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Después del atardecer, Owen y yo nos ocultamos tras unos pequeños arbustos cerca de la cabaña central. Estuvimos esperando por al menos una hora, pues nadie nos abría la puerta lo suficiente como para poder pasar.

- Creo que es nuestra oportunidad - dije al ver que un hombre que no conocía entraba, sin embargo, la puerta duró sólo unos segundos abierta y luego el mismo hombre la cerró.

- No - dijo Owen - necesitamos crear una distracción...

- ¿Como qué?

No contestó, salió de nuestro escondite con dirección a la cabaña así sin más. No pude decirle nada para que no me descubrieran así que esperé a ver lo que tramaba.

Se detuvo frente a la puerta y guiñó un ojo en mi dirección ates de tocar.

Inmediatamente apareció Malik y se puso a hablar con él, pero no lograba escuchar. Instintivamente me aproximé a la puerta siendo invisible, y pasé junto a Owen quien sonreía con suficiencia y dirigió una disimulada mirada hacia mí en el instante que crucé al interior.

La cabaña central, como me había explicado Malik alguna vez, era circular en vez de cuadrada como las otras, y sinceramente me sorprendió lo que ví al entrar.

Alrededor de una enorme mesa redonda al centro de la única habitación que conformaba la cabaña (sin contar un pequeño cuarto en una esquina), habían distribuidas en sillas con cierta distancia entre ellas un grupo de las personas más influyentes del pueblo, entre ellas Vex y Trevor. Todos discutiendo y gritándose entre ellos.

Hora de actuar

Me dirigí a una esquina donde habían algunas cajas de metal que parecían ocultar algo importante, sin embargo era arriesgado abrirlas sin que me vieran, así que me senté sobre una de ellas y me dediqué a escuchar.

Justo cuando Malik le cerró la puerta a Owen y regresó a uno de los asientos al fondo de la mesa, Vex se puso de pie.

- ¡Silencio! - gritó ella - Annie, tú primero.

- Gracias - contestó una mujer bajita y regordeta con un sombrero de lana - quisiera discutir sobre los voluntarios de los establos. No son suficientes, necesitamos más personas ayudando, después de todo, de ahí es de donde sacamos los alimentos que consume todo el pueblo.

Después de algunos murmullos entre los otros presentes Vex asintió.

- Está bien - contestó ella - mañana daré el anuncio para solicitar voluntarios, Héctor.

Un hombre de la tercera edad se levantó de su asiento.

- Ya comenzó la temporada de caza, y creo que podríamos ir a buscar algo bueno, en los alrededores del bosque, mayormente en la zona sur.

- Tenemos un equipo de caza que ya lleva discutiendo eso Héctor - contestó Trevor dejando al hombre en silencio - ¿Alguien más? - nadie respondió - bien entonces me gustaría discutir sobre los jóvenes que vamos a llevar a...

- Ya discutimos de eso ayer - dijo malik bruscamente levantándose - no llevaremos a esos jóvenes a morir.

- Malik, - siguió Trevor - sé razonable, si no aprovechamos la oportunidad...

- ¡No pienso repetirlo! - gritó Malik - si quieren luchar, luchen ustedes mismos, pero no arriesguen las vidas inocentes de esos chicos.

Enojado y a paso firme, Malik salió de la cabaña cerrando fuertemente.

- Bien - dijo Vex - supongo que con eso finalizamos la reunió de hoy - se puso de pie invitando a los demás a hacer lo mismo.

Uno por uno, fueron saliendo de la cabaña murmurando entre ellos. Al final sólo quedaron Vex, Trevor y otro hombre que no conocía.

OcultoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora