𝐦𝐨𝐧𝐞𝐝𝐚𝐬 𝐝𝐞 𝐜𝐡𝐨𝐜𝐨𝐥𝐚𝐭𝐞 ｡˚༷ᮀ｡˚༷ 𝐭𝐚𝐞𝐤𝐨𝐨𝐤

❁Capítulo 12❁

Levantó sus pies para quedar en puntas, necesitaba buscar el cabello oscuro de JungKook entre todos los estudiantes pero sabía que era difícil ya que muchos tenían el color muy similar.

Caminó entre ellos, recibiendo empujones y murmullos de reclamos, él solo pedía permiso entre tanta gente.

—TaeHyung Oppa—una chica de su edad tiró de su mochila cuando creyó haber visto a su objetivo entre la gente.

Se soltó, sin medir su fuerza, quizás por eso fue el reclamo de la muchacha que volvió a gritar bastante fuerte.

—¡Oppa!

La ignoró, apuró sus pasos lo más que pudo cuando vió a JungKook doblar hacía su casillero, ¿Estaba huyendo?

Taehyung apretó sus puños a medida que avanzaba haciendo camino hacía el pasillo en donde aseguraba que Jungkook guardaba los libros de su próxima clase.

Estaba en lo cierto, allí estaba el pelinegro guardando sus cuadernos mientras abría su boca para soltar suspiros.

Con sumo cuidado tomó su muñeca deteniendo su movimiento antes de tomar su libreta personalizada.

—Jungkook, estoy realmente aburrido de esto—susurró en el oído de menor con una voz suave.

La piel de Kook se erizó al escuchar la voz de su Hyung favorito.

—Hyung, estámos en la escuela—se giró con cuidado para quitar la mano de Tae, el rubio negando la acción afirmó su mano en la taquilla.

—No me has hablado en dos días.

Estaba en lo cierto, pero el miedo de Jungkook sobre su homosexualidad estaba sobrepasando sus límites.

—Hyung...—los labios de Tae tocaron su frente.

Levantó sus ojos hasta ver los de TaeHyung, sostuvo una sonrisa tierna ante eso. Él si lo quería mucho, más de lo que creía, más de lo que debería.

—Deberías dejar de ser tan evasivo, así no podremos entablar una relación más amistosa—avisó el rubio, Jungkook sólo asintió.

Dejó de sostener su cuerpo contra la taquilla para avanzar, con seguridad y dejar un beso pequeño sobre la mejilla de su Hyung, era un paso bastante grande.

No sabía si TaeHyung sentía algo, no quería saberlo realmente. Su miedo por haber dado un movimiento rápido, demasiado precipitado lo estaba asustado.

—Lo siento, me sentí abrumado por NamJoon Hyung—dejó todo dentro del casillero.

—Te busqué bastante, ¿Dónde fuiste? —el mayor lo miró atento mientras que JungKook sacaba una moneda dorada para quitarle el envoltorio.

JungKook abrió su boca señalando que Tae hiciera lo mismo, sintió algo de calor en sus mejillas pero lo hizo, Kook dejó el chocolate en su boca para luego sonreír.

—Estaba con Jimin Hyung y YoonGi Hyung, al parecer YoonGi es buena persona—cerró el casillero decidió a saltarse las clases.

—YoonGi Hyung me golpeó hace dos años por abrazar a JiMin—hizo una mueca.

—Es porque YoonGi ama a JiMin, ellos son bastante tiernos juntos.

Esperaba que algún día JungKook dijera lo mismo de ellos mismos.

Caminaron en silencio, Tae no había captado la idea del menor hasta cuando lo tenía de la mano corriendo por el patio trasero en dirección al gimnasio y las rejas más alejadas.

—¿JungKook-ah? —el recién llamado sólo lo miró con una amplia sonrisa.

—Vamos Hyung, ¿Quieres experimentar la verdadera felicidad?

Se quedó allí mirando al menor que sonreía con su mano frente a él. ¿Tomaría la mano de JungKook? ¿Y si sus papás se enteraban de esto?

Era importante tener una buena conducta si quería conseguir la beca que lo llevaría al extranjero. Pero, ¿Quería ir al extranjero?

Ahora tenía un motivo para quedarse, además de sus hermanos pequeños, sus amigos y Yeontan, estaba Jeon. El pequeño Jeon que con tantas adversidades había sacado su lado más fuerte, ya no era un simple niño asustado y sumiso ante los golpes de su padre, podía ver a un valiente chico que no se echaba a morir tan pronto.

Y si de tomar su mano dependía darle felicidad, lo haría.

TaeHyung tomaría una y mil veces la mano de JungKook.