CAPITULO 38

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Poncho ponía todo su empeño en nadar hacia Lauren, pero la corriente era demasiado fuerte y lo arrastraba. Lauren iba chocando con todo lo que encontraba a su paso, hasta que, milagrosamente, consiguió agarrarse a una de esas picudas rocas; fue ahí cuando Poncho logró nadar hacia ella. Apenas cuando Poncho estaba llegando, Lauren se desmayó; sumergiéndose ligeramente bajo el agua, pues se había golpeado muy fuerte la cabeza y había tragado demasiada agua. Afortunadamente Poncho la sacó a la superficie en cuestión de segundos, agarrándola como podía.

- ¡La tengo! –Anunció Poncho, desde el agua, intentando agarrar a Lauren y agarrarse él a la roca-

- ¡Sácala Poncho, sácala! –Pedía Camila, ya llorando-

Mauricio, quien ya había ayudado a Troy y a Ally a llegar a la orilla, se acercó a Camila.

- ¿¡Qué hacen ahí?! –Preguntó sorprendido, mirando la escena-

- ¡Lauren se cayó y Poncho la está intentando sacar, pero la corriente es muy fuerte! –Explicaba la castaña, llorando-

Mauricio analizó unos segundos la escena y, después, dio varios pasos hacia delante, inclinándose al máximo en la roca.

- Mauricio, ¿qué haces? ¡Te vas a caer! –Le decía Camila-

- Obvió su comentario- Poncho, ¿puedes nadar hasta aquí? –Poncho lo miró, dudando- Son solo unos metros –Informó-

- ¡La corriente es muy fuerte y Lauren está desmayada, no sé si puedo llegar hasta allí!

- ¡¿Desmayada?! –Se puso aún más nerviosa Camila, pues no se había dado cuenta de que Lauren estaba desmayada-

- ¡Inténtalo! –Volvió a pedir Mauricio-

ni si quiera pensárselo Poncho nadó, agarrando a Lauren, con todas sus fuerzas; le costó, pero, finalmente, lo consiguió. En cuanto llegó Mauricio extendió ambas manos, subiendo a Lauren y, seguidamente, ayudó a subir a Poncho. Camila intentó tocar a Lauren, pero rápidamente, Poncho la cogió en brazos (a Lauren) y comenzó a saltar rocas en dirección a la orilla.

- ¡Rápido, Mauricio, coge a Mila!

Mauricio obedeció y, ambos, comenzaron el camino de vuelta a la orilla. Camila no decía nada, iba en brazos de Mauricio, pero muy nerviosa, pues no sabía si Lauren estaba bien o mal.

Llegaron hasta la playa y, en cuanto lo hicieron, Poncho dejó a Lauren en la arena, boca a arriba, llevando sus manos a la garganta de ésta, aparentemente mirándole las pulsaciones.

- Mierda. –Dijo él-

- ¿Mierda? ¿Mierda qué? –Preguntaba Camila nerviosa, quien ya se había bajado de los brazos de Mauricio-

Poncho no respondió a la pregunta de Camila, llevó sus manos al pecho de Lauren y comenzó a empujar firmemente. Después de hacer eso tres veces, unió sus labios con los de Lauren, soplando. Fue ahí cuando Camila supo que estaba haciéndole el conocido boca a boca.

- ¿¡Qué le pasa!? –Gritó esta vez Camila, intentando que eso sirviera para que alguien respondiera-

- Tragó mucha agua–Respondió por fin Poncho-

Poncho repitió una y otra vez los movimientos del boca a boca hasta que, por fin, Lauren se incorporó y comenzó a escupir agua, bruscamente.

Sonrió, tranquilo por haber conseguido lo que se propuso- Tranquila, echa todo el agua -Le decía pacientemente, dándole suaves golpes en la espalda-

Camila respiró hondo, más tranquila por ver que Lauren había despertado y expulsaba toda el agua tragada. Cuando la pelinegra acabo de echar el agua volvió a su postura inicial, asfixiada, respirando con rapidez.

Un Amor Inevitable 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora