-OCHO-

728 70 15
                                    

¿Como podía ser tan valiente?

-Lo soy.- Sonrió Jisoo al depositar un corto beso en los labios de Taehyung, eso fue el claro detonante para que mi amiga quisiera huir.

Sentí como mi mano era tomada con tanta fuerza para después levantarme de un solo golpe.

-Nos vamos.- Aviso Lisa sin fingir nada, su cara de odio podía notarse a quilimetros.

-N-no espera.- Tartamudeo Tae nervioso y también se levanto de su asiento.

-Déjalas irse amor.- Exclamó Jisoo al empujar a Tae para que se sentará nuevamente, mientras ella seguía con su sonrisa increíblemente falsa.

Ya no sabía que iba a pasar, estaba a merced de mi amiga.

-Si, déjanos irnos.-

Las últimas palabras de Lisa fueron como una puñalada para Taehyung, este no contestó y se quedó boquiabierto mientras nosotras nos fugabamos de la cafetería.

-Más despacio.- Lisa me llevaba de su mano, como si me fuera a escapar o algo así. Ella no se daba cuenta pero estábamos casi corriendo por los pasillos.

Finalmente llegamos a nuestro salón en menos de dos segundos, mi amiga no dudo en lanzarse sobre su asiento y recostarse en el pupitre.

Yo solo acariciaba su espalda, mientras decía palabras de aliento. -Ya, todo va a estar bien. No llores fideo.-

-No estoy llorando tonta.- Me dio un pequeño empujón con su brazo sin verme.

-Lo se, pero algún día quiero verte llorar.- Yo solo estaba jugando y logre sacarle una risita, la verdad es que Lisa nunca demuestra su tristeza aun que este destrozada.

-Estoy hecha de piedra.- Ella levanto su cabeza del pupitre y me miro a los ojos, por más extraño que fuera Lisa no se veia triste.

-Estas hecha de carne y órganos... Ya entiendo porque te va tan mal en biología.-

***

-Falta poco.- Susurro la rubia mientras terminabamos nuestra tarea.

-Lo se, estoy nerviosa.-

-Solo demuéstrale que tienes mucho talento, será fácil.-

¿Mostrarle mi talento?

Tenía que persuadirlo para enseñarme a escribir música, eso me ayudaría muchísimo a entrar a la agencia que quería o eso creo... La verdad, es que no tenía idea que iba a hacer con mi vida.

La última campana para el descanso había sonado, tome las cosas que necesitaba y me dirigí casi corriendo hasta la sala de música para ver a Min Yoongi.

Llegue muy cansada, abrí la puerta que casi no hizo ruido pero dentro del salón se escuchaba música, quizás estaba ocupada.

El salon era bastante bonito, repleto de instrumentos, un gran ventanal y sofás pequeños para sentarse.

Lo que más me impresionó fue aquel pálido sentado junto al piano, Min Yoongi estaba tocando una melodia tan relajante que ni siquiera quize interrumpirlo.

Me quedé junto a la puerta escuchando y observando como este provocaba una melodia que nunca antes había escuchado.

Apenas finalizó la canción, Min Yoongi soltó un pequeño suspiro frustrado y bajo su cabeza.

Quería animarlo, eso había sido genial y por ende aplaudi para que notará mi existencia.

-Llegaste.- El giro su cabeza para verme, yo le sonreí algo nerviosa y este se levanto de su asiento tomando unas partituras y camino hasta una pared donde estaban todos los instrumentos.

^Si Realmente Me Amas^ BP-BTS. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora