El Jardinero (KaiSoo)

Capítulo 8

Kyungsoo ya había comprado un regalo para el cumpleaños de su hermana y ahora caminaban hasta el coche de Jongin.

-Seguro que le encantará ese detalle a tu hermana – dijo Jongin.

-Creo que sí, tendría que haber ido ayer a comprarlo pero como sucedió lo tuyo.

-Lo siento.

-No te preocupes, ya compré el regalo y su cumpleaños es mañana.

-Seguro que será una fiesta divertida y más que en unos meses será mamá por primera vez.

-Sí, estamos muy ilusionados, será el primer nieto por parte de las dos familias, el marido de mi hermana es hijo único y sus padres son muy mayores, están muy felices.

-Supongo.

-Además seré el padrino de ese niño, Taeoh se llamará, lo voy a amar como si fuera mi propio hijo, ojalá se parezca a mi, aunque sea un poquito, somos mellizos.

-Así tienes una hermana melliza.

-Sí y nos queremos mucho.

-Siento que te gustan muchos los niños.

-Sí, lástima que no tendré hijos.

-Bueno, siendo gay es complicado pero se puede adoptar o....

-Jongin, estamos en Corea del Sur, no me van a dejar que adopte un bebé.

-Quizás fuera del país o...

-No soy rico, quizás tú si puedas pero yo no... - Kyungsoo bajó la mirada.

-Mejor no nos pongamos tristes con ese tema.

-Sí, es lo mejor.

-Pero eso no quita que me enseñes una foto de tu hermana para ver el parecido.

-Oh, claro, ahora mismo - Kyungsoo pasó el regalo a Jongin para que lo sostuviera entre sus manos y poder sacar su móvil y enseñarle a Jongin una foto.

-Es preciosa, os parecéis mucho, tiene tus mismos ojos y tu nariz, aunque tus labios son más bonitos.

-Oh, gracias... –Kyungsoo se sintió alagado y avergonzado --Continuaron hablando hasta que llegaron al coche unos minutos después.

-Conduces tú o todavía no puedes, sino me voy en el metro si estás bien - preguntó Kyungsoo para despedirse y coger el metro.

-Ya estoy bien, conduciré...todavía quedan unas horas para que oscurezca y si no tienes nada qué hacer.

-Qué propones.

¿Te gusta el béisbol?

-Sí, me gusta mucho pero las entradas están caras.

-Pues tengo dos entradas en la guantera del coche, ¿por qué no vamos juntos? Falta una hora para el partido, si nos damos prisa llegamos antes de que comience.

-¿Quieres ir conmigo? Si ibas a ir con alguien más...

-No iba a ir con alguien más, de hecho...ni me acordaba que as tenía hasta hace un momento.

-¿No? Pues a mí no se me olvidaría que tengo dos entradas, desde luego que no, aunque después de lo de ayer...

-No eran mías, bueno...se las conseguí a un cliente del hotel habitual pero ayer tuvo que marcharse por asuntos familiares y me las regaló sabiendo que me gusta el beisbol, qué dices, ¿vamos los dos? No podemos desaprovecharlas.

-De acuerdo, porqué no, vayamos.

Una hora después los dos chicos disfrutaban del partido, hasta Jongin había comprado unas gorras del equipo local, unas manos de espuma con el índice hacia arriba.