l o c o m p r e n d í

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Comprendí que cuán necesario es el feminismo cuando vi a mi padre cambiarse de camiseta junto a la puerta del coche a la vista de todos y pensé en que una mujer nunca lo haría.
Cuando al crecer, también crecía conmigo el miedo cada vez que volvía a casa a altas horas de la noche y me cruzaba con un hombre, mientras me aferraba a las llaves de casa y rezaba para que no me violase.
Cuando a mis amigos los tildaban de "campeones" por tirarse a decenas de chicas y a mí de "puta" por hacer exactamente lo mismo.
Cuando la menstruación era algo que esconder, no como los innecesarios "piropos" que me gritaban por la calle.
Cuando mis pelitos eran "antihigiénicos" y los del hombre "varoniles" y "sexys".
Cuando por las mañanas veía en los titulares a cientos de chicas ser violadas, raptadas, asesinadas...
Lo comprendí cuando me di cuenta del mundo en el que vivíamos y me llenaba de orgullo al ver a gente luchando por uno mejor en las calles:
Así que al entenderlo, me uní a ellas y a la lucha del feminismo por un mundo de igualdad y oportunidades en equidad.

ReflexionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora