Harry es un torpe y algo inseguro estudiante universitario que ha estado enamorado de su mejor amigo. Louis no se da cuenta de lo que siente, hasta que es muy tarde.
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Cancha de fútbol Mejores amigos
—Creí que cuando decías que tenías dos semanas libres de entrenamiento, te referías a no jugar fútbol.
—Claro. —dice Louis pateando la pelota hacia el rizado. —Pero que mejor que volver a pasar tiempo juntos que jugando fútbol. —sonríe.
—Pero no soy tan bueno. —dice intentando atraparla con su pie, fallando, viendo la pelota irse a sus espaldas. —Por eso no entre al equipo.
—Entonces que mejor forma de aprender que con el capitán del equipo. —dice golpeando su pecho.
Harry rueda los ojos, tomando la pelota entre sus manos, lanzándola al castaño, quien la baja con su pecho para después tomarla con el pie. Louis alza una ceja, presumido.
—Ya no me interesa entrar al equipo. —dice acercándose al castaño.
—Bueno, sigue siendo divertido. —dice Louis jugando con la pelota. —También podríamos entrenar esas piernas debiluchas. —le da una mirada. — Aunque tienes buen muslo.
—¿Gracias? —dice con extrañeza.
—Pero siguen siendo un poco torpes.
—¿Me estás llamando torpe? —pregunta alzando la ceja.
—A tus piernas. —responde. —Vamos. Quítate esos lentes, si no quieres que terminen rotos por un balonazo. —le pasa la pelota.
—Así estoy bien. —dice recibiéndola, tomándola con el pie.
—De acuerdo, pero luego no te estés quejando que por mi culpa te quedaste sin gafas. —se encoge de hombros. —Empecemos con lo fácil, recibir la pelota con éxito, sin pisarla y caerse.
Harry hace una mueca asintiendo. Su especialidad era caerse.
Durante veinte minutos estuvieron pateando la pelota, pasándola uno al otro. En algunas ocasiones Harry no lograba detener la pelota, dejándola rodar. Hubo 2 veces en las que el rizado había pisado la pelota accidentalmente, cayendo de espaldas, haciendo reír al castaño.
Continúan así unos minutos más, hasta que Louis decide subir un poco el nivel.
—Bien, ahora practicaremos quitar la pelota, así como evitar que te la quiten. ¿Estás listo?
—No. —niega con la respiración acelerada y el sudor escurriendo por su frente. —Pero lo intentaré.
—Bien, yo correré con la pelota y tú intentarás quitármela, ¿de acuerdo? —ve al rizado asentir. —Evita patear muy fuerte, podrías lastimar al otro jugador y salir expulsado del partido.
Harry asiente, sigue con la mirada al castaño que camina unos pasos lejos, lo ve bajar la pelota y empezar a acercarse a él con la pelota en su pies, pasándolo de uno a otro con destreza. Harry se acerca intentando quitarle la pelota, fallando cuando el castaño la pasa entre sus piernas y termina enredando su pie con el del castaño, tomándolo de los hombros al sentirse desequilibrado, jalándolo consigo, haciéndolo caer encima de él. Louis recarga sus manos en el pasto levantado la cabeza, viendo al rizado a la cara, riendo al verlo frustrado.
