Incidente; FxM

#Veintiséis

MEG.

Este día no podría ir mejor. Cuando llegamos al departamento, no podemos evitar reírnos por cosas de las qué hemos estado hablando todo el camino. Un rico olor de comida me llega e inmediatamente miró hacía donde proviene, observó a Chica con un mantel rodeando su cintura y moviéndose ágilmente por el lugar. Me han dicho que es una excelente cocinera. Foxy le mira confundido.

-¿Qué haces Chica? -pregunta haciendo que la rubia se sobresalte.

-Al fin llegaron-dice sonriente-. Aunque, creo qué es un poco obvio lo qué hago-suelta una risa divertida-. ¡Estoy cocinando! am...espero qué no te moleste.

Bueno, al menos ya recupero su sentido del humor...Eso podría ser un buen paso. 

-No te preocupes.

-¿Y qué preparas?-pregunta Fox.

-Vi tu carta cuando me desperté, así que aproveche y quise hacerles una especie de disculpa a los dos con una comida -se voltea-. Enserio lo lamento, sé que esto no es nada técnicamente, pero es sincero. Por favor, siéntense, ya está listo.

Obedecemos y vemos como pone un platillo enfrente de nosotros.

-Lasaña-nos dice-, y como postre Quiche Lorraine.

-¿Y esos nombres tan raros?, bueno, solo Quiche lorraine. -pregunté viendo aquel platillo curiosa. Tiene buena pinta. 

-Es una tarta, y sabe la razón de por que su creador le puso ese nombre- se encoge de hombros y se sienta al otro extremo de la pequeña mesa y se dispone a comer.

He de decir que huele delicioso, decido probar un poco y me quedo sorprendida al ver lo maravilloso que la rubia cocina. Tanto que podría decir que mi cara es un épico.

-¿Y bien? -pregunta Chica nerviosa viéndonos-. ¿Qué les parece?

-Ha quedado increíble, Chica-responde Fox.

-Lo mismo digo-la miró sonriéndole.

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AL DÍA SIGUIENTE EN LA ESCUELA.

NARRADORA

Meg se dirigió felizmente al casillero y fue guardando sus cosas mientras sacaba otras. No veía a Joy por ninguna parte, hace unos minutos se encontró con dicho conejo de cabello turquesa, pero él dijo que no la había visto desde que inicio el día.  Era la única en el pasillo y por no encontrar a Joy no ha ido a clases, pues comparten clase juntas y estaba esperándola, pero al parecer no había venido.

Si hubiese faltado, ella me habría avisado...pensó la peliblanca.

A lo lejos, visualizo una larga cabellera rubia, corriendo se dirigió a ella y la abrazo por detrás haciendo que ambas cayeran al suelo, la albina rió pero no escucho ninguna risa de su parte, en cambio escucho lo siguiente.

-¿Quién carajos te crees para lanzarte encima de mí, así?- a la peliblanca le sorprende la palabra que ha utilizado, normalmente nunca utilizaría ''carajo''.

-¡Pues tú mejor amiga!-le dice sonriendo-, tengo tantas cosas que decirte, Fox y yo...

Ella detiene a la albina, viéndola con desdén, eso alerto a la albina.

-¿Mejor amiga?, puff, por favor, ¿yo amiga de alguien como tú?-me mira con detenimiento y hace una mueca-, obviamente te confundiste cariño, yo nunca me juntaría con alguien como tú.

La albina miró nerviosa a todos lados.

-¿A-actuando como To-Toddy, Joy?, jejeje, q-que graciosos casi me lo cr-creo...-se ríe la albina nerviosamente.

Joy me mira con una sonrisa de superioridad. 

-No sé de quien me hablas, pero esto no es una actuación. Sólo lárgate-su expresión se transforma a una furiosa.

-¡Eh!, Joy te conozco perfectamente para saber que no eres tú, soy yo, Meg, tú mejor amiga, ¿qué es lo que ocurre?-un brillo de reconocimiento pasaron por los ojos de la rubia, pero fue fugaz, pues rápidamente fue cambiado por un oscuro penetrante.

-¿Meg?, mmm-se toca la barbilla pensativa-. No pues no conozco a nadie qué se llame así-dice para después irse, pero Meg la toma del brazo.

-¡No te puedes irte sin decirme que ocurre!

-¿Qué me ocurre?, ¡no me ocurre nada en lo absoluto!, simplemente vi la realidad, alguien como yo, merece más que una persona como tú, merezco estar en una banda digna de mí, personas que estén a mi nivel, así que, no molestes más.

La albina la dejó ir, las lágrimas la consumieron y no aguanto ver como su mejor amiga se iba sin ninguna explicación. De alguna manera le recordó a cuando su familia decidió irse, para siempre, sin siquiera desearlo. 

Aunque, la albina no sabía que muy al fondo de Joy, en ese espacio de su mente tan vacío e inquietante, de su alma...

La verdadera Joy lloraba desconsolada.

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MEG

Entré triste a mi hogar, Chica ya se había ido, todo el tiempo estuve prácticamente con una máscara de felicidad frente a Bon y Fox. Detestaba mostrar una actitud falsa, cuando por dentro me sentía rota realmente, ¿por qué Joy me trataría de esa forma?. Quiero pensar que esto es un sueño, pero pellizcarse no funciona. Tomo mi cabeza entre mis manos y sollozo. Solo espero que ella esté jugando.

No soportaría perder a mi mejor amiga...

SHADOW JOY.

Esa patética chica peliblanca no sabe con quién se mete, se siente tan bien actuar como siempre Joy ha querido, aunque claro, menos bravucona. Entro a mi hogar y veo a las modelos de mi madre posar ante la cámara. Una de ellas me mira y se acerca hacía mí. 

-Oh, pero si ha vuelto la inservible de Joy-me mira con ternura falsamente interpretada.

-¿Ah, otra vez te irás a llorar a tu cuarto?-se burla otra.

Pero en cambio yo sonrió con suficiencia.

-Silencio, por que si yo quiero-me acerco a ambas. Las miró con repulsión-, en un chasquido puedo mandarlas a la calle y quitarles todo su dinero. Así que no me tienten, sería muy gustoso verlas fracasando a pesar de tener una linda cara y un bonito cuerpo.Hoy pueden tenerlo todo y mañana-suelto una pequeña risa-, absolutamente nada. 

Ellas se quedan calladas y me miran sorprendidas, la incredulidad tiñe sus ojos. 

-Ah, y quiero que en unos minutos vayan a limpiar mi cuarto, pueden ser las modelos de mi madre y todo, pero yo las trataré como criadas-las miró-. Puede que mi madre tenga una parte del poder, pero yo tengo el restante, y es más que suficiente para verlas regocijarse entre agonía.