Capítulo 12

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- Pero ahora vete, por favor -Le pidió Lauren-

- Está bien, me voy, pero no me dejes plantada

Rubí continuó su camino, no sin antes sonreírle victoriosamente a Camila. Lauren se volvió a acercar a ellas.

- ¿Qué te dijo esa gol*fa? –Le preguntó Camila-

- Nada, que estaba aquí de casualidad y le dejé claro que no quería volver a verla –Mintió-, así que ya no te preocupes más por ella, ¿vale?

- ¿Segura?

- Si

- ¿Quién era esa? –Preguntó Paula, quien andaba perdida en esa situación-

- Rubí, una amiga –Le respondió Lauren-

- ¿Una amiga? –Preguntó Paula- Pues te miraba cómo si quisiera comerte

- ¿Viste? –Dijo Camila- ¡No soy la única que se da cuenta!

- Me cae bastante mal camina como si fuera una modelo -Continuó Paula-

- Bueno ¿nos vamos? –Comenzó a caminar Lauren, intentando que olvidaran ese tema-

- -Comenzaron a caminar al lado de Lauren- Cariño, ¿ves? ¡Hasta una niña de siete años se da cuenta! –Le dijo Camila a Lauren-

- ¿Se van a pasar todo el camino hablando de lo mismo? –Preguntó la pelinegra-

- Es que Lern parece que te quiere enseñar las bubis –Añadió Paula- No me gusta esa tipa –Finalizó la niña-

- Ay Paulita, si yo te contara -Suspiró Camila-

- Cuenta, cuenta, yo quiero saber –Pidió la niña-

- Pues mira -Fue a comenzar Camila-

- Camila, ni se te ocurra abrir la boca –La interrumpió Lauren-, tiene siete años, ¿cómo le vas a contar?

- Vale, tienes razón -Decidió callarse Camila-

- Pero yo quiero saber -Insistía Paula-

- Todavía eres pequeña para saber esas cosas -Le dijo Lauren-

- Jo vale -Se resignó la niña- ¿Queda mucho? –Refiriéndose al parque de atracciones-

- No, ya casi estamos –Le respondió la castaña-

En poco tiempo llegaron al parque de atracciones. Una vez allí se subieron en las pocas atracciones a las que Paula podía subir y, para descansar un poco llevaron a Paula al parque, ellas se sentaron en un banco. Lauren estuvo todo el tiempo callada, sonreía lo justo, cosa que a Camila le extrañó, así que aprovechó ese momento para preguntarle:

- Lern -Le palmeó el muslo, mirándola- ¿Qué te pasa?

- ¿A mí? Nada, ¿por qué?

- Llevas todo el rato seria ¿Segura de qué Rubí no te dijo nada?

- Si, segura le dije que ella no se iba a meter entre nosotras, que se olvidara de mí y ya que no la quería volver a ver -Volvió a mentir-

- Gracias... –Le dijo, sonriendo-

Fueron interrumpidas por Paula, quien se sentó al lado de ellas.

- Oigan ¿ya llamaron a mi mamá para decirle que me quedo con ustedes el fin de semana? –Les preguntó-

- Mier*da –La castaña se levantó-, se me había olvidado -Sacando el móvil- La voy a llamar, ya vengo. –Se alejó para hablar-

Lauren y Paula se quedaron ahí sentadas; la niña miraba fijamente a Lauren, cosa que inquietaba a la pelinegra.

Un Amor Inevitable 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora