CAPITULO 46

1.9K 88 1
                                    

Pasaron una semana realmente buena. Troy se había tomado en serio lo de mejorar, ya comía como siempre, tenía la misma actitud de antes y, lo más importante: su relación con Ally iba cada vez mejor. Por otro lado, Rubí no había vuelto a aparecer ni a llamar; Camila hacía su trabajo en casa, con ayuda de Lauren y, hasta ahora, no se había producido ninguna pelea. Ahora Camila y Lauren se encontraban en la cocina; Camila haciendo la comida y Lauren sentada en la mesa.

- Acuérdate de que hoy vamos a buscar a Paula, hace una semana que no la vemos –Dijo Camila a Lauren, pero la pelinegra no respondió- ¿Cariño? –No se podía voltear para mirarla pues intentaba batir el huevo- ¿Lauren? –Dejó lo que hacía y se volteó- Cariño, si quieres llamar a tu madre, hazlo –Le dijo Camila, observando como la pelinegra tenía el móvil en sus manos, pensando.

Salió de su transe- No, no, da igual.

Se secó las manos y se sentó a su lado- ¿Por qué no la quieres llamar?

- Porque después de la discusión que tuvimos es ella la que me tiene que llamar, no yo.

- Cariño, es tu mamá

- Y yo soy su hija, no la voy a llamar y punto –Camila suspiró- ¿Qué me estabas diciendo antes?

- Que te acuerdes de que luego vamos a salir con Paula –Repitió-

- Ah, sí, ya lo sé.

- ¿Ya lo sabes? –Levantándose- A ver, ¿a dónde vamos a ir con la niña?

Guardó silencio un momento- Pues a a ¿a comer un helado?

La miró mal- Vamos a ir a buscarla al colegio para, como siempre, llevarla al parque

Se rió- Bueno, yo dije algo parecido

- Sí, súper parecido –Irónicamente, riéndose-

Se levantó- Lo siento, tengo la cabeza en otro sitio

- Ya, eso ya lo sé tienes la cabeza en México, con tu mamá. -Llevó sus manos a la cara de la pelinegra- Llámala, seguro que así te vas a sentir mejor

- No quiero llamarla

Suspiró- Pues nada, haz lo que quieras –Notó como la mirada de Lauren bajaba- ¿Qué miras? –Le preguntó-

Se rió- Te ves muy bien con ese delantal –Pasando sus manos alrededor de la cintura de Camila-

Se rió- ¿A qué sí? –Pasando sus malos alrededor del cuello de Lauren- Estoy hermosa –Sonriendo, acercando sus labios a los de Lauren-

- Preciosa –Sonriendo también, poniendo de su parte en dicho acercamiento-

Le dio un corto beso y luego se separó- Bellísima –La volvió a besar-

Correspondió un momento al beso después se separó, riendo- No, tanto no, no seas tan cursi –Otro beso-

Otro beso- ¿Por qué siempre me dices que soy cursi? -Otro beso, esta vez más largo-

Alargó un poco el beso y se separó- Porque si, porque eres cursi -Pegándola a la encimera, bajando sus manos al trasero de Camila-'

Se rió. Notando como las manos de Lauren cubrían su trasero- Y tú te calientas muy rápido –La volvió a besar, esta vez usando su lengua-

Intentó jugar con la lengua de Camila, pero cuando lo iba a hacer, la castaña se separó- Y a ti te gusta calentarme –Le dijo Lauren-

Sonrió pícaramente- Así es –Volviéndola a besar-

Después de eso beso las palabras se acabaron, se besaban locamente, con pasión, usando sus lenguas. Camila había metido sus manos por dentro de la camisa de Lauren, acariciándole la espalda, consiguiendo que su piel se erizara. Lauren, por su parte, había subido sus manos al nudo del delantal, dispuesta a desabrocharlo.

Un Amor Inevitable 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora