La Nueva Casa De Harry - Capítulo 41

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Para sorpresa de Snape, las vacaciones de invierno fueron remarcablemente tranquilas. Oh, la facultad superó su usual ataque de locura de Navidad, solo empeorado por el hecho de que era, por todo intento y propósito, la primera navidad de Harry. Pero a pesar del temor de Snape de que Harry fuera a usar las vacaciones como una excusa para todo tipo de excesos, el chico de hecho estaba más apagado de lo usual. Se pegó a Snape y aparentemente se contentó solo con pasar tiempo en compañía de su guardián, preparando ingredientes para pociones o haciendo su tarea de vacaciones mientras Snape corregía tareas de sus estudiantes. Snape se encontró a sí mismo disfrutando más de la tranquila compañía del mocoso, y su anticipado deseo que su previa solicitud nunca fuera materializada.

El mismo día de Navidad fue problemático de alguna manera. Las terribles predicciones de Snape fueron, por supuesto, realizadas: el resto de la facultad de Hogwarts se mostró en el umbral de su puerta para presenciar la primera Navidad real de Harry. Tan molesta como su casual indiferencia a que su privacidad fuera invadida fue la presencia de los otros maestros que casi se convirtió en un posible desastre cuando Harry se negó rotundamente a aceptar que todos esos regalos que estaban bajo el árbol eran para él. En medio de fuerte susurros de "Aaahhhh" y "Qué dulce". Por no mencionar los ruidosos sollozos de Hagrid, Snape se encontró a sí mismo en la inesperada posición de tener que asegurar públicamente a Harry de que él sí merecía disfrutar las vacaciones y urgir al niño para aceptar los regalos. Hubo más de una serie de "Lágrimas felices" mientras el chico reaccionaba por la generosidad mostrada hacia él, y a pesar de sus más amenazantes gruñidos, el pequeño monstruo volaba hacia él para que lo tranquilizara cada vez, manchando su túnica con alarmantes cantidades de mocos y causando que los demás sufrieran apoplejías menores mientras ellos luchaban por contener su regocijo.

Snape estaba bastante seguro de que Flitwick se había roto algo en su esfuerzo para suprimir su ataque de risa, y eso era el único punto prometedor de su mañana. Harry destruyó cualquier reputación de dureza que Snape pudo haber ganado después de darle al mocoso esa oh-tan-pública palmada en el Gran Salón por plantarse él mismo en el regazo de Snape para desenvolver y exclamar por cada regalo. Cuando la pila de regalos bajo el árbol había sido agotada, Sprout y Hagrid había prácticamente sollozado hasta enfermarse en una rapsodia de alegría sobre "La nueva feliz vida del pequeño pobre Harry" y la sonrisa de Hooch podría haberle dado crédito a Slytherin. Snape estaba cerca de su punto de quiebre, y cuando Dumbledore sugirió que todos ellos compartieran un poco de rompope y cantarán villancicos Navideños para darle la bienvenida al día, fue solo la rápida intervención de Minerva que salvó al director de recibir una Imperdonable justo en medio de sus ojos.

—No, Albus, Severus y Harry siguen en pijama, y nosotros tenemos otros estudiantes en la escuela a los que debemos cuidar—Hizo una pausa, dándole una mirada afectiva a Harry, quién seguía sentado en el regazo de Snape, examinando felizmente la flauta que Hagrid había tallado para él—Podemos tener un karaoke Navideño más al rato en la mañana en el Gran Salón—.

—Bueno, si insistes—Dumbledore suspiró, pero la felicidad en el rostro de Harry alejaron su decepción—Muy bien, nosotros los dejaremos en paz por ahora, mis muchachos. ¡Nos vemos en el Gran Salón para desayunar! —.

La proximidad de Harry previno la franca respuesta de Snape, y Minerva, después de fulminar con la mirada a la vena palpitante en la frente de Snape, efectivamente hizo el resto.

Snape dejó salir un suspiro de alivio cuando la puerta se cerró detrás de él, e instantáneamente se levantó y reforzó sus barreras en lo que él sabía que era un intento vano para prevenir que Dumbledore regresara. Un estridente sonido en su oído lo hizo saltar y dirigió una mirada aterradora a Harry, quien inmediatamente bajó su flauta y mordió su labio.

Harry's New Home - KbinnzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora