[TO GET TO YOU]- KOOKMIN⚘

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- Bien señor Kim, le he entregado las indicaciones y cuidados sobre la dieta que deberá estar haciendo el señor Park por las siguientes semanas para que su cuerpo pueda volver a estar fuerte y sano como antes. – El doctor, quien ya estaba entrado en años seguía con su itinerario hacia Kim sobre como debería cuidar de Jimin. – Sin más que decir, espero que estén bien.

- Perfecto doctor,- continuó Kim – en un par de horas volveremos a Corea, quería saber si era necesario subministrarle algún calmante para que el vuelo no le afecte.

- No señor Kim, eso no será necesario. Jimin está en perfectas condiciones para emprender el vuelo.

- He preguntado... - Taehyung acercó un fajo de verdes billetes sobre el escritorio del doctor – que si es necesario subministrar alguna pastilla a Jimin por el viaje.

- Hm...- el doctor dudoso aceptó el dinero, después de todo el mundo se mueve a raíz del dichoso dinero – Me temo que sí, le daré uno bastante fuerte. El paciente dormirá por horas para que las turbulencias, ni el traslado le haga mal.

- Mucho mejor, gracias doctor. – Kim le sonrió de manera ladina para luego salir de la habitación en busca de Jimin.

Lo buscó con la mirada por la sala de espera hasta localizarlo perdido en sus pensamientos mientras apreciaba como los autos se movilizaban fuera de la instalación.

- Jimin.

- Tae... ¿Qué ha dicho el doctor?, ya quiero volver...

Jimin se encontraba profundamente dolido por todo lo que había ocurrido, a su vez se encontraba agradecido de que Taehyung aceptara a ayudarle sin pedir nada a cambio. O eso creía.

- Ya casi pequeño...- Tae acarició sus castaños cabellos – Ahora debes entrar, él te subministrará una pastilla para que el vuelo no te descomponga, ¿hm?

Kim guió a Park hasta la sala donde se encontraba el doctor para cerciorarse de que dicha pastilla sea ingerida por Jimin. Luego de eso se despidieron del doctor y, acompañado de dos grandes hombres, salieron del hospital en dirección al aeropuerto. Taehyung se había encargado ya de las maletas de Jimin que habían quedado en el hotel, así que no había de que preocuparse.

El vuelo fue calmo, Jimin inmediatamente cayó en un profundo sueño donde no supo nada más de lo que ocurría a su alrededor o donde se dirigían. Su cuerpo se sentía muy cansado como para responder de alguna forma.

Cuando despertó, horas después lo que para él fueron minutos, se encontraba en una amplia habitación de colores cálidos y buen perfume, no podía distinguir mucho donde estaba debido a la oscuridad de la misma por lo que se frotó fuertemente los ojos para despertar completamente. Se sintió frustrado por no saber en dónde se hallaba pero aún su pequeño cuerpo estaba demasiado cansado y se recostó unos momentos más en la amplia cama.

Cuando volvió a despertar varias horas más tarde, el sol ya no se colaba débilmente por entre las cortinas, sino que había desaparecido completamente del amplio cielo. Jimin se levantó de la cama aún algo confundido y se dirigió al pequeño baño privado que tenía en la misma. Observó su pálido rostro en el espejo y lo mojó varias veces para quitarse la pereza. Demonios, esa pastilla si que era fuerte. Tuvo la necesidad de ducharse pero al no saber dónde estaba y por ende, si sus pertenencias estaban ahí descartó la idea y decidió salir de la habitación.

Se topó de frente con un amplio pasillo que se le hacía bastante familiar, siguió caminando recorriendo el mismo hasta llegar al filo de la escalera donde pudo apreciar mejor todo. Soltó un suspiro cansado que no sabía que había estado conteniendo todo este tiempo al darse cuenta en donde se encontraba.