Recuerda, el cliente siempre tiene la razón, no importa la edad, el tamaño o cuán malhumorados estén.
Nancy (San Agustín, Florida). Presionó las puntas de los dedos contra sus mejillas y los retorció hasta que sus labios se curvaron hacia arriba.
-Y siempre sonreímos. Es difícil enojarte con alguien que te está sonriendo.
Nancy era la gerente de H&G. Tenía el cabello rojo y trenzado a cada lado de su cabeza Ni siquiera los gerentes estaban exentos de las torturas del parque temático. Y aquí en la tierra de los cuentos, todos usábamos traje. Teníamos de hecho un Hansel en la tienda, y decidí que era peor para un chico se Hansel que para una chica ser Gretel. Él tenía que estar en la lista de odio de alguien.
Di una mirada hacia Patti. Ella rodó los ojos. Asentí concordando con la evaluación de la situación.
-Sígueme y te mostraré como manejar la máquina registradora -Nancy dijo.
Apuntar la pistola registradora, no requiere de mucha habilidad. Tampoco hacer cambios, o empacar souvenir. Esto iba a ser un trabajo temporal y sin duda aburrido como ninguno.
Patti y yo pasamos la mañana haciendo ventas imaginarias, luego las anulábamos; practicando haciendo el cambio; y aprendiendo a correr las tarjetas de crédito. Alrededor de la una, Nancy nos dejó ir. Patti y yo nos quitamos nuestros disfraces, los botamos y empezamos a caminar de vuelta al dormitorio.
-Hey, ya que tenemos un par de días más antes de que las cosas se vuelvan locas y tengamos que trabajar jornada completa, ¿quieres pasar la tarde conmigo en la montaña rusa?
Hice una mueca.
-Realmente no soy de montañas rusas.
Me miró fijamente.
-Estas bromeando, ¿entonces qué haces trabajando aquí?
-Porque quería alejarme de mi casa.
-Pero el punto de estar aquí es que puedes montar gratis.
Sacudí mi cabeza.
-Me gustan los antiguos carros chocones y el carrusel.
-Oh Dios mío, he escuchado de gente como tú.
-¿Gente como yo?
-Si gente que tiene miedos irracionales...
-No tengo miedo irracional. Simplemente no lo disfruto.
-Tienen un tipo, un famoso psiquiatra quien viene cada miércoles y ayuda a la gente con sus fobias con las montañas rusas. Deberías inscribirte en una sesión.
-¿Para qué? No tengo ningún deseo absoluto en montar una. Así que, ¿para qué molestarme en aprender a hacerlo?
-Porque tienes miedo. Y necesitas vencerlo.
-No tengo miedo. -Miedo era una palabra muy débil para lo que sentía al pensamiento de siquiera estar cerca de una montaña rusa. Monté una vez con mi papá. Enterré mi cara contra su brazo y grité durante todo el paseo. Tenía doce. No he vuelto a montar en una desde entonces.
No me gustaba el sentimiento de mi corazón en la garganta, la sensación de caída. Y odiaba totalmente el sonido de arranque cuando pasaba por una pendiente.
-Entonces ven a la montaña conmigo, -Patti dijo. Salimos del edificio a la luz del sol.
-No puedo, realmente tengo muchas cosas que hacer.
-¿Cómo qué?
-Necesito llamar a mi novio antes que su turno comience esta noche. Ella entrecerró los ojos.

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Thrill Ride
Humor¡Viaje emocionante! Entrada para un día: $ 15 Trabajo de verano: Pros: Vivir por mi cuenta (más compañeros de habitación) Los viajes son gratis (pero evitar las montañas rusas, ¡demasiado miedo!) Compañero de trabajo súper sexy... Contras: No...