Un Amor Inevitable 2

CAPITULO 35

- ¿Cómo estás? –Preguntó Camila, mientras se separaba-

- Bien -Le sonrió-

- Bueno, eso no me lo creo, pero ya hablaremos tú y yo -Le dijo-

La conversación fue interrumpida por el móvil de Lauren, que volvía a sonar.

- Joder -Se levantó la pelinegra, con el móvil en las manos-

- Cariño... –Se volvió a acercar a ella- Relájate, ¿vale? Es mejor que no le contestes

- No, es que ahora no es mi mamá, ahora es la ***** de Rubí

- ¿Qué? –Cogió el móvil, mirando la pantallita- ¿Otra vez?

- Sí, pero ¿sabes qué? –Cogió, otra vez, ella el móvil- Se van a ir a la mierda todos –Dicho esto lo apagó-

- Perfecto, eso es lo mejor que podías hacer –Dijo Camila-,

- Además está preparado el desayuno, ¿comemos y ya nos vamos? –Propuso Ally-

- Eh no, Lauren y yo vamos a hablar un momento –Dijo Camila, agarrando a Lauren del brazo- ustedes vayan desayunando, ya volvemos

Camila se llevó a Lauren a uno de los cuartos. Una vez dentro:

- ¿Estás bien? –Le preguntó-

Suspiró- No –Se apoyó en una de las paredes, con la cabeza gacha- Estoy harta de mi mamá, de Rubí, de todos -Levantó la cabeza, con los ojos húmedos- Ya no puedo más

- Ven aquí -Dicho esto la abrazó-

- Están pasando demasiadas cosas juntas -Secándose las lágrimas mientras abrazaba a Camila- Primero lo de Rubí, después lo de mi mamá, luego lo de la boda, ahora lo de Troy

Se separó- Vamos a ver cariño -Le levantó la cara- Lo de Rubí ya fue, ¿vale? Te perdoné y ya está todo bien. A tu mamá ni le hagas caso, lo que piense de mí no importa. Lo de la boda, pues si no estás preparada esperamos, no pasa nada. Y lo de Troy no lo quieres, no es tu culpa, es él quien se está hundiendo a sí mismo.

- Si, lo de Rubí ya fue, pero sigue jodiendo la muy estúpida. A mi mamá si le hago caso, ¿por qué no se da cuenta de que soy feliz así y ella lo único que hace es hundirme? Joder

La castaña guardó silencio, no tenía palabras para responderle, pues sabía perfectamente que, en realidad, Lauren tenía razón. Aun así intentó cambiar de conversación:

- Bueno -Llevó sus manos a la cara de Lauren, secándole las lágrimas- Olvidémonos de todos los problemas aunque sea por dos días vinimos aquí para descansar y para estar las dos juntas, sin problemas -Suspiró- Disfrutémoslo, ¿sí?

Asintió con la cabeza- Sí, tienes razón, lo siento

Sonrió y, seguidamente, le dio un corto beso en los labios- ¿Cómo está Troy? –Preguntó-

- Mal, muy mal, pero bueno ya hablé con él y le dije como están las cosas, no puedo hacer más

- Después hablaré yo con él

- Vale pero ya vámonos, no quiero pensar más en mi mamá -Pidió Lauren-

Camila y Lauren se unieron al desayuno, con Troy y Ally.

- ¿Mauri y Poncho no vienen? –Preguntó Troy-

- No, nos esperan en la playa –Respondió Ally-

- Oigan yo la verdad sigo pensando que esos dos se traen algo –Dijo Lauren-

- Cariño, ¿otra vez? –Se rió Camila- Mauri si es gay, ¡pero Poncho no!

- Bueno, nosotras tampoco éramos lesbianas y míranos –Todos se rieron, aunque Troy lo hizo sin muchas ganas-