-¡ESTE ES MI ÚNICO LUGAR!
Ya no puedo volver a lo real, esa ya no es mi realidad.
Esto es real...Es mi mundo.
Cris, la protagonista de esta historia, es una chica miedosa que tiene otra oportunidad al tener el honor de pertenecer a Città Coraggiosa...
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-¡¿Pero qué...?! - Susurro en forma de grito.
-Salgamos de aquí - Me agarra del brazo y me saca del salón - Necesito aire.
Me llevó hasta la salida de la Universidad y echó a correr.
-¡¿A dónde vas?! - Grito mientras le sigo el ritmo - ¡¿A dónde vamos?!
-¡No cuestiones! - Corre sin mirarme - ¡Sólo sígueme!
Así avanzamos hasta un parque bello pero solitario. Apenas llegamos Jess se tumba en el césped que cubre una zona de juegos.
-¿Qué ocurrió? - Me siento a su lado - ¿Estás bien?
Ella no me responde, sólo tapa su rostro con el brazo, de esta forma puedo ver sus puños con marcas.
-¿De quién es la sangre? - Pregunto como si no me importara - ¿Tuya o de tu padre?
-No seas tonta - Ríe por lo bajo - No lo he matado...aunque quisiera.
-¿Cómo te hiciste eso? - Toco ligeramente las heridas - ¿Golpeaste a alguien?
-Si el vidrio de mi cuarto puede ser clasificado como "alguien"... - Jess aprieta más el puño - Entonces si.
Abro mis ojos con sorpresa.
-¿Y porqué tu vidrio terminó contra tu puño? - Trato de hacer que me mire - ¿Se portó mal?
-Muy graciosa - Se incorpora para levantarse - El vidrio no tuvo la culpa, sino mi padre.
Jess me mira y luego aparta su mirada, de repente unas lágrimas furtivas asoman en sus ojos.
-Jess... - Ablando el tono de voz - ¿Qué ha pasado?
El silencio asoma por unos instantes... Y entonces observo como Jess tensa la mandíbula mientras sus brazos empiezan a temblar.
-El... - Toma un poco de aire - ¡El idiota de mi padre la volvió a regar! ¡¿Sabes?! ¡Mi madre estaba tan contenta porque hoy llegaba a la casa, preparó una cena especial, nos mandó a arreglar todo y se vistió como nunca! ¡Ayer cumplían aniversario! ¡¿Y sabes lo que hizo ese estúpido?! ¡NUNCA LLEGÓ!...Mi madre estaba destrozada, entonces salí un rato para comprar una película y calmarla un poco...¡Y en el camino lo encuentro entrando a un motel con una chica tan joven que podría ser mi hermana! NO AGUANTÉ MÁS...corrí hacia él y le grité pidiendo explicaciones...¡Pero me preguntó si nos conocíamos! ¡ME NEGÓ!
Para un momento por la falta de aire.
-...No pude... - Jess habla con un hilo de voz - Corrí tan rápido como pude hasta llegar a mi casa, le entregué la película a mi hermano y subí a mi cuarto...grité hasta quedarme sin voz. Entonces mi madre abrió la puerta, con los ojos llorosos pero contenta, mostrándome un mensaje donde mi padre decía que no podría llegar, que su jefe le había convocado a una reunión de último momento y que eso podría significar un ascenso. La rabia me condenó, y lo único que se me ocurrió en ese momento fue destrozar mi ventana, sin importar el dolor que sentía la golpee tantas veces que mis manos sangraron, y cuando no pude romperla agarré mi caja de metal para volarla contra el vidrio...Mi madre quiso detenerme...Pero mi hermano llegó y la detuvo mientras saltaba hacia la calle.
-¿Y? - Le digo aún anonadada - ¿A dónde fuiste?
-Da igual - Me dice desviando la mirada - Dormí en este parque muchas veces antes que ésta.
Me quedo un rato en silencio.
-No te he visto en Città Coraggiosa - Trato de cambiar el tema -¿Por qué?
-No he podido ingresar - Me dice con cierto pesar - Para acceder se necesita de concentración...Y es lo que menos poseo ahora.
-Y...¿Volverás a tu casa? - La miro fijamente - Porque volverás, ¿no?
-Si, pero por ahora no - Jess se vuelve a acostar - Hoy llega mi padre, y no formaré un alboroto en frente de mi hermano.
-¿Dónde te quedarás? - Me acuesto al lado de ella - Porque no volverás a dormir aquí.
-No tengo dónde más ir - Dice con un hilo de voz - Mis ahorros no me dan para pagar un arriendo...Y ni siquiera tengo trabajo.
Se me ocurre una idea.
-¿Sabes? Tengo suficiente dinero para pagarte el primer mes de un departamento que queda cerca del mío, te puedo conseguir un trabajo de medio tiempo en el restaurante donde trabajo, pero serían los días de semana menos sábado y domingo, porque esos días ya están ocupados por mí. - Le digo orgullosa - Así no tendrías que pasar las tardes en tu casa, y podrías dormir en paz.
Los ojos de Jess de repente empiezan a brillar.
-¡¿En serio harías eso?! - Se abalanza sobre mí - ¡Gracias Cris!
Me abraza y me da besos en toda la cara.
-¡Quítate! - Me río mientras intento apartarla - No hay de qué.
Luego de eso volvimos a nuestra Universidad, y cuando ésta acabó nos dirigimos a el departamento que le mencioné, pagué el mes y llamé a mi jefe, quien accedió a darle trabajo por las tardes. Esa misma noche ella compró un colchón de segunda mano y yo le presté una sábana.
- Con esto te bastará para empezar - Le regalo un fajo de billetes - Suerte, Jess
-Te prometo que te pagaré por todo este favor - Sonríe ampliamente - Gracias Cris.
Entró a su departamento y yo entré al mío.
*...Huele bien*
Apenas llego puedo escuchar sonidos en la cocina. Camino sigilosamente hacia ella, pero no hay nadie.
*¿Dónde estar...?*
-Hola Cris... - Un susurro en mi oído provoca que me estremezca - Estaba esperándote...
-Alex... - Sonrío de lado - Ya me esperaba eso...
Holaaaaa!!!!!! Como es feriado subiré caps seguido :3 Espero que les haya gustado.
