POWER»»»» BTS y EXO

Nueve- BTS

Jhope le tenia miedo a las armas, había vivido desde que EXO llegó con una en su nuca para que guardará silencio y ahora su poder era su mayor temor.

Su padre había sido un afamado oficial de policía en sus tiempos, hasta que llegó EXO y todo lo bueno para la mayoría de la ciudad, no lo era para algunos. El crimen casi no existía y la paga como algunos puestos de trabajo en la central de policía se redujo. Menos dinero significa menos ingresos para una familia y su madre era alguien que le gustaba vivir del lujo, una materialista por excelencia que le gustaba la buena vida, los martinis, joyas y buena ropa de marca.

Su madre día y noche se quejaba a su cansado esposo que cuidaba criminales menores y con una paga promedio que no cumplía con sus caprichos como antes. Un día su madre llegó con un nuevo brazalete, otro con un nuevo vestido, otro con lujosos zapatos; estaba engañando a su esposo que se partía el lomo para mantenerla con una sonrisa con el joven y recién millonario que no sabia que hacer con su dinero, el vecino, que se hizo rico vendiendo mercancía de EXO.

Recuerda el día que llego con su padre después de comprar una cena para darle una sorpresa a su madre, un pequeño lujo para su familia con una presupuesto muy bajo en los últimos días, la sonrisa de su padre en la patrulla quien imaginaba la cara de su esposa por la sorpresa, bromearon y cantaron como no lo habían hecho en años, su relación padre e hijo siempre fue buena, pero en ese momento estaba en su mejor estado. El policia tenía un trabajo que no le daba mucho, pero tenía al amor de su vida y su hijo y eso era lo que le importaba.

Cuando abrieron la puerta de la casa en silencio para mantener la sorpresa, los que se la llevaron fueron ellos.

Recuerda a su madre tratando de taparse y su amante buscar su ropa que estaba por la sala esparcida. Lo demás no mucho, solo recuerda su padre sacar su pistola y después estaban enterrando los cuerpos en las afueras de SM city en un lugar donde nadie iría por casualidad si no estaban perdidos, luego el frío de la pistola de su padre contra su nuca.

El frío y seco lugar a las 3 de la mañana, los dos montones de arena ocultando los cuerpos en medio del desierto que rodeaba SM city, nadie escucharía si su padre apretaba el gatillo mientras el estaba arrodillado frente de la tumba de su madre y su amante.

— Si le cuentas a alguien de esto, te reunirás con tu madre.  — dijó eso antes de bajar la pistola, mientras le hacia señas que volviera a entrar al auto.

Su padre lo abrazó antes de entrar al auto y sacudió su cabello, el camino a casa fue silencioso. Se había creado una brecha entre ellos.

Su madre dejó un hueco en el corazón de su padre y este también. Ninguno fue el mismo desde que cerraron la puerta y veían el amanecer que se alzaba justo detrás de SM city mientras volvían a casa.

Limpiaron la sala, limpiaron el carro, quemaron su ropa y la de su madre. Sólo dijeron a los vecinos que se había ido con su amante para no volver y como su padre era policía fue fácil ocultar la desaparición de su madre y su amante, todas las evidencias desaparecían al siguiente día.

Bang... Bang...

— Joder, ahora eres un maldito sádico. ¿Cómo explotaste su cabeza a esta distancia? — decía Taehyung cuando se transformó en humano otra vez, había estado siendo un águila para ver los tiros de Hoseok y estaban a distancia considerable con un blanco bien oculto.

— Es una Remington 700. Es precisa y utilizada por Francotiradores ¿Qué esperabas? — Dijó sosteniendo el fusil de cerrojo con un solo brazo. — La mira de telescopio hace un gran trabajo para encontrar cosas a gran distancia, pero igual sin eso yo podría ver hasta a un ratón en desde este piso al suelo — Dijó con una sonrisa viendo la vista que le dejaba el piso 60. Una mirada vista de telescopio se le fue dado con sus poderes que era una gran ventaja.

