LOS EMPRESARIOS

CAPITULO 24 CHRISTIAN

CHRISTIAN

No me arrepiento de haber posado mis labios en mi amiga Lili, Ana tiene que entender mis razones por las cuales le di ese pico, no amo a mi amiga, la quiero, no la deseo, la admiro, mi amistad no puede seguir con ella, porque se acrecenta el amor que ella me tiene, es mejor poner distancia en ello, me duele, sí, pero hablando se entiende la gente, que fue lo que hicimos.

En verdad amo a mi esposa, pero tiene que escucharme primero, sé que si yo la hubiera visto a ella besándose con otra persona, no lo hubiera soportado, pero pediría una explicación, eso lo aprendí cuando la abandoné con lo del secreto de mis abuelos, no me deja que le explique, simplemente ya no quiero estar batallando ante eso, ella me tiene que pedir alguna explicación y yo se la daré.

No creo que llegue al extremo del divorcio, exageraría la reacción, si al escucharme no me perdona, con todo el dolor de mi corazón se lo daría, porque nuestro matrimonio, no puede estar manteniéndose de echarse en cara los errores de uno y del otro, me da gusto verla y conocerla como militar con sus conocimientos de armamento, estar a su lado me agrada, es mi mujer, por Dios. Nuca había visto esa mirada de odio, rencor de ella hacia mí.

Todo tiene un límite y me propuse ya no rogarle, ella tiene que buscarme, si en verdad quiere que nuestra relación se vuelva a conjugar, yo estoy dispuesto, pero ahora le toca a ella, he perdido a una amiga porque puse de por medio nuestro amor, si me escuchara por lo menos, igual me juzga y me haría esa pregunta de si yo la hubiera visto con alguien besándose.

Necesito relajarme, estoy molesto y esto no va a llegar a nada positivo, ella molesta y yo ya no quiero rogar, por lo que me he propuesto, salir de viaje para mis negocios, si, la extraño íntimamente, pero eso no me va a cerrar mis expectativas de un verdadero matrimonio, prefiero perderla a que siempre me eche en cara lo del pico.

En la segunda práctica traté hasta de bromear con nuestro apellido, eso de que se cambie el apellido, también me tiene molesto, cree que estoy con Lili, parece que realmente todavía no me conoce mi mujer, le pedí a toda la gente que está rodeada de nosotros, hermanos y familiares cercanos, que no intervengan ya, a mis hermanos les dije que los voy apoyar para que sigan con sus planes del casamiento, lo mío con Anastasia es aparte, mi madre me dice que arregle las cosas, pero la que no quiere es Ana.

Estoy rumbo a Nueva York, mi trabajo es un escudo, pero lo hago realmente con agrado, no quiero pensar en ella, sé que los miércoles, tengo que estar en mis clases de tiro, por ello pido de jueves a martes los viajes, ella sabrá como localizarme. Pedí una asesoría a Taylor para el exàmen de tiro, el solo me comenta que me van a preguntar, el tipo de arma, cuantas balas o cartuchos utiliza, que alcance tiene cada una, si el arma es para un tiro: Policial, reactivo, defensivo, de combate, deportivo, de instrucción, táctico. Técnicas de punterías: empuñe del arma, posiciones/posturas de tiro, fuego en movimiento, presión sobre el disparador, Taylor me informa que son las mismas para todos, policía, militar o escolta el empuñar su arma, tiene que ver mucho si es zurdo o diestro.

Durante los viajes, en mi tiempo libre, Taylor me lleva a lugares para hacer los tiros, utilizo las armas que me han enseñado a armar y desarmar, pensé que era muy difícil pero con dos maestros como Taylor y Ana, seré un buen tirador. En cuanto llegué a la base militar, Ana me dirigió a un costado del edificio de Tiro, se veía hermosa como siempre, pero ya no hice el intento de hablarle.

Me diò indicaciones para hacer el exàmen, estará compuesto por dos militares más, será de aproximadamente una hora todo el exàmen, la otro hora será un nuevo entrenamiento. Pensé que el exàmen era escrito, pero no, es oral y práctico, no niego que estoy nervioso, uno de los militares me diò confianza, solo me dijo que lo hiciera como las dos prácticas que había realizado y eso era todo.