CAPITULO 34

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Al día siguiente Lauren y Camila dormían plácidamente en el cuarto, abrazadas, hasta que Ally entró y rompió todo silencio.

- ¡Buenos días! –Gritó, entrando en el cuarto, provocando así que la habitación se llenara de luz-

- Hmmm -Murmuraba Camila, abrazándose más a Lauren, ocultando su cara en la sábana para que la luz no le molestara-

- ¡Despiértense que nos vamos de acampada! –Continuaba gritando Ally, dirigiéndose a las ventanas, abriéndolas para que entrara más luz-

- ¡No! –Gritaba Camila, aún con los ojos cerrados-

Lauren, hasta ahora, se mantenía con los ojos cerrados, sin decir ni hacer nada.

- ¡Vamos! –Volvió a gritar la morena-

- Ay, ¡ya! –Gritó esta vez Camila, incorporándose, acomodándose el pelo-

- Despierta a Lauren, yo voy a despertar a Troy

- Vale –Dijo desganada la castaña- Cariño -Se inclinó, mirando de cerca la carita de Lauren, dormida- Despiértate -Le decía, acariciándole las mejillas-

Lauren no respondió a sus llamados.

- Venga, que Ally se va a enfadar despiértate

Nuevamente, Lauren no hizo ni dijo nada, cosa que empezaba a preocuparla.

- Lolo, ya, despiértate –Le decía, dándole suaves golpes en la mejilla-

La pelinegra se mantuvo en esa postura sin pronunciar nada, cosa que le extrañaba bastante a Camila y, para prevenir cualquier cosa, llevó su mano al cuello de Lauren para tomarle el pulso. Se asustó mucho cuando, aparentemente, no sentía ningún pulso.

- ¿Lauren? Lauren, ¿qué te pasa? –Comenzó a darle golpes más fuertes en la cara, nerviosa- Cariño, ¡por Dios!

De repente Lauren abrió los ojos, riéndose; todo era una broma.

Le soltó la cara- Mierda.

Se rió- Tenías que haberte visto la cara cariño

La miró- ¿Estás tonta? Me asustaste, joder –Molesta-

- Bueno, perdóname, solo fue una bromita

- ¡Ese tipo de bromas no me gusta, pensé que te había pasado algo!

- Vale, lo siento, pero no te enojes -Decía, jalándola-

- No me lo hagas más -Decía, dejando que Lauren jalara de ella, recostándose así en el pecho de la pelinegra-

- Te lo prometo -Le dijo, dándole besos en la mejilla- ¿Cómo dormiste?

Sonrió- Muy bien, extrañé mi cama, pero bien -Se rió- ¿Y tú?

- Genial, la cama está muy cómoda

- Pues sí, pero la mía está mejor -Lauren se rió- Estoy enamorada de mi cama -Se declaró la castaña-

- ¿Cómo? -Se incorporó un poco para poder mirarla- Me voy a poner celosa

Se rió- Tonta -Agarrándole las mejillas- Te amo a ti, solo a ti

Lauren, después de sonreír ampliamente, le dio un corto beso en los labios; beso que fue interrumpido por Ally.

- Perfecto, ya estamos todos despiertos, a desayunar –Ordenó-

Ambas la miraron- ¿Y Troy? –Preguntó Lauren-

- Ya lo desperté, está en su cuarto, vistiéndose

Un Amor Inevitable 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora