POWER»»»» BTS y EXO

BTS- 16

— Jungkook, tengo que ir por Hobie y Jiminie —Murmuró Taehyung preocupado y el menor solo lo abrazó mientras estaba en el sofá.

—¿Sientes algo por ellos? — preguntó el menor a su oído. — No todos podemos llegar hasta el final y una pieza puede ser sacrificable.

Taehyung se levantó molesto por la respuesta del menor, no podía creer que se acababa de acostar con alguien como él.

— Jungkook se supone que yo soy el idiota del grupo. — bufó molesto — Somos más que estos collares de perro y lo sabes.

— Se supone que somos los malos Taehyung, hemos asesinando. Cuando nos conocimos todos nos estábamos apuntando. — expresó algo molesto.

— Seremos malos, seremos asesinos, pero somos compañeros en esto... Somos familia después de todos, solo nos tenemos a nosotros y nadie más nos aceptará como lo hacemos entre nosotros — dijó el mayor con molestia para salir de ahí.

Jungkook solo vio el closet, se quedó viendo por horas el lugar donde tenía a sus padres encerrados desde que se instalaron en el departamento. Recordaba su mirada de horror al ver a su hijo tan cambiado, por primera vez lo veian y solo hablaban mal de él, no hubo más remedio.

Taehyung tenía razón, BTS era el único lugar donde tenía un lugar.

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— Ji...Jimin

— No te hagas el que no sabia Chanie, era demasiado obvio — Jimin rodó los ojos y no era la ternura que siempre fingia ser. — ¿Verdad, perra? — Hablo refiriéndose a Baekhyun que solo lo miro molesto, había caído redondo en su plan.

— Lo sabía, te quieres acostar con Chanyeol desde el principio — soltó Baekhyun molesto.

Jimin tomó aire y agradeció cambiar puesto con Yoongi en el Stadium en silencio. El plan fake estaba funcionando a la perfección.

— ¡Dios! Acabo de comer asesinatos y lo unico que te importa es que si quiero que mi hermano me folle — habló Jimin sin poder creer las palabras de aquel chico. — Sabe que no diré nada hasta que lo saquen de mi vista

Xiumin veía como Chanyeol estaba paralizado sin poder creer lo que veía, toda la imagen de niño puro y bueno de Jimin había desaparecido. Le tocó sacar a Baekhyun y darle una mala mirada, siempre colocaba todo lo referente a su relación con Chanyeol primero.

— Lo odio — murmuró el guardián de la luz — No es un santo y me alegro que su máscara por fin se cayera.

Xiumin no respondió, mejor era dejarlo ser por ese momento y se dedico ver a través del vidrio como Chanyeol en silencio tomaba asiento frente a Jimin. Parecía ido, destruido y sobre todo en llamas de la rabia que lo consumia.

— ¿Quién eres tu y qué hiciste con mi hermano? - habló frio y mirando directo aquellos ojos donde había una mirada de odio. — Se que tienen a un ilusionista con ustedes

— Yo soy tu hermano, ya soy Jimin. — se encogió de hombros — Soy todo lo que los Parks me han hecho ser.

— ¡Tú no eres mi hermano! — Chanyeol alzó la voz negándose aceptar aquella realidad, su dulce Jimin no podía ser Klaw.

Jimin solo soltó una pequeña risa, mientras se removia en la silla.

— ¿En serio crees que después de toda la mierda que me diste te iba a perdonar? ¿En serio crees que perdonaré a los Parks por todo lo que me han hecho? — preguntó sarcástico y Chanyeol no entendía — ¡Tenía 14 años mientras dos hombres abusanban de mi, mientras tu estabas teniendo la fiesta más grande de cumpleaños! — esta vez fue el menor que alzó la voz. — Chanyeol siempre fue una cuchara de oro, ¿Cómo podría entender al bastardo que tuvo que vender su cuerpo para sobrevivir?

Cada palabra acuchillada el pecho del mayor, nunca supo eso y solo miraba a su hermano destrozado frente a él, al que juro proteger mientras era lo que menos hacía.

— Jimin... ¿Dime sus nombres?

— No te preocupes, la justica nunca vino por parte tuya o de EXO por más poderes que tuvieran algunas cosas nunca pudieron evitar. Así que tuve que tomar cartas en el asunto yo — mencionó viendo a un punto en la pared.

— ¿Qué hiciste? — murmuró el mayor preocupado al ver aquella mirada perdida

— Les dije lo mismo que me dijeron ellos, que abrieran las piernas y que los iba a partir en dos — comentó como si no fuera nada — Tu sabes, atras una pierna a una moto y la otra pierna a otra moto que vaya en una dirección opuesta. De algún lado tenía que conseguir lo necesario para el mural.— abrió sus piernas con una sonrisa — les mostré lo que duele.

Chanyeol estaba aterrorizado por Jimin y la mirada que colocó al narrar aquello, algo retorcida y feliz sobre aquello.

— Se que tienen a un ilusionista— volvió a repetir, se negaba aceptar aquello ya que la persona que tenia frente de él no podia tener aquel poder del sonido o hacerle daño a una persona.

Chanyeol no lo pudo evitar, de la rabia empezó arder y subir la temperatura del lugar.

— Ve, busca una cámara y verifica que soy yo si es eso tanto lo que te molesta— Jimin  estaba relajado y no parecía afectado por la subida de temperatura. — Conté los días y las noche por eso hermano — hizó una pausa con una sonrisa segura — de poder tenerte abajo de mi con mis manos en tu cuello y tu pidiendo piedad.

— Pues seguirás contando, tus manos están atadas y tus pies. De ahí es donde salen los sonidos, Kyungsoo lo estudio mientras peleaba contigo — Los ojos de Chanyeol eran llamas que se extinguieron con el siguiente movimiento de Jimin

Asustado, más que sorprendió estaba  cuando Jimin de un momento a otro se había parado y traspasado la mesa hasta llegar para sentarse en sus piernas y pasar sus brazos al rededor de su hombro sintiendo una fría sensación cuando el metal de las esposas traspasaba su cuello con  la intangibilidad del chico. El fuego no le hacía daño y parecía pesado.

— Te odio de aquí al sol a pasitos de caracol, Chanie — expresó con odio puro y el collar de Jimin estaba brillando en una luz verde.— Tu me volviste esto... Diciendo que no lo sabias cuando todos en esa puta mansión sabían de mi situación. — eso le decían las voces a Jimin y Chanyeol vio como la piel de Jimin  se empezaba a poner roja, no resistiría sus llamas mucho tiempo o una ráfaga grande fuego — Dolía cada segundo cuando entraban en mi, mientras tu eres él hijo amado del que todos sentían orgullo.

La puerta se abrió dejando pasar a Baekhyun que apuntaba a Jimin asustado.

— Aléjate de él o disparo — Comentó el chico de luz sin pensar bien  todo.

— Te gustan los huecos, hermanos — comentó con una sonrisa llevando a las manos al cuello de Chanyeol que se sentía frustrado, iba a soltar una llamarada para alejar  Jimin, pero ahora no podía ya que iba a lastimar a Baekhyun. — Vamos dispara

Jimin besó Chanyeol y el sonido de una detonación sonó por toda la comisaría