El Amor De Un Príncipe ▪YoonMin▪

EPÍLOGO

—¡Mira papá, hice un avión! — Un JiHoon bastante emocionado saltaba mostrando su figura de papel a YoonGi.

El pelinegro sonrió hacia su hijo.

—Te felicito JiHoon...eres muy creativo — le felicitó.

Ahora mismo la familia real estaba en el carruaje donde los llevarían  a visitar a alguien.

Jimin estaba bastante emocionado también, las cosas de hace años habían cambiado mucho.

Las nuevas leyes que YoonGi había puesto era muy favorable para todos.

—¡Papi! ¡Mira vuela! — JiHoon golpeó su rostro levemente con el avion de papel.

Jimin lo alejó riendo — Si cielo, que genial. — agregó.

Ya faltaban unos pocos minutos para llegar a la casa de esa persona que Jimin había insistido ver. Y aunque YoonGi se había negado, al final no pudo resisitirse.

—Su majestad, llegamos — dijo un sirviente cuando el carruaje había parado.

YoonGi entrelazo la mano con la de Jimin, éste último sin dejar a su pequeño que seguía brincando de alegría.

—¿Dónde estamos? — preguntó JiHoon cuando bajaron y frente a ellos tenían una casita.

—Pues...es una sorpresa — Jimin le sonrió.

JiHoon frunció el ceño — ¿Una sorpresa? — preguntó — ¡¿Me regalarán un león como mascota?! — gritó.

—¿Qué dices? Claro que no — YoonGi le respondió divertido.

JiHoon hizo un puchero. Pero tan pronto había cruzado sus brazos una mujer anciana salió de esa pequeña casita.

JiHoon quiso escapar cuando la mujer le apretujo las mejillas fuertemente. Ni sus dos  abuelas hacían eso.

Los mayores rieron al ver a su hijo incómodo por los mimos de la anciana.

—¡Este niño cada vez esta más grande! — dijo la anciana muy alegre.

Jimin sonrió cuando la mujer abrazó a YoonGi y a él.

—Y bueno...¿Qué les trae por aquí? — preguntó la anciana sin soltar las manos del rubio.

—Bueno...queriamos que JiHoon la conozca abuela — YoonGi habló. 

—Oh por supuesto que si...— la mujer sonrió — ¿Quieres hacer galletas conmigo JiHoon? — preguntó viendo al niño.

El pequeño sonrió en grande — ¡Si! Quiero muchas galletas.

—Entonces ven y ayúdame — la anciana le tendió la mano al niño para que la tomase y poder hacer galletas.

YoonGi y tanto como Jimin rieron viendo a su hijo muy emocionado y alegre haciendo galletas.

La abuela que ahora estaba un poco más cansada -y es que los años no habían pasado en vano- hacía galletas con él niño alegremente.

Jimin dejó caer su cabeza en el hombro de YoonGi quien entrelazó sus dedos con cariño.

—Me pregunto si es que JiHoon sería felíz si lo dejamos aquí — Jimin habló sin dejar de mirar a su pequeño.

Aveces se ponía a pensar que el Palacio era muy agitado para el pequeño.  Tener que seguir cada regla era simplemente cansador tanto para Jimin como para su hijo.

YoonGi solo dejó un beso en los cabellos rubios de su pareja.

—Quiero que JiHonnie sea felíz — habló de nuevo.