Capítulo 2.

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Capítulo 2.

Se había vestido y desvestido media docena de veces antes de ir a entrenar esa mañana. Desvelado, sintiendo en su cabeza una resaca de lo peor. Pensamientos turbios y densos girando en ella.

Incluso después de ducharse, tomar su dosis diaria de cafeína y cepillarse los dientes. No podía sacudirse lo ocurrido.

La manera en que el perfume de Cristiano se había diluido en toda su ropa. La estática en su piel cuando lo tocó . Su sabor como una champaña en su boca. Ese sentimiento de haber sido abusado, pero no por Cristiano, si no por el mismo; el peor tipo de traición.

Se había cepillado los dientes una y otra vez, hizo gárgaras con el enjuague bucal de larga duración, no dejo de revisar su cabello en el espejo retrovisor de camino.

Se acercó al equipo en el campo para practicar, y la peor cosa es, esa prisa en su corazón y en su garganta cuando lo ve allí. Más alto que casi todos los demás, más ruidoso. Resaltando brillante como un letrero de neón. En la forma en la que James no puede ver a nadie más que él.

Y lo peor es, cómo ya está sonriendo cuando Cristiano lo ve, la forma en que no puede ayudarse a sí mismo. El tiempo se detiene un segundo cuando sus ojos se encuentran. Un segundo donde Cristiano no le devuelve la sonrisa, no hace ni dice nada, más que mirar hacia otro lado. Ojos en blanco, sin reconocimiento. Y ahora todo se vuelve desagradable . Todo empeora . Esa terrible pizca de optimismo que tenía, desapareció.

Siente un dolor agudo debajo de la caja torácica, el tipo de dolor en el pecho que podría durar minutos u horas y que podría no significar nada o podría significar que se está muriendo lentamente de algo que hace mucho tiempo no se diagnostica, algo que lo devora vivo desde adentro.

Se pregunta de nuevo si todo ha sido una broma, una larga broma , una forma lenta de torturar vivo a un nuevo compañero de equipo.

Ancelotti les habla a todos en un círculo y la cabeza de James está latiendo con fuerza, su corazón quejándose en un ruido sordo -cuán caliente estaba su boca, la forma en que sus manos lo habían poseído, y todavía lo poseen- lo mucho que desea que Cristiano solo se voltee, lo mire y le sonría. En lugar de eso, Cristiano cuchichea y ríe con Benzema y Bale,
y James se deshace.

Sus labios aun siguen adoloridos. La boca de cristiano había estado presionándose con la suya rudamente, dejándola toda magullada. Todo muy sensible ahora, los nervios expuestos.

Y cristiano esta tranquilo, casual, divertido, james no puede dejar de mirarlo.

Todo acerca de el es siempre demasiado. Burlándose de los demás. Ignorándolo. Sus ojos rozando a través de él mientras trotan.

El trata de evitar la mirada de Cristiano, temeroso, como si cada parte de él quedara expuesta debajo de ella, como una cámara de cine encargada de iluminar. Temeroso de lo que no vera en los ojos de Cristiano.

Porque cristiano lo descubrió.

Se encuentra aferrado al lado de Marcelo durante la mayor parte de la mañana. Temeroso de que sin él, se dejara ahogar en el océano de sus pensamientos. La extraña soledad que esta atravesando. Porque él sabe que no puede contarle ni una sola palabra sobre esto a otro ser vivo. Esto era algo que solo existiría entre los dos. Que lo convertía un extraño para sí mismo. Traicionado por cuanto le había gustado y lo quiere ahora. La manera en que se siente como si se hubiera despertado para descubrir un tatuaje en su espalda que nunca había visto antes. Un lado de si mismo que no sabía que existía, un lado que Cristiano había podido ver primero.

Lo había descubierto.

Se encuentra a si mismo infinitamente celoso de cualquiera al que Cristiano hable y toque . Patéticamente preocupado por todo eso. Ni siquiera le preocupa la idea de que a Cristiano le guste cualquier otro compañero mucho más de lo que parece gustarle él, sino porque anhela esa normalidad que parece tener con los demás. Cristiano los rodea con un brazo, los molesta y habla con ellos acerca de sus novias, esposas o hijos. El desea poder tener eso más que cualquier otra cosa, más que esa cosa oscura y retorcida en la que se habían convertido.

Y lo peor es cuando Cristiano lo mira. Cuando lo asiste en un gol en el entrenamiento. Tiene ese estallido en el pecho cada vez que asiste, y especialmente cuando es para él, Cristiano sonríe para él, complacido, por la primera vez en el día, y lo aturde estúpidamente por un segundo, como si estuviera mirando al sol. Todo repentinamente brillante, vivo y hermoso.

Luego le da una palmadita en la espalda y dice gracias, casualmente, de la manera en que james había anhelado, y es como si todo estuviera bien. Mejor que bien. El finalmente puede olvidarse de todo. Lo han superado por completo, pueden volver a ser solo compañeros de equipo.

Quiere vivir de esa sonrisa por el resto de del día, usarla como si fuera un hombre a punto de ahogarse aferrándose aun balsa.

Luego Cristiano anota uno y otro y corre para agradecer a Bale por las asistencias, con esa mima sonrisa radiante, esa misma sonrisa que de repente ya no se asemeja al sol, ahora luce como nada menos que pura traición sin paliativos, y Bale bromea sobre cómo Cristiano marcará nuevamente con Irina esta noche, y James siente que todo es como una patada en la espalda. Su nombre lo sacudió, su balsa salvavidas fue pateada a un lado, por un repentino e inesperado iceberg.

Después del entrenamiento, él se cambia solo, lejos de todos los demás, de espaldas, rápidamente. Como si las manos de Cristiano hubieran dejado marcas en su piel.

Aterrorizado de ver los ojos de Cristiano, de verlo después de la ducha, medio desnudo o completamente desnudo, con la ropa puesta o no, sabe que no podrá dejar de mirarlo, ruborizándose.

Él sabe que no dormirá con ese recuerdo; el dormir sin eso. Sabe que esa sonrisa aparecerá en todos sus sueños y se convertirá en una dolorosa marca de la manera en la que tendra esperanza.

This is how it didn't happen (Crismes) //Spanish translation// vanillacaramelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora