Capítulo 47

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—Quizás una sola persona no arruine mi noche pero si una sola puede hacerla mejor.

Bajo la cabeza y sonrió.

—A todo esto........¿Cómo supiste que estaría aqui?

—No lo sé, tal vez fue mera coincidencia. -Rio nervioso.

Nos quedamos en silencio unos segundos, veía cada aspecto de su rostro, cada pequeño detalle me parecía muy lindo.

—¿Por qué haces esto Luis?

Me miró confundido.

—¿Hacer que?

—Me haces sentir algo que no puedo explicar.

Él sabía perfectamente de lo que hablaba, sus mejillas se pintaron en un tono rojizo y dejó ver su linda sonrisa. Tenía el don de hacer que cada segundo me gustara más.

—Y a decir verdad, tengo miedo. -Jugaba con mis manos.

—¿De mi? -Pregunto.

—De ambos. Tengo miedo de salir lastimada como anteriores veces. No quiero salir lastimada.

—No voy ni quiero lastimarte.

Narra Fernan:
¿Cómo se podría lastimar alguien que quieres y quieres protegerla de todo mal?
Tú me haces tan bien, _____.
Ojalá fuera un poco más fácil decir que me gustas, ojalá no fuera tan cobarde.

Narra ______:
Esas palabras, esas palabras hacían que quisiera arriesgar absolutamente todo, esas palabras viniendo de sus labios hacia que sonarán más bonitas.

—Y quizá esto ya se volvió incómodo -Rei nerviosa- así que, hablemos de como se creo el universo, o de si los extraterrestres existen, o de canciones que llegan al alma, tal vez una estrategia para copiar en exámenes o....

No me dejó terminar, puso su dedo pulgar en mis labios.

Nos miramos mutuamente sin decir nada.

Mire sus labios y el los míos.

El corazón gritaba lo que nuestras bocas callaban.

Lentamente fue acercándose más y más hacia mi, al tal punto de poder sentir su tibia respiración junto a la mía.

Tan repentinamente pego sus labios con los míos.

Nos besamos, pero aquello era más que besarse. Era como comer cuando has estado hambriento, como beber cuando has estado sediento, como sentir el calor de alguien cuando has estado sola.

¿¡Que estaba pasando!?

Nuestros labios jugueteaban entre sí.

Era una beso tierno pero hambriento a la vez.

Sus labios eran tan dulces, tan únicos.

Aún en el beso, abrí un poco mis ojos y entonces me di cuenta de que ya me había enamorado, de que ya no había vuelta atrás. Una vez más me daba cuenta cuánto me gustaba y cuánto tiempo lo había necesitado. Lo vi tan tierno, con sus ojos levemente cerrados.

Ambos sonreímos en medio del beso.

Narra Fernan:
No tenía cabeza para nada, solo podía pensar en ella.

Sus besos eran perfectos.

Nos separamos a falta de aire.

Ayude a ponerse de pie de ese duro piso, ya estando de pie, la abracé, la abrace tan fuertemente que podía sentir su corazón latir a cien kilómetros por segundo.

|| Me enamore de mi idolo || || Me enamore de una fan || (Fernanfloo Y Tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora