Capítulo 34: Revelaciones

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Cuando Frost despertó, Smoke ya estaba despierto.

—¡Al fin te despertaste! Dormilón —le reprochó Smoke—. Ya me estaba aburriendo.

Frost se le acercó y le cerró la puerta del armario.

—¡Ey! —gritó Smoke desde adentro—. ¡No se vale, voy a quedarme sin aire!

—Tengo que cambiarme —le contestó Frost.

—Ah, está bien. Ey, si vamos a ser compañeros de habitación creo que hay que poner algunas reglas, por ejemplo: podrías traerme comida cada vez que salgas, ¡voy a desnutrirme! —Frost le abrió la puerta y lo miró con cada de desaprobación—. Que rápido te cambiaste.

Frost notó que las marcas en el brazo de Smoke estaban desapareciendo, al menos ya no tenía ninguna en el cuello.

—Te pareces a Freeze, solo que él no es tan aburrido. Por cierto ¿dónde está?

—En otro lado.

—Tengo una pregunta que hacerte: ¿por qué eres tan amargado? ¿No te quisieron de chiquito? —le preguntó burlonamente Smoke. Frost le cerró la puerta—. ¡Ey! ¡No! ¡Abre! ¡Me asfixio!

—Me voy a desayunar —comentó Frost retirándose.

***

—No puedo creer que me castiguen a mí por salir del sótano y a ti no —le reprochaba Pranch a Rain en el comedor.

—Bueno, a mí no me vio el director, pero sí mi padre y también me castigó, no sé qué es peor, ahora no quiere que lo acompañe a buscar a West. Al menos lo único que tienes que hacer es limpiar algunos escombros. Yo seguramente voy a pasarme las vacaciones encerrado en mi casa.

—Rain —pensó Pranch—, no tenemos por qué ir con Volto a buscar a West, ¡vayamos por nuestra cuenta!

Rain se quedó pensativo, la idea era tentadora pero:

—Pero ¿cómo haremos? No sabemos ni siquiera a dónde pueden haberse llevado a West.

Lavanda se les unió en su mesa:

—Hola, chicos, ¿de qué hablan?

—Iremos a buscar a West —le respondió Pranch, con convicción. Rain miró a Lavanda, ¡claro! Con su ayuda sí podrían pensar en entrar en territorio seyren para buscar a su amigo.

—Cuenten conmigo —les respondió ella.

***

Laly y Katy fueron a la enfermería para ver cómo estaban Wany y Stacey.

Stacey estaba mucho mejor de salud, se sentía muy culpable por haber generado un LIS y se encontraba en ese mismo momento, ayudando a los doctores y enfermeros a curar a los heridos.

Katy sonrió con ternura, así era su amiga, siempre abnegada a los demás, se alegró de verla nuevamente en su estado normal.

Wany, por otra parte, ya había despertado, aunque no se encontraba tan bien como Stacey. Katy y Laly procedieron a contarle los eventos que se había perdido. Stacey, también pasó a saludarlas. Se asustó cuando se enteró de que tenían a un seyren prisionero, pero Katy la calmó, diciéndole que no había nada de qué preocuparse.

—No me gusta cuando dices eso, Katy. —La miró Stacey con mala cara. Después, se percató de la expresión en el rostro de Laly—. ¿Estás bien, Laly?

Se la veía bastante decaída, era indudable que estaba pensando en Zed, la ponía muy mal ver a su amigo tan desolado.

—Sí, lo siento —respondió Laly—, es solo que han pasado tantas cosas.

Escuela de Villanos [1]: Los IniciosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora