11. Gravedades

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Los días en Medianoche pasaron. Creo que los falsos rumores que crean mala reputación y estar atrapado a punto de sufrir un ataque de claustrofobia, son bastante llevaderos cuando Kellin está ahí.

Kellin Quinn, con su hermoso nombre de 3 sílabas, aún no es mi novio oficial, aunque puede que se lo pida dentro de poco.
Kellin Quinn, con su intachable reputación, el niño de puros dieces en su boleta de calificaciones, me dijo que soy la reencarnación de un vampiro ancestral.
Kellin Quinn, con sus ojos de diamantes, su cuerpo de ensueño y su rostro de porcelana, y ni hablar de su suave y sedoso cabello azabache, me ha convertido en un mitad vampiro.
Aquel niño de 17 años que en realidad tiene 21 años, que en realidad tiene 252 años, me ha convertido en eso y podría decirse que fue sin mi consentimiento.

Hace poco hablamos con Kellin, hablamos de todo. El tema del vampirismo es tan extenso que uno podría estar todo el día hablando de eso o, como yo, quizás una semana completa.

Kellin no se detuvo un momento a pensar en si yo quería volver a ser vampiro o no. Y sí, hablo de mí en tiempo pasado, presente y futuro porque ya acepté lo que soy. Ahora mismo me doy cuenta de que hay cosas que Kellin me contaba y yo ya las sabía porque en algún momento las he soñado.

Hace unos días Jordan y Justin se quedaron a dormir en nuestra habitación. Jordan durmió conmigo y cuando desperté, Jordan me contó que entre sueños susurraba cosas en alemán que él no entendía porque no habla alemán y también me dijo que una frase que repetía constantemente era: “estoy quemándome” “estoy ardiendo”. En ningún momento del relato Jordan pareció divertido de la situación por lo que deduje que tal vez él sabría algo de mi pasado. Digo, Jordan y Andrew son amigos de Kellin así que ¿Cuánto sabrían ellos de mí?

Ahora mismo me encontraba en el pasillo principal. Estaba en medio de un receso y estaba en mi casillero revolviendo todo para buscar el álbum de figuritas que estábamos completando con Lee. Y al lado mío estaba Kellin y yo le había preguntado que tan amigo era de sus amigos. Se lo pregunté así para sacarle información en medio del camuflaje.

—Bueno. Jordan es mi amigo de hace poco. Como hace unos 5 años.—Me respondió Kellin— Es una persona muy buena y de confianza. No creo que haya nadie en Medianoche que sea de más confianza que Jordan.

—¿En serio? ¿Es de más confianza que tú? —Le pregunté mientras abría mis carpetas en busca del álbum. Entonces sentí un beso en mi mejilla y sonreí. Ahora tenía a Kellin más cerca.

—Espero ser de confianza para ti am… Oli.—Dijo Kellin.

Y en ese momento miré a Kellin algo confundido.
—Ya van dos veces que me dices am… Dudas, y después dices mi nombre, ¿Yo solía tener otro nombre? —Le pregunté y noté como Kellin se tensaba y negaba con la cabeza.

—Tú siempre fuiste Oliver. Ósea es complicado saber porqué ahora también te llamas Oliver. Y hace tiempo tú mismo te nombraste Oliver porque te pareció que iba exactamente con tu personalidad.—Dijo Kellin.

—No entiendo, ¿Sabes por qué te dije eso? —Le pregunté y dejé la carpeta en el casillero para luego sacar otra.

—Oliver viene de la palabra “olivo” del árbol del olivo que representa la sabiduría. Cuando saliste a explorar el mundo descubriste que amabas aprender cosas. Tú no tenías nombre, no sabías lo que era un nombre hasta que empezaste a observar a los humanos. Cuando empezaste a interactuar con ellos necesitaste aprender a hablar y ponerte un nombre. Dijiste que inventabas cualquier cosa cuando te preguntaban. Tú no eras alguien creativo hasta que aprendiste a serlo.—Explicó Kellin— Cuando aprendiste a leer creíste que Oliver sería el nombre adecuado para ti porque estabas seguro a que podrías hacerle justicia al llamarte: “sabiduria” y lo hiciste Oli. No creo que hubiese alguien más que tú que estuviese tan cercano a saber los misterios que esconde la vida. Tu perdida de memoria es una lástima, pero es culpa de los humanos.

MidnightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora