No recuerdo que las tuviera cuando la recogí ¿o si?

-No entiendo nada...- pensé en voz alta.

-La sombra estaba aquí e intentaba asfixiarme- suspiró y la miré con horror- supongo que sabe lo que vamos a hacer y solo pretendía evitarlo- se tocó la barbilla- si se siente amenazado, puede que si sea de ayuda Tanya...- yo también lo esperaba, así no ganábamos para sustos... De todas maneras me quedaba una duda...

-¿Cómo que ha estado aquí?- volvió a mirarme entrecerrando los ojos- yo no he visto nada- resopló.

-Me dijo que había aprendido cosas- se quedó pensativa unos segundos- tal vez se hizo invisible para vosotros- señaló a todos, miré a los demás que asintieron ¿Como era posible?

-¿Ninguno lo vio?- negaron y entonces miré con enfado a Yuki- Entonces ¿dispararte al azar?- pregunté mirando a Yuki, ella asintió tan normal...-¿Cómo se te ocurre dispararle a la cabeza sin ver nada?- pregunté gritando bastante furioso, ella solo rodó los ojos.

-Solo pude ver que necesitaba ayuda, entonces lo intuí... después de pedirme ayuda, me imaginé quién era... eso es todo- dijo de los más tranquila, me eché las manos a la cabeza... ¿Disparó sin ver? ¿Y si le hubiera dado en la cabeza? ¡Dios si la rozó! Debía asegurarme que no tenía nada. Así que la acerqué sentándola sobre mis piernas para ver su cabeza.

Cazando asesinos ( T )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora