거짓말~ Lies

∞Nuevo líder.

Estaban todos en la oficina de Tyler. Por extraño que suene todos estaban serios.

—Entonces —hablo Casey—, ¿ya escogieron al nuevo lider?

—Estamos en eso, todos tienen lo que se necesita —respondió Nath revolviéndose su cabellera rubia.

Lyra se levanto de su asiento y comenzó a caminar alrededor de la mesa lentamente.

—Yo suguiero a Pilar, Patrick ó Scott. Son los más adecuados —Lyra miro a Vi de reojo y esbozo una sonrisa.

Scott y yo fruncimos el ceño.

—Yo soy inestable —Scott se levanto y se acerco a Lyra— y tú lo sabes perfectamente.

—Sí, sí. Sé que no puedes controlar ni a tu familia, lo admito, fue mala idea.

Lyra tenia un tono de burla y Scott, bueno... él por lo que veo, se esta controlando. Tocar el punto de su familia en estos momentos admito que no fue la mejor idea de Lyra.

Scott iba a responder, pero Patrick se le adelanto.

—Pilar no es mala opción. Tiene carácter y la inteligencia suficiente para ayudarnos —recargo sus codos en la mesa y miro a todos un par de veces—, sinceramente ella tiene mejor capacidad que yo, tiene los contactos y el tiempo que yo no tengo, pero... por otro lado, algunos ya no le tienen confianza por lo de la ultima vez.

—¿Siguen de infantiles por eso? —Casey rio—. Encerio que no tienen remedio, ella solo les hizo ver que clase de persona eran sus parejas —sonrio burlona y dirigió su mirada a Armin, luego a Neko y por último a Jimmy— ¿O me equivoco? En cierta forma también creo que Pilar es la indicada, después de todo no es impulsiva como todos nosotros.

Suspire, tanto como Casey y Patrick también habian otros que me querian elegir.

—No creo ser la adecuada —todos me miraron—, pero si ustedes creen que yo soy capaz hare el intento, por otro lado —recargue mis codos en el respaldo de la silla—, habrán nuevas reglas.

Todos se quedaron callados, mire a mamá y ella me sonrió.

—Por el momento necesito hablar con Damián, Dav y mamá. Ellos eran los lideres antes —recalque el "eran"—, necesito que me digan como se maneja todo esto. Por ahora, pueden retirarse.

Se levantaron todos y se fueron, menos Casey.

—Jefa —rio y se sentó a mi lado—, quien lo diría, ¿no?

—Esto va a ser un desastre total —solte una risita y la miré. Diablos, sigue igual de linda.

Ella puso un mechón de mi cabello detrás de mi oreja y sonrió.

—Si necesitas ayuda dímelo.

—Lo haré. ¿Te parece tomar un café?

Casey hizo su cabeza hacia atrás y rio.

—Tan decente como siempre —acaricio mi mejilla—. Mejor vayamos al bar de siempre.