12. Learning to fall

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C a p í t u l o   d o c e
APRENDIENDO A CAER

—¿Puedes esperar aquí? Ahora vuelvo —Isaac se dirigió a mí en cuanto ambos nos encontramos bajando las escaleras de aquella estación de tren abandonada. Yo asentí y tomé asiento sobre el último escalón.

     La noche anterior se había quedado en casa. Sólo había ido por la tarde para devolverme un par de libros con notas, pero Alex insistió en que se quedara a cenar. Después de aquello, no le permitió marcharse porque según él ya era "demasiado tarde" para que un chico anduviera solo por la calle.

     La otra oferta de Alex era que lo fuésemos a dejar a casa, pero Isaac prefirió quedarse, ya que ambos sabemos que era mejor que nadie supiera donde se estaba quedando ni con quien, para evitar cualquier tipo de preguntas; así que tuvimos que pasar por la estación muy temprano en la mañana para que pudiese cambiarse de ropa, ya que ahora era Lunes y teníamos escuela.

     Isaac se alejó y tan solo pude escuchar un par de voces a lo lejos, nada conciso. No fue hasta después de varios minutos, que todo empezaba a escucharse cada vez más claro.

     —Así que tuviste una noche ocupada, ¿no es así? —estaba completamente segura que mi rostro denotaba desagrado al escuchar aquella voz.

     Erica, por supuesto.

     —Eso en definitiva no es de tu incumbencia —le escuché responder, a lo que no pude evitar sonreír.

     —¡Oh, vamos! Tienes su aroma por todos lados —insistió ella de forma cínica. Y bueno, debo admitir que aquello me hizo sonreí aún más.

     —Sigue sin ser de tu incumbencia —recalcó él.

     —¿Quieren concentrarse en lo que es importante? —aquella, era la voz del gran alfa.

     —Entonces, ¿por qué necesitamos su ayuda? —preguntó Isaac.

     —Porque es más difícil de aniquilar de lo que pensé, y aún no tengo idea de quién pueda ser —evidentemente hablaban sobre el kanima.

     —¿Y ellos sí? —cuestionó Isaac de nuevo.

     —Quizá, es por eso que necesito que uno de ustedes esté de su lado.

     Me preguntaba si se referían a...

     —¿Scott y Stiles? —dejé salir mientras me acercaba a ellos, quienes se encontraban de pie frente a un enorme cofre antiguo de madera. Isaac me miró con sorpresa, Erica con media sonrisa y una ceja encorvada, y Derek... bueno, él mantenía esa mirada de completa irritabilidad. La única que conozco de él hasta ahora.

     —¿Y ella está aquí porque...? —se dirigió a Isaac con los brazos cruzados.

     —Me enviaron a vigilarlos, Derek... —dejé salir con sarcasmo —. Viejo, de verdad debes dejar de pensar que eres el centro del universo —rodé los ojos mientras me cruzaba de brazos —. Sólo acompaño a Isaac, ¿está bien? Eso es todo —agregué aquello último en un tono más calmado. Tampoco tenía porqué ser grosera.

     Derek rodó los ojos al igual que Erica, mientras que Isaac me miraba con una pequeña sonrisa la cual era claro que trataba de ocultar.

     —¿Scott o Stiles? —preguntó la rubia esta vez.

     —Cualquiera de los dos —respondió el alfa volteando hacia ella.

     —Sabes que la luna llena se acerca, Derek —dijo el chico de los ojos azules.

YOU HAVE ME // Teen Wolf [01]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora