Capítulo 1: PILOT

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Mi vida como ex marine no fue de lo mejorcito que pudiera uno tener en su vida. Digo, soy mujer y a mis 35 años, parezco de 25, bueno es lo que me han dicho, soy de padre italiano y madre japonesa pero nací en los Estados Unidos, soy alta, morena, mido 1.75, cabello hasta el cuello, de buen cuerpo debo decir, algunos comentarios machistas como "buena delantera nena o que buen trasero", halagos que considero impertinente, es decir, sé que llevo un muy buen cuerpo pero mejor sola que mal acompañada. Me quisieron tomar en cuenta la jefatura de policía número 55 como capitana de dicho lugar pero lo rechacé porque no era un trabajo que me llamase la atención. Dirigir a una panda de policías bajo mi mando es demasiada carga, tiempo que llevaba en la guerra y suficiente derramamiento de sangre he tenido en mi vida.

La palabra "retiro", algo impensable cuando estaba en las filas de los marines, que de hecho, me iba a retirar de todo y disfrutar de mis descansos pero la CIA llegó a mi casa, me hablaron con el clásico discursito de: "Alexa Becket condecorada con honores, primera de su clase, experta francotiradora y sigilo, en interrogación..." y una sarta de tonterías más con el fin de que me uniera a sus filas, durante semanas rechacé el puesto porque no me interesaba más estar en el servicio pero, ¿Qué fue lo que me hizo cambiar de opinión?.

La respuesta es tan sencilla, había una unidad especial en la CIA que se trataba de identificar identidades suplantadas de gente, en las cuales había estafas de por medio, robo de identidades, dinero robado de cuentas misteriosas, un trabajo en la cual había que seguir pistas que pudieran ser tan falsas como una moneda de 3 dólares, absurda comparación lo sé, pero cuando llegaron esos sujetos de nuevo a pedirme el puesto y explicarme en qué consistía, no lo pensé más y decidí aceptar el puesto.

Uno pensaría que, por ser mujer llevaría el café al típico jefe en turno, un burócrata que solo velaba por sus intereses, bueno, eso me esperaba, fue todo lo contrario, el líder de la unidad de "Victimas de identidad", Robert García, un italoamericano, me miró con esos ojos de orgullo.

.- Bienvenida a esta unidad especial de la CIA, agente especial Becket – Me dijo alegremente sin dejar de mirarme, tenía ojos verdes, debo admitir que el tipo se veía muy bien – Mi nombre es Robert García, jefe y líder de la unidad, en este trabajo necesitamos a gente como usted, tiene experiencia rastreando a gente que se hace pasar por quien no es.

.- Bueno – Le digo estrechando la mano y restándole importancia a lo que me dijo, no me gusta que me halaguen tanto – No es fácil rastrear gente de este tipo, por lo general el robo de identidad se empieza por el acoso y la suplantación de estas.

.- Es correcto Becket pero – Me decía ya borrando su sonrisa y va de camino a su oficina, yo le sigo mientras hablaba – Pero resulta ser más que eso, los robos de identidad no solo afectan a la gente que vive en el estado de Nueva York, sino en todo el mundo, incluido marines, policías, bomberos, servicios públicos, administrativos, todos y cada uno de ellos han sido robados hasta el último centavo y vida de la persona, hemos tenido que liberar a cientos de inocentes que han perdido parte de su vida y han mirado con malos ojos a la policía y agencias gubernamentales que ya no confían.

.- ¿Hay organizaciones? – Pregunté alzando una ceja sabiendo a donde va con esos temas.

.- Organizaciones, atracos, todo lo que te puedas imaginar Becket – Me dice sentándose en su oficina – Tendrás a tu equipo, rastreando a cada persona que haya sido robada su identidad.

.- ¿Un equipo? – Dije sentándome y frunciendo el entrecejo, Robert me miraba con una sonrisa.

.- Sé que no te gusta – Dijo antes de que dijera nada – Conozco tu historial, si, has perdido a hombres en tu batallón y salvado muchas vidas, pero ya es hora de que te adaptes a un equipo donde deposites tu confianza, las cosas como son Becket, allá afuera hay un mundo diferente del que conoces, el objetivo de nuestra unidad es impedir que roben identidades, si lo han robado, independientemente de que tipo de persona sea, un civil, policía, generales y entre otros tipos, cada uno de ellos puede infiltrarse en cualquier agencia gubernamental y aparentar ser un civil normal, necesitamos identificar estos patrones Becket y tendrás a un equipo bajo tu mando, serás la capitana.

.- No me puedo negar ¿verdad? – Pregunté y al ver el no rotundo de la sonrisa del jefe, no hizo más que molestarme, solo agradecí y me dijo que fuera a conocer a mi equipo.

No es que me agrade trabajar en equipo, casisiempre prefiero trabajar sola pero es increíble que la CIA trabaje de manerainternacional con otras agencias, me acerco a mi equipo de trabajo, debo decirque esperaba una oficina pero en realidad es un cuarto grande, realmentegrande, la secretaria me sonreía y me dejó pasar, al ver los equipos con loscuales estaban trabajando, computadoras, códigos informáticos, archivos,identificaciones, muy diferente de lo que trabajaba anteriormente, me estabasospechando que la CIA no era lo que aparentaba ser al menos no en esta unidad,había algo más, un gato encerrado sin duda. ¿Qué era lo que me esperaba?, loiba a descubrir ahora mismo.    

Identidad Disociativa.Where stories live. Discover now