13. Inspector

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Me desperté la primera, casi no me acordaba de lo que había pasado ayer porque todo ocurrió muy rápido y casi no llegué a procesarlo del todo.

Me levanto y voy a la cama de Mimi, que está tumbada boca arriba y con los ojos cerrados. Se ve a simple vista que no respira, pero por si acaso pongo dos dedos en su cuello para tomarle el pulso.

Ni un solo latido.

No sabía muy bien qué era lo que íbamos a decir, ¿que nos la hemos encontrado así? No hay sangre ni nada, sólo fue un pinchazo, y espero que Miriam haya tirado la jeringuilla y se haya deshecho de ella.

-¿Ya sí que está muerta no?

Me doy la vuelta por el susto y me encuentro la cara de Miriam a pocos centímetros de la mía, mantenemos la mirada un rato, mi mirada baja a sus labios y la de ella a los míos, ¿qué hago yo ahora? ¿La beso? ¿Me va a besar?

-¿MIMI?

Nos asustamos tanto Miriam como yo (de hecho creo que Miriam llega a maldecir por la interrupción) y nos giramos hacia la puerta, donde está Ana aproximándose hacia Mimi. Observamos cómo le toma el pulso y se queda pálida al ver que está muerta, se gira hacia nosotras con rabia y me agarra del cuello (no sé qué manía tienen con agarrarme del cuello) y me tira al suelo.

-Tú... —me pega un puñetazo—. La has matado

-Ana —Miriam agarra del hombro a Ana y la separa un poco de mí—. No te conviene darle de hostias

-Déjame vengarme, la ha matado

-Para tu información quien la ha matado he sido yo, Mimi era la que quería matar a Amaia, y lo intentó, y entonces yo la maté. Y ahora deberíamos decir que está muerta porque no quiero un esqueleto en mi puta celda, y como se te ocurra pegarle otro puñetazo a Amaia o a alguien de esta celda, te quemo viva con tu droga, ¿entiendes?

-Va-vale

-Pues levántate y ya puedes estar diciendo que está muerta

-Voy

Me lanza una mirada de asco antes de levantarse de encima mía y se va a gritar que Mimi está muerta, Miriam me ayuda a levantarme y me sonríe.

-Gracias otra vez supongo

-De nada

Nos quedamos otra vez mirándonos fijamente como hace unos minutos, Miriam me agarró de la nuca y acercó poco a poco mi cara.

-¿Qué coño grita la otra loca?

Otra vez nos interrumpen, esta vez Mireya, que se acababa de despertar a causa de los gritos y sollozos de Ana diciendo que Mimi está muerta, y en cuestión de segundos suben Vázquez y Merino con la gobernanta Noemí.

-¿Qué coño ha pasado? —pregunta Merino acercándose al cadáver de Mimi—. ¿Os la habéis encontrado así?

-Sí jefe —dice Miriam—. Ha amanecido muerta

-¿Entonces estáis diciendo que la mataron anoche y que vosotras no vísteis nada? —pregunta Noemí notablemente enfadada—. Bien, pues venga, Vázquez, llama a el inspector Guix y que interrogue a las tres ahora mismo

-Pero bueno gobernanta —se queja Mireya—. Deja que me ponga el mono por lo menos

-Sí venga —resopla Vázquez—. Vestíos las tres y venid conmigo

Todas nos pusimos el mono y fuimos con Vázquez hasta una sala en la que no había estado nunca porque es la primera vez que me interrogan. Tuvimos que esperar un rato hasta que llegó el tal inspector Guix.

-Bueno —dice mirando unos papeles que tenía en la mesa—. Ya he mirado la escena del crimen y vuestras fichas también las he mirado. Miriam, a ti te conozco ya, Mireya, a ti también y tú que eres Amaia

-Sí —me tiembla la voz

-Blanqueo de dinero a tus dieciocho años, ya me contarás algún día, ahora vamos a lo que vamos. Decís que os habéis encontrado a la presa Mimi Doblas tal que así, Martí por favor la foto

El tal Martí (que debe de ser su ayudante) le pasa una foto a el inspector y nos la enseña, es Mimi en su cama, tal y como me la encontré esta mañana. Nosotras asentimos y el inspector continúa hablando.

-Y nos hemos encontrado en el suelo sangre fresca, de hace exactamente unos tres cuartos de hora, justo cuando la presa Ana Guerra ha dicho que Mimi Doblas estaba muerta. Y resulta que la sangre es de Amaia Romero, bueno, se puede comprobar porque tienes sangre por la cara

-Sí —digo limpiándome—. Esto...

-Inspector —continúa Miriam—. Ana estaba perdidamente enamorada de Mimi y se cree que ha sido Amaia, entonces le ha dado un puñetazo

-¿Ana? —pregunta el inspector—. ¿Apellido?

-Creo que es Guerra —dice Mireya

-Vale, Martí, busca pide el expediente de esa Ana Guerra y que la traigan ahora mismo

Esperamos unos minutos y Vázquez trajo a Ana y se sentó.

-Ana Guerra —dice el inspector mientras que lee su expediente

-Así es inspector —nos lanza una mirada de asco mientras que el inspector sigue con el expediente

-Tráfico de drogas, no hay delitos de sangre —deja el expediente a un lado—. Bien, acusas a Amaia Romero de haber matado a Mimi Doblas

-Sí

-Vale, me encantaría escuchar la película romántica que tenías con Mimi Doblas pero vamos a ser directos —da un suave golpe en la mesa—. ¿Tienes pruebas de que eso sea verdad? Es una grave acusación

-Inspector —se ríe—. Detrás de esa carita de niña buena e inocente hay una hija de la gran puta

Las cosas no estaban saliendo bien y miré a Miriam nerviosa, se suponía que Ana no iba a decir nada, y al final voy a acabar metida en aislamiento otra vez por su culpa.

-Ana, que si tienes pruebas, no tenemos todo el día

-No las tengo inspector

-Bien pues ya hemos acabado, investigaremos nosotros y os volveremos a interrogar, pero sé que sabéis quién la mató y que posiblemente seáis alguna de vosotras

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Bua que no sabía que me ibais a odiar tanto por matar a Mimi srry :(

Espero que os haya gustado el capítulo aunque haya sido una mierda y tal :)



Love In Prison | AmiriamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora