Quedate Conmigo (Sunxie)

Día 4

¿Qué acaso no existe gente educada en esta puta ciudad?

Es muy posible que la mayoría haya vivido toda una vida llena de gritos y violencia familiar en las cuales sus padres los maltrataban constantemente mientras que su madre prefería salir con sus amigos a discotecas o cantinas de mala muerte en las cuales el único ser cuerdo era el bartender quien servía Dios sabe que porquería con tal de llevar dinero a casa y tal vez dar de comer a unos niños que no son suyos y darle dinero a una mujer que no dudaría 2 veces antes de serle infiel o abandonar al pobre diablo.....

Sunset Shimmer abrió los ojos de golpe a causa de ese pensamiento pasajero que se vino a la mente y que seguramente la asustó en grandes proporciones.

Ella no es así después de todo.

Se encontraba sentada en el asiento del conductor de la camioneta Apple, tuvo unos días difíciles en los cuales su estrés lograba acabar por completo con su humor y sus ganas de finalizar su arduo trabajo. Sinceramente a veces las personas no son de gran ayuda que digamos, ni siquiera por ser de la misma especie pueden ayudar a otros, ni siquiera para....

- ¡AGARRAR UN MALDITO VOLANTE! - lo siguiente que se escucho fue un golpe seco que encendió la alarma de la camioneta roja que Applejack le había prestado a la pelirroja.

Pasaron al menos dos minutos mientras que Sunset reaccionaba de su ataque repentino de ira, no es la primera vez que le sucede algo parecido, de hecho, ya será la 5ta vez desde que comenzó a buscar a Trixie, no puede controlarse cuando se trata de ella, la adrenalina se le acelera con tal solo pensar lo mal que lo puede estar pasando su amiga.

Ya será casi un mes desde que Trixie desapareció, desde su último truco de magia.

Sunset apagó la alarma de la camioneta y salió nuevamente rumbo a las aceras concurridas de aquella zona que decidió escoger para preguntar por Trixie. Esta vez se encontraba por las afueras de Manehattan, creía que era mejor cambiar de lugares constantemente para ganar mayor terreno de búsqueda, lastimosamente era el mismo cuento de siempre.

Ella salía a repartir volantes con la imagen de Trixie y preguntar si alguien la había visto o algo parecido, pero nadie sabía nada o de plano ni siquiera se detenían a escuchar a Sunset o agarrar al menos un volante.

La pelirroja ya estaba arta de siempre encontrar sus volantes votados en el piso, arrugados y pisados, no existe ni un poco de sentido común para brindar al menos cierto apoyo como muestra de dádiva hacia otra persona.

Pero eso era demasiado pedir de parte de sujetos aferrados a un estilo de vida ajetreado.

Parece ser que será otro día en vano.

.................

Samantha tenia ciertas aptitudes que aprendió de Trixie con el pasar del tiempo que ambas estaban juntas, por ejemplo: Sam era orgullosa, no tanto como su "mamá", pero poseía un cierto orgullo inquebrantable cuando se trataba de cosas insignificantes, después, era muy juguetona con todo mundo, aunque Trixie no lo pareciera era bastante infantil a la hora de jugar o divertirse, esa muestra de afecto se quedó grabada en la mente de su "hija", Sam (aunque no podía hablar) era muy divertida, los gestos que realizaba, las muecas que hacía, las simples acciones que realizaba, cada día se parecía más a su mamá, era una niña simplemente adorable y de buen corazón.

Este hecho no pasó desapercibido por Lyra y Bon bon que cada día pasaba se daban cuenta del gran parentesco que Sam tenía con la ilusionista, tanto así que incluso Bon bon casi llama Trixie a Sam.

- Estoy exhausta - se quejó Lyra mientras terminaba de limpiar la barra del bar.

En unas cuantas horas deberían abrir el local mientras que Bon bon junto a Minuette recogían a los niños de la escuela de Cheerilee.