Capítulo 4.6. Tramas maestras II

547 56 9
                                    


6-Venganza

El héroe hace justicia. Al igual que con la de persecución, hay varias fases:

1-El crimen que termina con la felicidad de los protagonistas.

2-El plan de venganza

3-La lucha final entre el vengador y el criminal

OJO: EL CRIMEN DEBE SER EQUIPARABLE A LA VENGANZA, porque si no, adiós realismo, hola hacer el ridículo.

Ejemplos

Gladiator. ¿Original? No. ¿Y las escenas que tiene ese peliculón? Inigualables. 

¿Os divertís ahora?

Vamos a ir un poco más lejos, que no se note que me gusta y vivo enamorada de este antihéroe:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Vamos a ir un poco más lejos, que no se note que me gusta y vivo enamorada de este antihéroe:

The Punisher.

¿Originalidad? SÍ. No es venganza. Es castigo. Pero juegan con hacerle creer a la gente y a algunos personajes de la historia que es venganza. De esta forma, además, logramos amar al personaje, porque no es malo. De hecho, es más que legal. Un antisistema adorable—puede que solo yo tenga debilidad por los antisistema.

Además, la subtrama se transforma en trama. El armazón sigue estando ahí, pero lo moldean para ir metiendo en el saco muchas otras cosas, creando acción continua: primero sí, luego no, después otra vez sí, lo que además, crea una tremenda profundidad en el personaje de Frank Castle.

7-Trama maestra de enigma

El protagonista tiene que resolver un misterio. Da igual el tipo. La estructura es siempre un rompecabezas que debe ir dosificando. Mucho cuidado con el causa-efecto aquí, nada puede aparecer de la nada sin una explicación plausible.

Aquí, lo que hay que hacer es camuflar toda la información de manera que se encuentre el equilibrio entre ser híper cantoso y tan sutil que uno no se de cuenta de las antelaciones.

Ejemplos

Chinatown de Roman Polanski. Una—y perdonen mi expresión—jodida obra maestra de 10 que le calla la boca a todo el mundo que la prejuzga.

 Una—y perdonen mi expresión—jodida obra maestra de 10 que le calla la boca a todo el mundo que la prejuzga

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El arte de contar historiasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora