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El golpe llegó más fuerte de lo que creí.

Me puse de pié mientras me limpiaba la sangre que corría desde mis labios ahora partidos y dirigí una patada alta hacia la cabeza de la chica.

Di en el blanco.

Me cubrí la cara con las manos y sonreí para mis adentros mientras evitaba los golpes que ella seguía enviando hacia mí.

Esquivaba cada uno.

Agáchate, salta, izquierda, derecha, arriba, golpe.

Cambié a ofensiva y envié más golpes ahora a su abdomen, acerté dos de ellos, lo suficiente para hacerla doblarse. Aproveché y le dí una patada desde atrás fuertemente para tirarla al suelo.

- Maggie gana la ronda - dijo Malik.

Extendí mi mano con una sonrisa hacia la chica que acababa de derrotar, "Coral" dijo que se llamaba, una chica más que podría morir en el momento de atacar ORDEM.

Desde el gran anuncio, se les informó a todos los mutantes partícipes en las lecciones, el plan y lo que implicaba. Algunos lo tomaron con entusiasmo, algunos con calma, y sólo un par de ellos se negaron a participar y pude convencer al consejo de permitirles abandonar.

Era lunes, sin embargo con la proximidad del ataque, las lecciones se comenzaron a tomar todos los días, y mis lecciones personales no se tomaban más, sin embargo nadie sabía aún sobre mis habilidades externas.

En cuanto a Owen, no había hablado con él. Ni siquiera lo había visto con toda la actividad y el movimiento que se había manifestado en el pueblo.

Desde donde me había detenido para descansar después de la reciente batalla sin poder utilizar habilidades, alcanzaba a ver a la bola de pelos teñidos colgada del fuerte brazo del pelirrojo, mientras éste tomaba agua de una botella de plástico.

- Maggie - dijo una voz a mi lado provocándome abandonar mis pensamientos - ¿Podemos hablar un segundo?

Seguí a Trevor hacia afuera del campo y luego atrás de un grupo de cabañas hasta que nadie pudo vernos.

- ¿Qué sucede?

- El ataque - dijo el anciano - no creo que sean suficientes personas.

- ¿Tú crees? - al procesarlo la preocupación llegó rápidamente, ya que Trevor era la persona más inteligente del mundo - Y ¿Cuántas personas serían suficientes?

- Al menos el doble.

Miré a otro lado. Aquello era malo, muy malo, no conseguiríamos tanta gente en dos semanas.

- ¿Qué debemos hacer?

- Hice los cálculos - dijo y su mirada se perdió, como si no me hablara a mí - y si aumentáramos la edad requerida a al menos 40 años, se sumaría un total de 37 personas más aquí, 26 en el pueblo central y 32 en el del norte, y entonces nos faltarían otras 55 personas para completar la cantidad mínima que deduzco que requerimos.

- ¿Y de dónde sacaríamos a esas personas?

Se hizo un prolongado silencio de Trevor estudiando mi cara y yo intentando pensar en una buena idea.

- Hay otro pueblo - dijo al fin - está en el sur, fuera de SouthField, no simpatizamos con ellos, sus creencias son distintas a las nuestras.

- ¿Te refieres a la religión?

- Me refiero a lo que es correcto y a lo que no - al notar mi expresión confundida continuó - nosotros queremos luchar por ser aceptados y acabar con la persecución de mutantes, para vivir en paz como ántes. Ellos luchan para controlar el país y estar por encima de toda la gente normal.

OcultoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora