My Heaven

Capítulo 17

JiYong

Al fin había logrado salir de la discoteca, pero en cuanto colocó un pie fuera el frío nocturno hizo que se estremeciera, pues una delgada camisa era su único abrigo. Aún así continuó andando, y mirando alrededor en busca de los tres sujetos que se llevaban su chaqueta y la llave de SeungHyun con ella.

Giró su cabeza a la derecha y fue entonces cuando los vio. Iban caminando tranquilamente y ya casi estaban a mitad de cuadra. Se apresuró en seguirlos por temor a perderlos. Su vista vaciló por un breve segundo y sacudió la cabeza, aunque eso provocó que se mareara más. Llevó una mano a la pared más cercana y avanzó sosteniéndose en ella. Ya podía oír sus risas con mayor claridad a medida que se aproximaba. Se sintió agradecido cuando se detuvieron en la esquina, seguramente esperando poder cruzar.

-Disculpa... -Tocó el hombro de quien sostenía la chaqueta y el hombre se volteó-. ¿Podrías devolvérmela? -Señaló el abrigo.

El sujeto lo miró con sorpresa, al igual que sus dos compañeros. Sólo entonces JiYong logró distinguirlos mejor. El tipo de la izquierda tenía la cabellera pelirroja en punta, y el de la derecha era un rubio con el rostro lleno de piercings. El del medio, quien sostenía la chaqueta de cuero, les sacaba casi una cabeza a los otros dos, y el volumen de su cabello oscuro daba la impresión de tener un casco puesto.

-¿Quieres que te dé esto? -Levantó la prenda y JiYong asintió-. Pero es mía.

El más bajo frunció el ceño.

-Te equivocas, es mía -lo contradijo el ángel-. Me la olvidé en el baño y tú la encontraste.

-Claro que no, esta chaqueta me la compré yo mismo ¿verdad, chicos? -Miró a sus amigos, quienes asintieron sonriendo divertidos-. Lo siento renacuajo, pero creo que estás confundido.

-No estoy confundido... yo te oí cuando dijiste que la encontraste.

-¿No me digas que escuchas conversaciones privadas? -Fingió sorprenderse-. Tsk tsk tsk... eso es muy feo.

-Mentir también es feo.

-Oye ¿me estás llamando mentiroso? -Frunció el ceño.

-Sí.

Los dos espectadores se rieron pero el más alto puso expresión de molestia.

-¿Cómo te atreves a hablarme de esa forma, mocoso? Mejor desaparece si no quieres ganarte una buena tunda.

JiYong se tambaleó cuando el otro le dio un empujón, pero no se retiró.

-Puedes... puedes quedarte con la chaqueta si quieres... ¿pero podrías devolverme la llave que tiene dentro? La necesito... por favor.

El hombre se rió.

-¿Crees que me interesa lo que necesites? Lárgate de una vez niño, no me fastidies -Se dio la vuelta.

Al tenerlo de espaldas JiYong vio su oportunidad y le arrebató la prenda de la mano.

-¡¿Qué demonios?!

Escuchó que el tipo mascullaba mientras él se echaba a correr de regreso a la disco... o al menos hacía un intento de correr, pues su cabeza mareada se lo estaba dejando difícil. Apenas se había alejado cuando una fuerte mano lo cazó de la espalda de la camisa deteniéndolo. El frenar bruscamente hizo que cayera, pero la persona que lo sujetaba lo obligó a pararse.

-¿Te crees muy hábil? Regrésame la chaqueta.

Las personas que pasaban por su lado parecían notar la tensión entre ellos. Algunas los miraban unos segundos y luego apuraban el paso, en cambio otras habían frenado y sólo los observaban con morbosa curiosidad.