Quedate Conmigo (Sunxie)

Día 14

Adagio tenía una expresión cansada en el rostro, en la madrugada tuvo que soportar a un sujeto que estaba borracho y que le pidió matrimonio con 50 veces, lo bueno es que no se dio cuenta de la cantidad de dinero que le dio y eso realmente agradeció enormemente la mayor de las tres hermanas.

- ¡Aria! ¡Sonata! ¡A desayunar! – gritó Adagio terminando de preparar un poco de café y sirviendo un poco para ella misma después de preparar huevos revueltos para sus niñas – No puedo creer que aun siga haciendo esto – se dijo a si misma mientras tomaba asiento en una de las sillas de su pequeño comedor

- Relájate mamá – apareció de pronto Aria ya cambiada para ir a su colegio – Nadie te obliga a servir el desayuno en las mañanas – se acercó a Adagio y le acarició la espalda, como si estuviera dándole las gracias muy a su manera – Wow ¿huevos revueltos? Acaso es mi cumpleaños – se burló Aria sin quitar su expresión de asombro.

- Pues digamos que estoy de muy buen humor hoy – la hermana mayor no le dio mucha importancia al asunto y se quedó tranquila bebiendo su café con un rostro, aun cansado, pero sereno – ¿Donde esta Sonata?

- Seguramente este terminando de cepillarse sus dientes – respondió la chica de coletas sin mucho afán – O tal vez esté usando tu ropa otra vez para ir a clases – sonrió un poco por la idea y espero a ver la expresión de Adagio.

Sin embargo la mayor solamente asintió con una pequeña sonrisa mientras seguía bebiendo su cafecito.

- ¿No te molesta? – preguntó Aria

- La verdad que no, igual no se verá tan linda como yo – dijo de la manera tan natural posible que fue difícil hacerse la burla de ello.

- Pero... se verá más joven – Aria dudo un poco decir ello puesto que no sabía si Adagio estaba jugando

- Si, pero soy más bonita... Recuerdas cuando tu usaste mi ropa por prime...

- ¡NO! – Aria abrió los ojos como platos y se puso roja

- Ooh por favor Aria te veías tan adorable cuando comenzaste a bailar y a cantar aquella canción de Cher...

- No sé de qué me estás hablando – Aria comenzó a comer su plato de huevos revueltos junto con un pan de manera exageradamente rápida.

- Jajaja tenías apenas 12 años y te tropezabas con mis tacones jajaja – Adagio dejó a un lado su café y comenzó a reírse a sus anchas del recuerdo de la tan inexpresiva Aria actuando como una niña de acorde a su edad.

- No Es Gracioso – dijo Aria con los dientes presionados y sonrojada, no le gustaba recordar cómo era cuando era niña... No por nada Sonata tiene esa personalidad hasta el día de hoy.

- Por supuesto que sí, eras una niña llena de vida que llenaba de orgullo a su hermana mayor – lo dijo de una manera tan seria que era fácil entenderla como burla.

- ¡Esta bien! – gritó Aria – Tu ganas, perdón – finalizó la charla y al mismo tiempo de desayunar.

- Novata – con gracia, con glamour y sobre todo con exceso de orgullo en si misma Adagio terminó su café y observó a su hermana con obvia superioridad.

- ¡Quien es la novata! – entró de golpe Sonata con una sonrisa en el rostro y terminando de arreglar su peinado con una simpática cola de cabello, dio una rápida vista a la mesa donde estaba el desayuno y articulo su boca en una perfecta "O" por el asombro.

- Wow... -

- Eso es lo que yo dije – agregó Aria cómicamente

- Pero no es mi cumpleaños... ¿O sí?