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- Estás loca

- No, estoy confundida

- Van a atraparte

- No podrán verme

- ¿Y cómo planeas hablar con Aaron exactamente?

Miré mi reloj de mano. 7:30 pm. Tenía menos de 15 minutos para hablar con mi hermana antes de ir a NewField.

Malik había accedido a llevarme, puesto que no existían medios de comunicación en el pueblo por seguridad, además de que lo amenacé con ir por mi propia cuenta.

Habían pasado menos de 24 horas desde que había besado a Owen.

Suficiente tiempo.

Tenía que aclararlo todo. ¿Qué ocurriría con Aaron? Solo había pasado una semana y ya había besado a otro hombre.

Owen había dicho que él me conocía desde hacía ya 3 meses. Pero yo no lo conocía en absoluto.

Era a Aaron a quien conocía bien. A quien amaba. A quien no pensaba abandonar.

Después de ese beso supe que debía regresar con él. Estar con él. Saber cómo habían estado las cosas, cómo estaba mi madre, cómo estábamos nosotros.

El peligro estaba en que ORDEM sin duda había aumentado la seguridad y los guardias. Tal vez hasta habían cámaras en cada esquina.

En sus registros mi caso estaba pausado. Pues la evidencia que tenían era escasa, y todo señalaba a que mi hermana, dos guardias y yo, habíamos desaparecido sin dejar rastro.

Si me capturaban, estaría muerta. Y condenaría a todos los que contribuyeron a mantenerme viva.

- Lo averiguaré llegando allá.

- Maggie - dijo Reg, estábamos frente a la cabaña de humanos normales, el sol se estaba comenzando a poner. Malik tenía pensado llegar de noche para que fuera más dificil que nos detectaran - Te estás arriesgando mucho al ir, y lo sabes, piénsalo un poco más.

- Ya lo pensé. Lo pensé mucho, y no voy a soportar un segundo más sin verlo - tomé su mano y la apreté ligeramente - le diré a mamá que estás bien.

Sin nada más que agregar me dirigí a la cabaña central, donde se encontraba Malik. Este apareció minutos después y me llevó hacia el campo de lecciones.

- Te voy a dar dos horas - dijo él - vamos a llegar algo alejados de la civilización, yo voy a regresar pero tú debes llegar a donde tengas que ir, hacer lo que tengas que hacer, y luego verme en el mismo lugar justo a las 9:00. Tienes tu reloj de mano, no me hagas esperar.

- No lo haré - tomé el brazo que me extendía - ¿nos vamos?

En un instante ya no estábamos más en Pueblo Mutante. Nos encontrábamos en medio de la carretera de la colonia Noreste.

- Es tu turno Maggie - dijo Malik a mi lado. Yo me estaba doblando por el dolor de estómago que se iba apagando poco a poco - Te veo justo aquí - trazó con un gis blanco, una cruz en el suelo - No te retrases. Confío en tí.

Y entonces desapareció una vez más dejándome en la oscura carretera.

Primero lo primero - pensé - Buscar a Aaron.

Caminé derecho, no sin ántes haberme hecho invisible, pues no quería arriesgarme a ser vista por cualquier persona que haya estado paseando en un aerocoche a esa hora.

A lo lejos ya se distinguían las luces de mi colonia. Ya me inundaban los innumerables recuerdos que había dejado atrás hace tan poco tiempo. En uno de ellos estábamos Reg y yo en aquella misma carretera escuchando el anuncio que acabaría con mi vida.

OcultoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora