Capítulo 17. Vampiro de fuego

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*Narra Alexander*

—Doscientas noventa y siete, doscientas noventa y nueve—digo mientras levanto en cada mano las pesas que se encuentran en el nivel subterráneo. Como Jake se ha ido a buscar ese tal elfo, aproveche para hacer un poco de ejercicio— Trescientas.

Si bien es cierto que ahora que soy un vampiro mi fuerza y velocidad se han incrementado a niveles sobrehumanos, cualquiera pensaría que ejercitarme seria innecesario para mí, pero si hay algo que Jake me ha enseñado en el tiempo que hemos estado entrenando, es que nunca se es lo suficientemente fuerte, el siempre esta aspirando a ser mejor que el día anterior y eso me inspira a querer estar a su nivel, no quiero ser un lastre para él.

Con ayuda de una toalla me seco el sudor y bebo de un vaso que contiene sangre, siempre debo ser cuidadoso con tener una dosis diaria de esta para no perder el control. Me dispongo a salir del subterráneo para ir a darme un baño, pero siento como un dolor de cabeza me invade, uno que ya he sentido antes. Algo... alguien viene hacia aquí, puedo... ¿Sentirlo? Es como la vez que salve a Jake, es como si pudiera saber cosas que no veo, como si tuviera otro sentido dentro de mí y este se disparara alertándome de algo, incluso para mi es difícil entender esta sensación. Puedo sentir como lo que sea que se dirige hacia aquí está cada vez más cerca, su presencia es cada vez más cercana, como si estuviera a pocos centímetros de mí. Miro a mí alrededor y no hay nada ni nadie a mi lado, no sé cómo, pero sé que algo está cerca y ese algo tiene una presencia intimidante, nunca había sentido tanta ira en toda mi vida.

De pronto se escucha como desde la parte superior algo explota y el techo sobre mi empieza a quebrarse, me aparto justo antes de que este se viniera abajo y los escombros cayeran dejando un cráter enorme en el techo del subterráneo.

Se puede ver la figura de alguien caminar entre los escombros alertándome. No logro verlo totalmente debido a la gran cantidad de polvo que se encuentra en el ambiente

—He venido por ti, ¡AZUL!—dice alguien con voz grave mientras camina hacia mí.

El polvo se disuelve en el aire dejando relucir al portador de aquella voz, un hombre que luce un poco mayor que yo, tiene el pelo de color rojo vivo al igual que sus ojos y su rostro y presencia denotan seriedad pura. Ahora recuerdo, este tipo es el que vi en mi sueño.

— ¡¿Quién eres tú?!— digo poniéndome en posición de combate.

—No te preocupes, no he venido aquí a lastimarte—Dice el chico— He venido aquí a salvarte.

— ¿De qué rayos hablas?— digo confuso— ¿De qué deberías salvarme?

—No hay tiempo para explicaciones—replica el chico—Ellos no tardaran en llegar, puedo oír sus pasos acercarse desde aquí.

— ¿Ellos?

—¡¡¡ALEJATE DE EL ALEXANDER!!!—Grita Jake irrumpiendo en el lugar acompañado por una chica.

— ¡NO!—Exclama el vampiro e intenta sostenerme pero antes de que lo haga doy un gran salto hacia atrás aterrizando justo al lado de Jake y la chica.

— ¿Qué rayos está pasando Jake?— Pregunto desconcertado— ¿Quién es ese sujeto?

—No lo sé, pero viene tras de ti.

— ¿Y esta chica?— digo mirando al la chica que está a su lado.

—Mi nombre es Sofía—contesta la chica de ojos color miel— soy amiga de Jake.

—No dejare que le pongas una mano encima a Alex, vampiro— dice Jake y hace aparecer su espada, acto seguido la chica también hace aparecer su arma pero a diferencia de la de Jake no es una espada, sino una larga guadaña que blande con ambas manos.

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