—Maeve, estás babeando.— bromeó Arthur.
Ciertamente, no podía quitar mis ojos de aquel impresionante manjar que había sobre la mesa.—Maldita sea, esperaba que ellos también fuesen puntuales.— ya pasaban veinte minutos de las nueve y la realeza no había aparecido.
—¡Hola!— los tres hijos pequeños de los reyes entraron y vinieron directos hacia mí.
—¿Vas a cenar con nosotros?— Thomas me abrazó y Henry hizo lo mismo, Oliver permanecía en los brazos del ama de cría.
—¡Niños! ¡Sentados!— chilló Mary empujándolos como si fuesen animales.
Thomas ocupó la otra silla junto a mí y le di la mano por debajo de la mesa, también le guiñé un ojo a Henry, para que supiesen que no estaba enfadada con ellos.
—Querida, estás hermosa con ese vestido.— comentó la reina según apareció junto a su esposo, ambos tomaron asiento presidiendo la mesa.— Oh, ¿Eres Lord Arthur?
—Claro que es él,— interrumpió el rey con mal genio.— recuerdo su cara perfectamente.
Arthur se limitó a guardar silencio, pero yo sabía que estaba furioso.
—Buenas noches.— Ulric apareció en la sala, haciendo una gran entrada acompañado de las hijas de Waterford, todo eran risas hasta que cerró la puerta delante de sus narices.— Hasta pronto señoritas.
—Ya podemos empezar.— gruñó el rey comenzando a partir la carne y sirviendo en su plato el mejor trozo.
Yo preferí tomar patatas al horno y Arthur cerdo asado, los príncipes se dedicaron a picotear un poco de todo.
La cena transcurría con notable calma a pesar de la tensión en el ambiente.
—¿Cuándo será la boda?— preguntó la reina mirando directamente a Arthur.
—Aún estamos decidiendo la fecha...—trató de disimular y sonrió hacia mí.
—Tendrás que darte prisa, Maeve es una joven maravillosa y tiene más pretendientes.— Ulric tosió para hacerlo aún más obvio.
—Eso no le preocupa, no sería la primera vez que comparte a una mujer.— soltó el rey con pura alevosía.
—Joan no te ama y eso es lo que más te hiere.— Arthur parecía genuinamente afectado.
—¡Ella permanece a mi lado!— el rey se puso de color carmesí y a penas podía respirar.
—Disculpadme.— Arthur mantuvo la calma y se marchó sin causar más problemas.
—Yo...— me levanté de la silla.— Debo ir con él.
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Detrás de un gran rey
Historical FictionEsta novela está dedicada a contar la historia de aquellos que están ocultos tras el trono. Hombres y mujeres de confianza para la corona. ¿Qué ocurrirá cuando el rey esté en peligro?