c r u s h ( I I )

115 4 0
                                    

Para de quitarme el sueño.
De tenerme aquí a las dos y media de la mañana escribiéndote textos,
describiéndote mis sentimientos,
cuando ambos sabemos de sobra sin que te haga falta leerlos,
que no son comprendidos ni correspondidos.
Que solo eres un crush,
un amor platónico,
imposible para mis circunstancias,
pero tan perfecto en mis pensamientos
que da pena que todo se quede ahí dentro.
Sé que me debería conformar con que me hables:
Oh, créeme que me conformo,
no sabes lo que provocas con cada palabra que sale de tu boca...
Pero soy de esas personas que siempre está pensando en algo más.
Algo más que sé que no va a suceder,
que lo único que va a pasar es que podamos llevarnos más:
hablar, hablar y hablar.
Pero nunca sobrepasar.
Querido crush,
no sabes lo que provocas en mí.
Ni por asomo te imaginas lo que pienso de ti,
y mucho menos quieras saber lo que haría contigo.
Que cuando me preguntaste si me había visto tu serie favorita,
recordé tu foto de perfil, portada y fondo de pantalla de la misma,
y mientras te decía que no, que pensaba verla,
se escondía una risita y una propuesta para no verla sola...
Pero todos sabemos que las cosas no son así,
que todo se queda siempre entre esas cuatro paredes que tantos recuerdos guardan dentro,
y tantas promesas de algo que nunca llegan ni a asomarse por fuera.
Así que, crush mío,
lo único que puedo decirte a estas alturas,
es lo mucho que me desconcentras y desconciertas,
y lo poco que sé sobre tus intenciones;
o lo poco que quiero hacerme creer saber,
cuando ya intuyo de sobras que no son las que yo querría que fueran.
En todo caso,
he de escribirte (ya que no puedo decirte),
que eres un buen crush al fin y al cabo;
aunque de vez en cuando
todos cometamos nuestros fallos.

ReflexionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora