CAPITULO 52

1.7K 100 5
                                    

Cuando todavía no había pasado ni media hora, salió el doctor, algo agitado.

- Camila, por favor, ven –Pidió-

Se asustó- ¿Qué pasó? –Se levantó rápidamente, acercándose a él-

- Se puso muy nerviosa, necesitamos que entres a tranquilizarla.

- ¿Por qué? ¿Qué le pasó? –Decía, entrando con el doctor-

- No lo sé, le dio un ataque de ansiedad y de verdad que sus pulmones necesitan que esté tranquila

Se escuchaban gritos- ¿Es ella? –Se sorprendió, pues se escuchaban los gritos de una mujer-

- Sí, no deja que la sedemos y las enfermeras están intentando tranquilizarla, pero no funciona.

Camila entró en el cuarto y vio a Lauren gritando como una loca, intentando esquivar a las enfermeras y levantarse de la cama, con todas esas máquinas pitando rápidamente.

- Lauren, Lauren –Dijo, acercándose a ella, agarrándola- ¿Qué pasa cariño? Tranquila, ¿vale?

- Me quiero ir de aquí Mila, yo no me quiero morir tirada en esta cama, por favor –Decía muy nerviosa-

- No te vas a morir, tienes que tranquilizarte, ¿sí? Yo estoy aquí contigo, no te va a pasar nada.

- Esto es una mierda, yo no quiero estar aquí, no me quiero morir –Decía llorando-

No pudo evitar llorar- No te vas a morir cariño, te vas a poner bien.

- ¡No me mientas tú también! –Gritó con rabia, derramando más lágrimas- Me dijeron que me tienen que trasplantar un pulmón, yo no quiero que me trasplanten nada, ¡yo me quiero ir de esta puta cama, joder

- Cariño, por favor, tranquilízate –Pidió, secándose las lágrimas y secándoselas a Lauren- Mira, escúchame te van a trasplantar el pulmón porque lo tiene muy dañado, pero cuando hagan eso te vas a poner mucho mejor

- ¿Y si me muero en el quirófano? ¡No me quiero trasplantar nada! ¿Por qué vino mi mamá? ¿Por qué la avisaste? –Preguntaba y decía nerviosamente-

- Porque si, porque es tu mamá y te adora.

- Mila, yo te amo, yo no me quiero morir yo quiero seguir viéndote todas las mañanas, quiero casarme contigo, quiero...

Sin dejarla acabar- NO TE VAS A MORIR, LAUREN –Le dijo muy lentamente, intentando que eso sirviera para que lo entendiera- Y cuando salgas de esta cama, si tu quieres, nos subimos al altar, ¿vale?-Sonrió, acariciándole la cara- Pero ahora tranquila –Lauren asintió con la cabeza-

- ¿Por qué no me dejas sedarte? Es mejor que estés dormida –Le dijo el Doctor-

- No, no, no quiero que me duerman, Mila, por favor -Pidió Lauren, nuevamente nerviosa-

- Si no te duermen te va a doler todo... es mejor que te duerman para que no sientas nada -Intentaba convencerla Camila-

- No, no quiero por favor, quiero estar despierta

- Pues como quieras Lauren, pero te vas a sentir muy mal –Le dijo el Doctor-

- Me da igual, pero quédate conmigo -Pidió, agarrando la mano de Camila-

Camila miró al doctor, intentando averiguar si la dejaría quedarse.

- Está bien, solo un rato -Aceptó

- Gracias –Sonrió Camila-

- Las dejo a solas, Lauren, por favor, intenta no ponerte nerviosa y no hablar -La pelinegra asintió con la cabeza-

Un Amor Inevitable 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora