◈ BELLATOR |MARVEL [2]

2. no plans to die

—POR SUPUESTO, mi reina—dijo Freya asintiendo, al sentir que sus ropas eran poco adecuadas se puso sus manos en su cara y se las paso como si se lavara la cara luego por su cabello, luego por sus brazos y en un par de segundos Freya estaba completamente diferente, una de las ventajas de ser la diosa del amor; Freya podía cambiar su apecto como quería, además de que también podía hechizar a la gente con su voz y cambiar el aspecto a la persona más querida de uno. Su cabello estaba trenzado de diferente manera, con una pequeña rama en su cabello, sus ojos ahora estaban pintados de negro de otra manera, no para ir a la guerra si no para una ceremonia, seguía usando su pendiente, y ahora usaba un vestido de diferentes cueros y con un cinturón de metal, largo y con tirantes, dejando sus brazos desnudos llenos de cicactrices y con tatuajes de runas. Varios se asombraron ante el truco y Freya pudo distinguir la sonrisa de Loki por la magia, mientras la joven diosa se posicionaba al lado de Frigga y Loki .

Freya recorró rápidamente la habitación del palacio, vio a todos los asgardianos y los cientos de guardias, vio los amigos de Thor  y Loki; los hombres y la mujer que la veian con curiosidad, la hermosa e increíble Freya de la cual Loki y Thor a veces no paraban de hablar. Pero la atenta mirada de Freya y la de todos se desvió al hombre que alzaba el martillo victorioso.
Thor.
Todo el pueblo lo alababa y le aplaudía, mientras Thor alzaba su martillo y le daba vueltas, Freya tenia que admitir que los años lo habían hecho extremadamente guapo y alto, además de musculoso, traía su típico casco y vitoreaba junto al pueblo, una vez llego frente a el trono se sacó su casco y se arrodillo a su padre, cuando alzo la cabeza vio a Freya y le guiño un ojo con una sonrisa carismática y coqueta haciendo que Freya solo negara con la cabeza y rodara lo ojos con una pequeña sonrisa. Odin se levantó de su trono lentamente y golpeó su cetro contra el suelo haciendo que todos los vitores y aplausos se callaran.

—Thor, hijo de Odin, mi heredero, mi primogénito—Freya sin querer vio a Loki que estaba viendo al suelo—. Portador del poderoso martillo Mjolnir forjado en el corazón de una estrella agonizante. Su poder no tiene igual como arma para destruir o herramienta para construir. Es un compañero digno para un rey. Yo he defendido Asgard  y la vida de los inocentes a través de los nueve reinos desde la época del gran principio. Y aunque llegó el día de que yo, Odin lo deje ¿Juras proteger los nueve reinos?

—Lo juro—dijo Thor

—¿Y juras conservar la paz?

—Lo juro.

—¿Y juras descartar toda ambicion egista y dedicarte solo al bien de los reinos?

—¡Lo juro!—exclamó alzando el martillo

—Entonces en este día yo, Odin, Padre de Todo, te proclamo...—Pero la frase quedo en el aire cuando Odin se quedó viendo un punto fijo y hubo silencio, Freya vio a el padre de todo y luego a Thor para escuchar el murmullo de Odin.

—Gigantes de Hielo.

Odin golpeó con su cetro en el suelo antes de levantarse, Freya al oír esas palabras en un segundo estaba vestida con las ropas de guerra que traía y su capa de plumas de halcón. La joven diosa siguió a Odin con su espada lista junto con Thor y Loki. Los cuatro bajaron a La bóveda o la sala de trofeos de Odin, una bóveda subterránea que contenia todas las posesiones preciadas y botines de guerra de Odin.
Freya guardó lentamente su espada cuando vio la escena a su alrededor, todo era hielo, una mano sobresalia de un piso de hielo, los guardias congelados y muertos, cubiertos de escarcha, al igual que todo el salón.