—¿Como nadie notó que las dos estaban embarazadas? —Preguntó Hayley mientras Klaus recostaba boca abajo a Anya en la cama. Chris debía de estar haciendo lo mismo con Lessa. —¡Klaus, eres un original!
—¡Ya cállate! —Gritó el híbrido, desgarrando los restos que quedaban del bonito vestido azul cielo de Anya... Solo quedaba prácticamente la falda hasta que Klaus se la quitó. —Tráeme hilo y aguja. —Exigió y la boca de Hayley se secó.
—¿Vas a coserla? —Preguntó cerrando la puerta cuando escuchó que Hope se acercaba, no quería que su hija viera eso, ni ella misma era capaz de ver lo que tenía la dulce Anya en la espalda.
—Es mejor a verla desangrarse. —Con los retazos del vestido comenzó a hacer vendas para detener la hemorragia, pero el azul se tornaba púrpura y luego rojo en cuestión de segundos. —¡Ve por el maldito hilo! —Gritó con tal fuerza que Hayley hubiera salido volando por el golpe del sonido.
La híbrida salió por el hilo, dejando la puerta cerrada para que Hope no entrara.
Klaus se arrodilló junto a Anya y le apartó el cabello del rostro, seguía inconsciente y tenía miedo de lo peor... Le aterraba que no los volviera a abrir. Tomó un mechón del suave cabello de Anya entre sus dedos y maldijo internamente ¿Por qué se había tornado rubio? No le quedaba mal, pero la había conocido castaña y la amó castaña.
Amor... ¿Por qué le dijo esa palabra tan tarde? Cuando dejó sus labios hace tan pocas horas le pareció tan simple decirla. En ese momento deseaba poder decirle mil veces más esas palabras, pero ella seguía dormida... Deseaba que estuviera dormida.
Lo suplicaba.
Hayley volvió y Klaus le arrancó el hilo y la aguja de las manos, temblaba terriblemente, pero luego de un rato logró finalmente enhebrar la aguja.
—Hope sigue preguntando cómo están... —Klaus sabía que Hayley se refería a los tres: Anya, él mismo y ese bebé que apenas había hecho aparición.
—No lo sé. —En el cuerpo de Anya había 2 latidos, uno rápido y el otro lento y pausado. Ya quería a ese niño como a la madre. —Asegúrate de que nadie entre. —Pensó que había sido amable, pero, en realidad, casi gritó su petición.
—¿Y si Mason quiere entrar? —En ese momento Mason era el único que podía ayudar realmente y se había ido a ver qué pasaba afuera.
—Solo él puede entrar. —Klaus se sentó junto al cuerpo inconsciente de Anya y tiró del hilo para romperlo.
Hayley suspiró y salió, de nuevo cerrando la puerta.
Klaus tuvo que respirar profundo y casi llora al apartar la tela que cubría la herida, o las heridas, no lo había visto desde la iglesia y ¿Como se podía poner peor a lo que ya estaba?
—Vas a estar bien... —Prometió con voz temblorosa, no creía sus palabras. —Van a estar bien. —Se corrigió. Esa niña tenía que estar bien, lo suplicaba... Era su segunda hija, planeada para más adelante, pero la adoraba como a Hope.
Clavó la aguja en la espalda baja de Anya, la sangre dejaba ver qué ahí comenzaba el primero de los cortes. Cuando comenzó tuvo que pensar mejor en que hacer ¿Debía coser el músculo antes de la piel? ¿Que debía hacer con el hueso? Veía que los huesos de la caja torácica estaban en parte rotos.
¿Que sería del bebé? ¿Estaría bien? Porqué cómo estaba Anya no había mucha protección en el útero.
De hecho, si se veía mas a fondo, podía ver la carne blanda del recubrimiento uterino...
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Fallen Angel {Klaus Mikaelson}
FanfictionDios es capaz de un gran amor, pero también de una gran ira. Klaus Mikaelson logró sobrevivir a ser separado de su hija gracias a una chica, una chica a la cual ama con pasión y dulzura. Los problemas no se hacen esperar, la guerra de los ángeles ha...