The Song [JJ Project/Bnior]

5. Know your name

—¡Es papá!

Jinyoung sonrió al oír el gritó de su pequeña desde el interior de la casa de sus exsuegros. Recibiendo con los brazos abiertos a la niña que saltó a su encuentro.

—¿Dormiste bien, pequeña? —acomodó el flequillo de la menor saludando a los adultos que sostenían la pequeña bolsa con la ropa y los juguetes favoritos de la niña.

—Cayó dormida luego de tomar un vaso de leche —comentó la mujer acomodando la ropa de la niña y entregándole el bolso—ya estaba dormida a las nueve de la noche.

—Gracias —sonrió bajando a la niña para que se despidiera de sus abuelos y tomar su mano para comenzar a caminar.

Caminaron hasta la parada del autobús, era un día para disfrutar con Suhyun, por el mismo motivo ir a un parque a jugar era una buena idea, la pequeña corría con su Barbie en las manos, la versión de hada era su preferida, y con la que más aventuras tenía, y no olvidar al novio de la muñeca, Ironman, que con sus luces eliminaba al mal.

Para finalizar la tarde, decidieron comer en un café con temática de gatos, el lugar favorito de la pequeña, que disfrutaba de su dulce chocolate caliente mientras los felinos se paseaban en el lugar.

🎶🎧

Jaebeom se encontraba apoyado contra el respaldo de su silla, leyendo la letra que acaba de escribir, no le convencía del todo, al igual que los diferentes borradores que se encontraban en su libreta, donde anotaba cada idea que pudiese utilizar. Seleccionando una de las bases que almacenó en su computadora y agregando un par de beats potentes y alegres, tenía la base de la canción, leyendo la letra una vez más acompañada del ritmo, la canción iba tomando forma, y un buen resultado se estaba generando.

Ya una semana de la audición, podía dedicarse a su música, los chicos que fueron aceptados mañana debían aparecer por el edificio, aunque su lugar de ensayo se encontraba en el sótano. Los tendría que ver de vez en cuando, al momento de las evaluaciones una vez al mes.

—Es una buena canción —interrumpió Jackson.

—Lo es —sonrió Jaebeom girándose en la silla. —pero ¿qué haces aquí?

—Como buen amigo que soy, planeo llevar a mi amigo a beber, ya sabes, antes de que se estrese al ver a los nuevos, mañana. —sonrió apoyándose en el marco de la puerta —¿crees que Youngjae este feliz que lo invite?

La cara de Jaebeom demostró una sonrisa que rápidamente cambio a una mirada más seria, odiaba ese tipo de bromas, Jackson podía hacerle sonreír y también cambiar ese estado a una molestia única.

—Eres un idiota —murmuró levantándose para apagar los equipos.

—Vamos, solo era una broma —rió recibiendo el golpe en el pecho —no es para que te molestes tanto. Además, ese bar tiene algo que de seguro te encantará.

—Está bien, pero tú pagas las primeras rondas. —bufó pasando por el lado del menor para salir y apagar finalmente la luz.

—Eres peor que una novia molesta, ellas por lo menos piden ropa o algo que usaran, tu solo te emborrachas.

—Acostúmbrate, tus bromas son de mal gusto. Y como novia seria mucho peor, así que agradece que solo somos amigos.

—Dios y ni lo niegas —rió divertido.

Acompañó al mayor hasta la salida para tomar un taxi e indicar la dirección del bar que frecuentaba, conocía el gusto del mayor y aquel chico que atendía la barra era del total gusto de su hyung.

Cuando llegaron, dirigió al mayor hasta el poblado bar, donde un castaño atendía alegremente a cada cliente, ofreciendo siempre una brillante sonrisa que hacía que sus ojos se perdieran y se dibujaran arrugas a sus costados. Como Jackson pensó, Jaebeom se quedó prendado de él, no dejaba de mirarlo a cada vez que gritaba el nombre de alguna bebida que había sido pedida. Claro que no faltaba la oportunidad en que un idiota intentaba tocarle más de la cuanta, pero él le rechazaba amablemente.

Él no era capaz de hablarle, Jackson era quien pedía las bebidas debido a la innegable timidez del mayor, podía verse como un chico serio y hasta intimidante, pero no estaban más que equivocados al juzgarle únicamente por su apariencia, esa era una razón y la otra era la obvia química que el chico tenía con su compañera de labores, ambos se miraban y parecía que leían la mente del contrario, ya que a pesar del angosto lugar que compartían, en ningún momento chocaron o derramaron algún vaso, y por la manera en que miraba a la pelinegra, era un chico totalmente hetero, y estaba lejos de su liga.

—Es hora de que nos vayamos —dijo al acabar la tercera cerveza, dirigiendo su mirada a Jackson.

—¿Tan temprano? —prácticamente gritó el menor, no creyendo en las palabras del pelirrojo, —generalmente esperas a la octava o hasta que estás mareado.

—Generalmente, pero mañana tengo un día ocupado, si quieres quédate, obviamente estás esperando a alguien. —sonrió al ver el sonrojo del chino, llevaba un largo rato mirando hacia la puerta de entrada.

—No... ¡No es cierto! —Aunque intentará negarlo su rostro lo delató haciendo sonreír aún más al mayor.

—De igual manera te dejo, no quiero interrumpir cuando tu conquista llegue.

Sin decir más, Jaebeom dio un suave golpe en el hombro del menor, sacando un par de billetes y colocándolos en el bolsillo del chico, correspondiente a lo que había consumido, finalmente, que el castaño pagara era solo una broma, siempre le entregaba el total de la cuenta.