CAPÍTULO 1

654 29 2
                                    


Sheryl

Hoy ingreso a la recta final del colegio, voy a extrañar tantas cosas cuando me vaya, en especial desayunar de las manos de mi madre, levantarme tarde, salir de compras, ir al cine con mi hermana. No quiero dejarlos, pero Italia me espera para cumplir mis sueños.

Este último año necesito comenzarlo con pie derecho, han pasado un sinnúmero de cosas negativas en tan poco tiempo, por ejemplo, terminar con mi novio, pelearme con mi mejor amigo, perder las clases de jazz, sin embargo, tengo la certeza de que si han sucedido es para comenzar mi historia de nuevo, sin miedos, sin mentiras, amándome cada día más.

-Buenos días familia_La casa se ve impecable esta mañana y mi mamá deslumbra con su sonrisa que tiene un autor y es papá_ Han llegado nuevos amigos al colegio, las redes sociales están que arden.

- ¡Eso es genial! espero que hagas muchos amigos en este año hija bella y termines con excelentes calificaciones como lo has hecho siempre. Recuerda que anhelamos cumplas tu sueño de estudiar en Italia_Mi madre me abraza y retrocedo a esos años en los que me sentaba en el sofá junto a ella, aparecía papá y nos poníamos a tararear canciones hasta que todos caíamos rendidos, Martha era una bebé en ese entonces_sé que lo lograrás mi niña y nosotros estamos aquí para ayudarte y ser tu apoyo.

- No te preocupes mamá, no voy a defraudarlos, uno de mis sueños también es el de ir al paseo de fin de curso que se realizará en un crucero mamá _comienzo a reír y mi madre me mira con cara de pocos amigos_me darás permiso ¿verdad?

-Si te portas bien prometo que hablaré con tu padre para que te deje ir, pero ya es tarde señorita, recoja sus cosas y marche para que llegue temprano al colegio.

-Siempre llego temprano mamá. Te amo.

-Yo a ti amor.

Mi familia es el motor que me impulsa cada día a ser mejor, han estado siempre conmigo aun cuando me he equivocado, por eso mis más grandes anhelos están sujetos a las manos de ellos y haré lo que sea por verlos felices, aunque eso implique que yo no lo sea totalmente.

El instituto se ve igual al año pasado, las mismas estructuras, los mismos maestros con excepción de los estudiantes, han llegado muchos_observo el panorama que tengo en frente, cielo despejado, un hermoso día para iniciar con ganas los estudios y lo que faltaba...mis ojos se detienen y un cosquilleo en mi estómago me hace estremecer, ¡cerca del árbol de manzana se encuentra un chico encantador!, tiene cabellos castaños y una mirada profunda...

¿Será amor a primera vista? _me pregunto en mis adentros y al mismo tiempo me enoja pensarlo, es mi primer día de clases y ya hay un chico queriendo seducir mi mente.

Siento que me cubren los ojos y me sobresalto, me giro para ver quién es y no podía ser alguien peor, Raymond, mi ex novio, aún no supera que le haya cortado. Es el típico chico que cree ser mejor que los demás. En un principio pensé que tal vez conmigo podría cambiar, pero después me traicionó, fueron días llenos de angustia y aprendí que cuando Dios aleja algo de ti, es porque te traerá algo mejor.

-Hola princesa_dice Raymond, con esa labia que lo caracteriza

-No vuelvas a hacer eso Raymond, no quiero que mis pensamientos sobre ti empeoren.

-A veces te vuelves tan arrogante que me enloqueces y daría lo que fuera por volver a estar contigo, te extraño Sheryl. Fui un imbécil al dejarte, regresa conmigo nena, regresa y prometo compensar todo el daño que te hice.

-Todo cambia, te recuerdo que fuiste tú quien lanzó todo a la basura, tus palabras ya no causan efecto en mí, y otra cosa Raymond, yo ya te perdoné, pero quiero que te alejes de mí. Iré buscar a Sara_ quiero que él se aleje, me hace daño tenerlo cerca, aunque ya no sienta nada por él, hay recuerdos que siguen latentes, como las tardes en mi casa viendo alguna película, o las noches de fiestas, a pesar de que él no era nada romántico, sus payasadas hacían entretener a cualquiera, sobre todo a mí, éramos el alma de las fiestas, la pareja de la que toda la institución hablaba, pero así sucede, un día somos una cosa y al siguiente solo secuelas_ una última cosa Ray, no te acerques más, lo nuestro ya terminó.

-Sí eso es lo que quieres lo respetaré, y también acepto haber perdido, te perdí y ahora me arrepiento de lo que te hice, pero ya no tiene sentido, sé feliz_ veo como da media vuelta y se va sin antes decir_ eres una mujer valiosa Sheryl, si alguien te hace daño se las verá conmigo.

Tú fuiste quien me hizo daño pienso mientras busco a mi mejor amiga por todos lados, pero lo único que veo es a ese chico de ojos marrones. Me sorprendo cuando sus ojos se posan en los míos y me sonríe, es como cuando vemos la primavera por primera vez, pero hago como que no lo observo y encuentro a Sara, por fin.

- ¡Sara amiga! Acá estoy -grito a mi mejor amiga.

- ¡Oh hermana! por fin te encuentro, que hermosa estás, alejarte de Raymond te ha hecho bien. _Me dice. Ella siempre se opuso a nuestra relación y me advirtió muchas veces las consecuencias, pero no la escuché y me aventé_ Echaba de menos verte, hay tantas cosas que debo contarte. Sobretodo que Louis ya pudo ingresar a la banda que tanto anhelaba, estamos tan felices.

Comenzamos a reír, siempre que hablamos Louis aparece en la conversación, pero he pensado que ellos hacen la mejor pareja del planeta y a veces me gustaría tener una historia así con alguien.
Sara a estado conmigo desde que teníamos 5 años, ha sido mi compañera de lágrimas, risas, aventuras, cumpleaños, ella fue quien me abrió los ojos cuando Raymond me engañaba y nunca voy a estar tan agradecida. Sin Sara mi vida no tendría sentido.

- ¡¡Sheryl mira!!, ese chico no deja de mirarte, y es tan apuesto. _ Me saca de mis pensamientos y me parece que ella también se ha dado cuenta del tipo que no ha dejado de observarme. Es intimidante pero atractivo.

- Si, es verdad...está muy guapo_ río sarcásticamente_ pero seguro es de esos que tienen el ego muy elevado, porque hasta el momento no ha hablado con nadie y se ha pasado todo el rato recostado sobre ese árbol de manzanas.

-Por qué eres tan dura con el amor amiga, debes olvidarte del idiota de Raymond, comienza a ver por ti, y a ver por tu felicidad, hay tantos chicos que lo darían todo por estar contigo, aparte no he dicho que vayas donde él y te le presentes, pero por lo visto has estado muy pendiente de lo que hace el chico.

- No soy dura con el amor, solo soy realista_ digo riendo_ Raymond ya quedó en el pasado y tampoco necesito a un hombre al lado para ser feliz, si quiero la luna me la bajo yo misma. _El timbre de ingreso a clases se hace presente entre mis últimas palabras. Palabras llenas de eco.

-Lo que tú digas, pero ya te he de ver, bueno ya sonó el timbre, toca entrar a clases, sería increíble que nos tocara con él ¿no crees?

- No digas tonteras Sara, ni siquiera sabemos cómo es, seguro es presumido y le encanta jugar con las chicas que caen a sus pies y hablan bien de él porque tiene unos hermosos ojos marrones_ le digo seria_ además si algún día llegara otro chico, no quiero que sea superficial, quiero que me ame de verdad, que sepa valorarme y respetarme como merezco.

-Sheryl el príncipe azul no existe, solo hay que saber que no todos son iguales, y que la elección es nuestra, depende únicamente de nosotros el resultado.

Yo sé que no hay que juzgar a nadie, pero tampoco meto mis manos al fuego por alguien con el que sólo he cruzado miradas, ¿Existirán chicos que no sean superficiales? todo esto me confunde, pero de una cosa estoy segura y es que no volveré a sufrir por un hombre que no lo merece.

Entramos y...

Otra historia de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora