[TO GET TO YOU]- KOOKMIN⚘

19

- Te quiero Jungkook, ahora...

- Tranquilo gatito, me tienes siempre así.

Su voz ronca acariciando el lóbulo de mí oreja me estremeció completo, más aún el hecho de que sus manos habían desabrochado mi pantalón para perderse en éste con travesura.

- Ah... Jungkookie...

Mis labios eran atacados por los suyos mientras su mano viajaba de arriba hacia abajo por mi longitud como sólo el sabía hacerlo. Elevé mis caderas en busca de más contacto, me estaba volviendo loco, lo necesitaba urgente.

- Por favor ~

- Bueno, veo que alguien no me dejará disfrutarlo lentamente así que tendré que satisfacerlo rápidamente para luego poder hacerlo a mi manera.- jugando con la punta de mí glande mientras ejercía un poco de presión en la zona.

- Hazlo...

Aprovechó que mis caderas estaban elevadas para quitarme el pantalón y mi ropa interior en el proceso, posó su amplia mano en mi estómago y con sus uñas las arrastró levemente por la blanca piel cual gato, me volvía loco cada vez más. Cuando llegó de nuevo a mi pene se encorvo un poco y derramó saliva sobre él para que su mano pudiese deslizarse mejor, el tacto de su caliente saliva me elevó a la estratosfera, oh Jungkook.
Su mano derecha se encerró en mi pene mientras que la izquierda ejercía presión en el glande y lo rozaba contra éste, me sentía realmente sensible en esa zona y sabía que no duraría mucho más por lo que mis caderas acompañaron sus movimientos rápidamente hasta llevarme al tope, terminando por derramar mi esencia en su mano y mi estómago. Mi boca se abrió enormemente rogando por aire, mi pecho subía y bajaba rápidamente.

- ¿Satisfecho? - dijo Jungkook con voz ronca por la excitación una vez me vió en mejor estado.

- Oh por supuesto que no. - le esboce una sonrisa landina para subirme sobre su regazo y hacer que cambiemos de posiciones.

- Así me gusta, me encantas...

Devore sus labios con demasía mientras movia mis caderas sobre las suyas, Jungkook tiraba de mí pelo y cada tanto me propinaba una que otra nalgada haciéndome lanzar pequeños gritos de placer a la par que un dolor oculto.
Ayudé a quitar sus prendas y una vez estuvimos completamente desnudos uno de sus dedos se perdió en mi estrecha entrada, tan húmedo y caliente que ni siquiera me produjo alguna incomodidad, luego de unos minutos eran tres los dedos que danzaban entre mis anillos ya dilatados y listos para recibir su longitud.
Alinee su pene entre mis nalgas y comencé a bajar hasta lograr estar todo dentro, jamás me sentí tan lleno, tan querido, tan yo.
Seguimos basándonos y sus estocadasno tardaron en aparecer pero mayormente el trabajo era realizado por mí al estar arriba, mis caderas se movían en forma circular para luego hacerlo adelante y atrás llevándolo a la locura.

- Oh Jimin... me encantas bebé.

Sonreí contra sus labios, no tenía idea lo que eso podría causar en mi. Unos sentones después y terminé por correrme nuevamente para que luego él me siguiera esparciendo su semilla en mi interior. Caí rendido sobre su pecho y éste rodeó mi cuerpo con sus brazos, acariciando mi espalda y besando la coronilla de mí cabeza. Fue el gesto más lindo post-sexo que nadie hizo por mí, mi corazón de pronto se encogió en su lugar.
Realmente no sé qué haría si él se volviera a ir, si volviera con esa actitud tan borde ahora yo... podría enloquecer.

- Te quiero Jimin...

Y eso selló mi paso al mar de lágrimas que había estado intentando sostener. Me sentía tan malditamente feliz que hasta llegaba a doler dentro.

Luego de pasar tiempo en esa agradable e íntima posición, Jungkook me cargó y nos dirigió al mar, dentro de todo no estaba tan fría y al tener su cuerpo abrazado al mío resultaba hasta agradable.

- ¿Sabes que dicen sobre el mar?.

Negué con mi cabeza.

- Dicen que cuando te sientes mal tienes que sumergirte por un momento, que así como el oleaje viene y va, lo harán tus preocupaciones y malos sentimientos.- giró a mirarme - Es como una especie de ritual sanador.

- Debí de haber llenado el mar de esas cosas hoy...

- Es por eso que te traje aquí. - elevé mi rostro hacía él sorprendido - Quería que dejes que el mar se lleve todo lo malo que esté atormentado tu linda cabecita para darle lugar a maravillosos recuerdos... juntos.- acarició mis mejillas como si se tratara de un pequeño bebé.

- Jungkook...

- Y bueno, el buen sexo digamos que fue como el comodín.

- Aigooo, ya tenías que arruinar el momento más hermoso que jamás tendré, eres de lo peor. - le empujé lejos en forma de protesta.

- ¡Pero aún así me amas! Y no puedes hacer nada con eso. - cargándome en su espalda para sumergirse aún más.

- Sí.

- ¿Ah? - detuvo sus movimientos en seco y me bajó.

- Que lo hago, así como lo dices.

- Jimin...

- Y quizás me arrepienta de decir esto pero de verdad tengo expectativas con respecto a nosotros y... espero... realmente anhelo que el oleaje no te lleve.

Y nos fundimos en un beso, el más hermoso de los besos dados en una playa al amanecer.

- Por favor no te conviertas en algo que quiera que el mar te arrastre lejos, no lo hagas.

- Te prometo que no lo haré, me mantendré firme. Me anclaré a tus sentimientos si es necesario.

La velada terminó genial entre chapuzones, besos y una riquísima cena en un local de comida rápida de camino al hotel, al llegar me sentía realmente agotado pero feliz... tan feliz que podría gritar. Pero todo deje de felicidad se esfumó en cuestión de segundos al momento en que nos detuvimos frente a mi puerta.

- Jungkook... ¿puedes quedarte ésta noche conmigo por favor?

- ¿Ocurre algo, Jiminie?

- Sólo... no quiero dormir allí sólo, no quiero que mi mente me traicione con lo que ocurrió. ¿Puedes hacerlo? - mis ojos estaban inundados en lágrimas repentinamente.

- Claro que sí, no tienes ni que pedirlo Jiminie. Ven, vamos a mi habitación. - nos dirigimos dos puertas más tomados de la mano y al llegar fue corriendo al baño a preparar la bañera para mí.

Tomé una agradable ducha donde el vapor logró relajar mis músculos hasta dejarme al borde del sueño. Al salir Jungkook en prestó un poco de su ropa, me quedaban algo holgadas pero eso no importaba ahora. Después de todo tenía su olor y no podía pedir más.

Me acosté en la amplia cama y al segundo ya estaba entre los brazos de Morfeo, según logré escuchar Jungkook se iría a duchar igualmente por lo que tardaría en venir a acostarse.

Estaba durmiendo plácidamente cuando un sonido me despertó sobresaltandome, me esperé lo peor y me reí de mi estupidez al ver que sólo era el teléfono de Jungkook, otra vez irumpiendome.
Se que debí darlo allí pero el mensaje de ésta mañana me había tenido intrigado todo el día así que lo tomé e ingresé a ver la conversación. Mal hecho, no logré disipar mis dudas.

Chan chan chaaaaan. 😈