— Dejame utilizarla, yo quiero aprender... Si, si, si, por fis, si, si — Decía el chico emociónado al tratar de agarrar el rifle que enseguida desapareció y solo cayó a los brazos del otro. — Si quieres te hago un favor de los de Jimin, pero yo también quiero volar cabezas.

— No, tenemos que irnos. Nos van a notar — Hoseok trataba de quitar las manos del chico desnudo de su cuerpo, esa una una de las cosas de los poderes de Taehyung, la ropa no se transformaba con él.

— Le disparaste a un tipo que le puse un punto rojo a 12 edificios de aquí, es prácticamente imposible sin tus poderes. Estoy seguro que le hiciste algo a la bala también. — Taehyung metía las manos en sus pantalones sin pena

— Tal vez — murmuró viendo por la ventana como las personas sacaban sus caras por la ventana a ver de donde venía el disparo. Era un disparo prácticamente imposible. — Es hora de irnos, el gordo nos freira el cerebro si no volvemos pronto, ya son 11 y solo me falta uno para cumplir la misión.

— Bien hagasmolo juntos, yo también  tengo la vista tan buena como la tuya — el menor guiño y saco su lengua pero era difída como la de una serpiente. Si que le gustaba jugar.

— Nada más el último, esta a las 3 en punto. El tiro más cercano — suspiró cansado, No lo dejaría de fastidiar si no lo hacía

Taehyung salto de emoción y espero que fusil volviera aparecer, Hoseok solo volvió a cargar el arma, con  algo de energía sus balas para que volaran los cerebros como le había dicho su ahora nuevo jefe. Pasó los brazos al rededor del menor y los dos sostuvieron el arma en dirección de la mujer que estaba a unos edificios de ellos en una oficina, ella tenia un pequeño papel rojo en su camisa y se lo estaba quitando.

Taehyung pudo sentir la mano de Hoseok temblando por unos segundos sobre la suya, no supo si tenía miedo de su cercanía o de matar a alguien.

— Solo relájate, Hobi. Jin dice que estoy lo suficientemente entrenado para no morder si no quieres — bromeó para tranquilizarlo.

— Te conozco, se que me morderias igual. Hay que tener respeto a las armas, un día eres tú quien  las sostienes y otro la tienes en tu nuca — tomó aire y luego lo soltó para apretar el gatillo con el menor.

Doce disparos en diferentes lugares, doce personas muertas todas tenían en común algo, habían sido salvadas por un miembro de EXO una vez en su vida.

— Hemos estudiado todo, los disparos se hicieron consecutivamente, durante unos 15 minutos. — hablaba el policía a Chanyeol quien estaba con su traje negro con líneas rojas en la última escena del crimen. — Todos tenían una pegatina roja en alguna parte de su  cuerpo.

— ¿De donde han venido todos? — preguntó al ver como tapaban el cuerpo de una mujer que el había saldado de un robo hace unas semanas.

— Ese es el problema, todos están a una distancia tan grande que no se sabe de donde vienen exactamente. Debió ser desde un nido, pero algunos tiros son prácticamente imposible para una sola persona a si que se cree que fueron varias — Explicó el policía.

"Fue una sola persona"

Chanyeol escuchó la voz de Luhan en su mente y aquello no tenía sentido, era imposible por la distancia y el tiempo.

"En todos los lugares se puede ver el mismo lugar, torre SJ"

Tardaron unos minutos minutos todos al piso vacío de torre SJ. Al piso 30 con vista panorámica, el único lugar de toda la cuidad donde se veían todos los edificios donde fueron los ataques y había una ventana abierta.

— Es prácticamente imposible, todavía no existe un arma que lleve una bala a romper la cabeza a alguien a una distancia tan considerable — Sehun veía por la ventana, no podía creer aquello.

— Puede que sea una prueba de esa arma y con  una  mira de telescopio se puede hacer mucho aunque no lo creas. No has visto a las francotiradores haciendo su trabajo — Kyungsoo estudiaba el Lugar y encontró una pluma en el lugar.

— Chicos — Murmuró Suho quien estaba pegado a la ventana y veia las marcas de Bala en la pared.

Un claro BTS, esta hecho con las marcas de las balas en la pared.